ᴀᴅᴏʀᴇ ʏᴏᴜ | volkabo ✓ (Sin Edición)

el ruso de ojos hermosos

━pss pss, Gustabo. ━escuchó a Emilio susurrarle en el banco de atrás ━wey pásame la dos.

El rubio mordió su mejilla interna para evitar que su risa lo delatara. ━no lo haré, debiste haber estudiado. ━le reprochó fingiendo fastidio. Le hacía gracia que aunque él le haya estado insistiendo toda la semana al moreno, aún así éste no hubiera estudiado nada. Y para más tenía los cojones para pedirle las respuestas, como si se las fuese a pasar con un chocolate de regalo.

━pero ya le dije que mi pinche abuelita enfermó y murió, por eso no pude hacerlo, ándale no sea cabronazo. ¿No ve que estoy de luto?

━si, por mis huevos. ━dijo antes de soltar una risita que llamó la atención del profesor. ━¿Cuántas abuelas se te murieron este mes eh?

━que soy latino, 'joputa. Que allá por el rancho todos somos familia y hay muchas abuelitas, ándele mí ciela, no sea malo.

━García y Escobilla. ¿Ya terminaron el examen? ━ los regañó.

Gustabo asintió con una sonrisa de autosuficiencia, guardó sus cosas en su mochila y se dirigió al escritorio de su profesor para entregar la hoja. ━buen trabajo, se puede retirar.

━gracias. ━sonrió de manera tímida.

━Escobilla deje de copiarse o le quito su hoja y reprueba directamente. ━advirtió el hombre a su amigo que miraba el trabajo de su compañera de banco.

Antes de salir por completo del aula escuchó las excusas del mexicano que logró sacarle una carcajada a él y a la mayoría de sus compañeros.

Se colocó los auriculares y comenzó a caminar en dirección a la cafetería. Eran aproximadamente las diez de la mañana por ende debería estar tranquila, y con tranquila se refería a vacía.

No le gustaba cuando estaba abarrotada de personas gritando y riéndose como simios alborotados. En realidad no le gustaban los lugares llenos de gente en general. Prefería mil veces la soledad y la tranquilidad de la biblioteca o de los jardines traseros de la escuela, donde rara vez se cruzaba con alguien.

Tal vez como primera impresión pareciera un bicho raro y antisocial, pero no lo era. Al menos no del todo pues si tenía varios amigos y era bueno socializando, podía ser amable y gracioso con cualquiera, pero de ahí a que disfrutara de la multitud y las personas había una distancia abismal.

Había gente en la escuela conocía su nombre, unos porque tenían las mismas clases que él, otros por alguna red social o porque simplemente lo veían pasar. Pero si de él dependiera pasaría el resto de su vida como un fantasma para pasar desapercibido.

Se sentó en una mesa ubicada casi en la esquina del lugar. Sacó su cuaderno y decidió hacer más tarea ya que tenía el resto de la hora libre.

Suspiró feliz. Por eso amaba la época de exámenes. Mientras los tontos de sus compañeros estaban uniendo sus únicas dos neuronas para resolver ecuaciones y responder preguntas, él podía disfrutar de la soledad que tanto ansiaba.

Además de que se sentía espectacular ser tan inteligente.

Su felicidad duró unos quince minutos como mucho. Fastidiado buscó con la mirada a los causantes de tanto caos en su momento de gloria.

Y como no, se topó con un grupo de último año. Jack caminaba por delante con su rostro de amargado de siempre, Greco e Ivanov iban molestándose mientras reían a carcajadas (los orangutanes ruidosos que le arruinaron su tranquilidad) y atrás de ellos estaba Viktor, con su semblante frío, serio y calculador de siempre. El ruso de ojos hermosos y mirada helada iba con las manos en sus bolsillos y la vista al frente imponiéndose ante todos.

No pudo apartar la vista de él hasta que se sentó en una mesa con sus amigos. Parecía estar hablando con el mayor de ellos, los dos estaban serios más no enojados ni preocupados.

Gustabo mordió su mejilla interna al darse cuenta que lo estaba mirando de más. Bajó su vista hacia su hoja de trabajo con las mejillas sonrojadas y calientes, sentía vergüenza por sus propios pensamientos.

Recordó a Emilio diciendo "no sea joto, cabrón" y no pudo detener su risilla tonta. Se tapó la boca con la mano para no ser tan escandaloso.

Levantó la vista hacia el grupo de chicos y se encontró con la mirada de Jack sobre él. Tenía una ceja levantada y los brazos cruzados.

El rubio se sonrojó violentamente. Joder, quizá pensaría que estaba loco o algo así, aunque eso no era del todo mentira.

Un rarito que se ríe sólo, vaya mierda.

Se colocó la capucha de su suéter negro y se encorvó lo máximo posible como si eso fuera la clave para desaparecer de allí.

Media hora después le llegó un mensaje de su mejor amigo.

Osito Cariñosito♡

dónde te encuentras
bbeeeeeeeeeeee.

Sonrió inconscientemente. Horacio tal vez era con la única persona que podía ser totalmente libre y sabía que jamás sería juzgado ni traicionado. "Eres como mí alma gemela pero en amigos" siempre decía. Y Gustabo no lo negaba.

Gustabo con b
Estoy es la cafetería haciendo tarea BB :p.

Osito Cariñosito♡
Yen2 :*.

Luego de unos minutos más, vio a su amigo entrar como solo él sabía hacer. Llamando la atención con su extravagante ropa colorida y su tan característica cresta.

Sonreía de manera amplia hacía Gustabo. ━¡Perla! ━medio gritó alargando la última letra. ━¿Cómo te fue en el examen? ━interrogó sentándose junto al rubio.

━bien. ¿Y el tuyo?. ━la diferencia en el tono de voz era clarísima. Mientras uno prácticamente gritaba, el otro parecía no querer ser escuchado.

━de putísima madre Perla. ━ le sonrió de lado a su amigo. Sonrisa que se convirtió en una mueca al ver quién estaba a unos metros de ellos. ━joder. ━murmuró. ━Gustabito de mi corazón, ¿Porqué no me avisas que él está aquí? ━le reprochó

El menor tardó en entender y cuando por fin lo hizo, se encogió de hombros. ━no sabía que te molestaría, lo siento. Si quieres nos vamos a otra parte. ━se apresuró a decir.

━no, de molestarme no lo hace. Pero podría pensar que lo estoy siguiendo y no quiero que parecer un acosador. Tu sabes que tengo una reputación que cuidar. ━dijo mirándose la uñas. Gustabo rió.

━no te preocupes por eso. ━ el único que parece acosador aquí soy yo. Pensó.