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— ¡Un brindis por las ingratas que te dejan por cualquier cosa que brille!
— ¡Knuckles bájate de ahí!
— ¡Un brindis por las que te cambian por tu versión pirata!
— ¡Salud, hermano! ¡Salud! —El cobalto y equidna chocaron sus jarras antes de beberse todo el alcohol.
— ¿¡Quieren bajarse de esa mesa!? ¿¡Como subieron ahí!? —Tails trataba de controlar a sus amigos ya algo pasados de copas.
— ¡Hey niño, dame otro trago!
—Deberías moderar tu consumo de alcohol, Vector. —El camaleón miro seriamente al cocodrilo— No querrás hacer el ridículo, de nuevo.
— ¡Otro trago, dije!
— ¡Mira cuanta comida! —El pequeño abejorro revoloteaba por la mesa llena de diferentes platillos— ¡Y todo se ve delicioso!
— ¡Gracias por estar conmigo en esta noche tan especial, chicos! —Silver levanto su jarra llena de cerveza mientras sonreía feliz— ¡Son los mejores!
— ¡No seas llorón niño! —El cocodrilo le lanzo una bola de servilletas al platino— ¡Compórtate como un hombre!
— Es que... —Gimió un poco, ahogándose con las lágrimas— Todos son tan buenos y amables y buenos amigos y los quiero mucho...
— ¡Quiere llorar, quiere llorar! —Sonic y Knuckles lo señalaban mientras un pequeño Tails ayudado por Charmy trataban de bajarlos de la mesa.
— ¡Todos son tan geniales! ¡Los quiero amigos!
— ¡Nada de joterias, niño! —El enorme cocodrilo golpeo la mesa con ambas manos— ¡Denme más cerveza!
—Compórtate, Vector. —El ninja tomo de su tarro con tranquilidad.
—Señor... ¿Viene con ellos? —Le pregunto un mesero.
Shadow se cubría el rostro con su mano zurda mientras sostenía su vaso con la diestra.
Llevaban ahí solo dos horas y los idiotas de Sonic y Knuckles ya estaban ebrios, Silver lloraba porque quería a todos, Vector regañaba al platino mientras que Espio bebía tranquilamente y los dos más pequeños o comían o cuidaban de los borrachos.
—No los conozco. —Mencionó antes de dar otro trago a su tarro.
— ¡Hey tú, cabeza de pulpo enojado! —La voz arrastrada de Sonic llamo la atención de ambos— ¡Tú y yo tenemos temas pendientes!
—Creí que no los conocía...
— ¿Qué demonios quieres, impostor? —Dejó el vaso sobre la madera de la barra antes de girarse y mirar a Sonic caminar, aunque más bien arrastraba sus pies, hasta donde estaba él.
