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—Maldición

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—Maldición...

Llevaba ya algunos minutos revisando el área cercana a donde se había encontrado con Sonic y los demás.

No había nada que pudiera darle una leve idea de donde podría estar Amy o si se encontraba herida de gravedad... Agitó la cabeza levemente ante el último pensamiento. Estaba bastante seguro que donde sea que estuviera la chica, ella estaba bien.

—No es tan débil para caer en algo como esto. —Murmuro deteniéndose un momento— No fue una explosión demasiado grande si el farsante y los otros están bien...

Comenzó a caminar lentamente, examinando la zona. Los árboles tenían leves signos de daño por lo que la chica no podría estar demasiado lejos. Revisó el suelo en busca de algún rastro de pisadas para tratar de adivinar qué era lo que había pasado en ese lugar unas horas atrás. Había huellas de animales pero nada más.

— ¿Dónde te metiste, Rose? —Levanto la vista hacia el cielo pero esta era obstaculizada por las ramas de los árboles— ¿Dónde...?

El sonido de algunos arbustos moviéndose llamo su atención, haciéndolo mirar por sobre su hombro pero sin volverse completamente. Se mantuvo quieto en espera de lo que fuera a pasar.

Una mata de pelaje rosa se dejó ver entre el verde del follaje acompañada de algunos quejidos femeninos. Una diadema roja mantenían peinadas las púas rosas, un vestido rojo con botones amarillos al frente y un cinturón violeta abrazaban la silueta femenina en conjunto a un par de mangas sueltas hasta la altura de los codos, también de color violeta. Finalmente un par de medias del mismo color, llegaban hasta la altura de sus muslos combinando con un par de zapatos rojos.

—Creo que era por aquí... —Bufó molesta al salir de los arbustos— ¿Me habré equivocado?

Mirando en todas direcciones, menos hacia delante, Amy Rose aparecía de detrás de un arbusto, bastante confundida de su ubicación actual.

—Rose. —Llamó Shadow, girándose completamente para quedar de frente a la fémina que le devolvía la mirada, asombrada de verlo de pie frente a ella.

—Shadow... ¡Shadow!

Sin entender bien como, por que o en qué momento, Shadow estaba siendo abrazado efusivamente por una muy preocupada y alegre Amy que le rodeaba la cintura con sus brazos, apretando su rostro contra el torso masculino.

—Oh Shadow, estaba tan preocupada.

No movió sus brazos para corresponder al abrazo, se mantuvo estoico ante la muestra de afecto de parte de la fémina. No estaba muy seguro de que hacer o responder ante ello, pero no iba a negar que en ese momento se sentía mucho más tranquilo al por fin saberla bien.

—Te dije... —Murmuró agachando un poco su cabeza, acercándose a las orejas femeninas— que no me hicieras venir a rescatarte si dejabas que ese impostor hiciera sus estupideces.

—Lo sé. —Aferro la fuerza del abrazo— Me confié un poco...

Mantuvieron esa posición un rato más, pareciera que Amy no tenía ninguna intención de soltar a Shadow y este no tenía intención de detenerla. Luego de un rato, Shadow solo puso suspirar cansadamente, cosa que llamo la atención de la fémina que se separó un poco para mirar al chico.

— ¿Por qué suspiras? ¿Qué significa esa mirada? —Separo su rostro del pecho masculino sin deshacer el abrazo— ¿No estabas preocupado por mí?

— ¿De que estas...?

— ¡Eres un bobo! —Libero a Shadow de su agarre para poder cubrirse el rostro con sus manos y comenzar un pequeño berrinche— y yo preocupada porque tenía que verte hoy y tu no querías verme.

Shadow la dejo hacer sin quitarle la vista de encima. El peso en su pecho se había ido en cuanto la vio sana y salva, dejándolo respirar con más tranquilidad. Ahora solo quedaba hacer una cosa.

— ¿Que es lo que ocurrió, Rose? —Cruzo sus brazos— ¿Porque “desapareciste"?

—¿Eh? —Detuvo su berrinche para mirar al de vetas rojas— Bueno... Es... Algo divertido a decir verdad ... —Se rascó la mejilla izquierda con el dedo índice— Verás, estábamos luchando contra unos robots pero de algún modo quedé rodeada por ellos ¡Tenía todo bajo control! Estaba por usar mi martillo cuando escuché que todos gritaron mi nombre y... Todos trataron de ayudarme; Tails disparo desde su avión haciendo que Sonic empujara al más grande hasta donde yo estaba al mismo tiempo que Knuckles golpeaba el suelo lo que causó que Silver perdiera el equilibrio y en lugar de lanzar lejos al robot... Me lanzó a mi, bastante lejos debo decir, de hecho termine en la ciudad. Quise contactarlos pero mi comunicador está roto y tuve que pasar la noche en un hotel. Compre algo de ropa porque la mía termino quemada y muy rota.

En ese momento Shadow estaba a nada de irse por dónde vino y moler a golpes a todo el team Sonic con Silver incluído.

—Esos idiotas.

— ¿Que haces aquí, por cierto? —Lo miro confundida— ¿No deberías estar en G.U.N.?

—Estaba terminando una misión cuando Rouge me dijo que habías desaparecido.

— ¿Viniste a buscarme? ¡Oh, por Chaos! —Se cubrió las mejillas con ambas manos— ¡Haces que me sonroje!

—Como sea, estás bien. —Se dió media vuelta para comenzar a caminar— Vámonos.

— ¡Si! —Sonriendo animada, se apresuro a alcanzar al erizo— y ¿Que te parece mi nueva ropa? ¿Es linda?

—Hmn. —Fue lo único que respondió sin dejar de caminar con una sonriente Amy a su lado.

—Me alegra que vinieras a buscarme.

—Solo quédate cerca de mi para que no vuelvas a perderte o tendré que ponerte un rastreador.

Aquello último se quedó anotado en la lista mental de pendientes para Shadow, justo después de golpear al team Sonic, pero sobre todo, darle un buen golpe a Silver para que así aprendiera a controlar más sus poderes.


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