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— ¿Sabes que es lo que ocurre con Sonic, Amy?

—No lo sé. —Sonreía animada.

El pequeño zorro de pelaje amarillo miraba con confusión a su mejor amigo que ahora parecía ignorar olímpicamente a la erizo de púas rosas que actuaba muy alegre, casi como si no le importara la actitud de Sonic con ella.

Knuckles bostezaba aburrido mientras veía a Amy jugar "piedra, papel o tijeras" con Silver.

— ¡Gane! —Gritó emocionada ante un deprimido Silver.

— ¿Ya nos podemos ir? Tengo que llegar a la Master Esmerald antes de que esa mujer intente llevársela.

— Rouge esta de misión, quizá regrese en un par de días. —Contestó animada Amy.

— "Esta de misión" —Hizo un intento de voz chillona— Ahora también sabe cuándo salen de misión...

— ¿Dijiste algo, Sonic?

—No dije nada. —Hizo un puchero, confundiendo aún más a Tails.

Amy y Silver seguían inmersos en su juego, ignorando lo que ocurría a su alrededor.

El platino sonreía divertido al notar la euforia en la actitud femenina que aunque perdiera, ella sonreía y seguía jugando sin dejar de tararear una alegre melodía. Le gustaba saber que una de sus mejores amigas se encontraba tan rebosante de felicidad pero no recordaba que hubiese pasado algo que ameritara que ella estuviese así... o al menos que sucediera cuando él estaba dormido. Eso le recordó algo.

—Es cierto... ¿Dónde está Shadow? —Nadie notó el sobresalto de Sonic.

—Ahora que lo mencionas no lo he visto... —Tails revisaba el ala de su avión— Tal vez esta por ahí... ¿Puedes pasarme la llave, Sonic?

—No lo veo desde ayer en la noche. —Knuckles miró a la rosada— ¿No se quedó haciendo guardia contigo, Amy?

—Oh... eh... si, hicimos guardia... —Cubrió sus mejillas para ocultar su sonrojo— Pero luego me fui a dormir... Se quedó con Sonic después...

— ¿Con Sonic? —Los tres miraron confundidos al nombrado que aún les daba la espalda.

— ¿Sonic? ... —Mantenía sus manos entre los cables de su avión— La llave...

—Él se fue. A mitad de la noche. Dijo algo de tener mejores cosas que hacer. —Hablo entre balbuceos, ignorando al zorro que intentaba tomar la herramienta que estaba junto a su pie— Y solo se fue. Si, se fue.

—Bueno, supongo que es normal. —Silver alzo los hombros con indiferencia— Él no es de quedarse mucho en un lugar o de estar rodeado de gente.

—Como sea. ¿Podemos irnos ya? —Volvió a preguntar el equidna.

— ¡Si solo alguien me diera la bendita llave que necesito!

—Déjame ayudarte. —Se encamino a donde estaba el adorable zorrito intentando tomar su herramienta, seguido de Kunckles.

Amy los miraba trabajar sin dejar de cubrir sus mejillas. Sonic se disculpaba con Tails mientras que Silver miraba curioso el interior del avión y Knuckles seguía gritando sobre darse prisa para volver a Angel Island.

Se sentó sobre una gran roca que estaba cerca de ella para esperar a que los hombres terminarán con sus boberas y por fin pudieran ir a casa. Estaba ansiosa por llegar y comenzar a cocinar para todos en G.U.N. y agradecerles que hubiesen querido ir a buscarla.

Su vista pasó de sus amigos a su comunicador de muñeca, que ya había sido arreglado por Tails.

Cuando Shadow le dijo que se fuera a dormir, ella quiso hacer caso de verdad que sí, pero la curiosidad, y su corazón tamborileando en su pecho con fuerza, la hicieron esconderse detrás de un árbol para escuchar la conversación entre ambos erizos.

En el momento en que el azabache lanzó el reto a Sonic para ir a donde ella e hiciera.... Su corazón se apretó un poco.

Era extraño, semanas atrás hubiese saltado a los brazos del cobalto sin dudar pero ahora, la sola idea de algo así entre ella y Sonic le parecía... incomoda. El erizo azul ahora no era más que su mejor amigo, el héroe de todo Mobius, su héroe personal pero nada más.

Luego Shadow amenazó a Sonic de mantenerse alejado de ellos, porque ella claramente escucho un "ellos", su corazón volvió a latir con fuerza haciéndola sonrojar y moverse torpemente hasta su cama improvisada.

Con cuidado de no ser oída por los demás, usó su comunicador para tratar de llamar a Rouge. Ese era un tema de chicas y la albina era la única mujer a la que le tenía esa confianza, además de ser compañera de Shadow. ¿Quién mejor que ella para interpretar las palabras del erizo mitad alienígena?

La conversación femenina duró un par de horas, entre que Amy aseguraba estar bien y que Rouge amenazaba con golpear al equidna, finalmente llegaron al tema de importancia. Amy le contó con detalles lo que había sucedido entre ella y Shadow antes y después de la interrupción de Sonic. La murciélago escucho con calma hasta que su amiga termino y cuando esta hubo terminado le respondió con una risa jovial.

"Querida, eso es lo más cerca que obtendrás de una declaración por parte de Shadow."

Y con esa simple frase, Rouge se despidió para cortar la comunicación dejando a Amy aún más sonrojada y con una sensación de alegría en el pecho que continuo hasta el día siguiente.

Nada ni nadie le arruinaría su buen humor ese día, ni siquiera la explosión que acababa de ocurrir en el avión de Tails a causa de Knuckles que había golpeado donde no debía, haciendo que Tails jalara algunos cables, atrapando las manos de Silver que fue empujado por Sonic al intentar detener a Kuncles y salvar al zorro.

.

—Esto será una linda sorpresa para pinky. ¿No lo crees, Omega?

El enorme robot no emitió más que ruidos provenientes de sus circuitos. La albina sonreía divertida mientras era ignorada por Shadow que mantenía sus brazos cruzados en su pecho.

—Puedo hablar con mi contacto para obtener un pequeño descuento para ti y pinky~

"Rouge, la señorita Amy sigue siendo menor de edad."

—Eso puede ser un problema. ¿Eh, Shadow?

— ¿No saben decir otra cosa que no sean estupideces?


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Once Upon a TimeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora