TEMBLANDO

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—Ven, cariño

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—Ven, cariño. Ven —le insistía—. Si vienes conmigo todo estará bien y saldremos de aquí, ¿sí? —extendía mi mano, pero no podía llegar a ella.

Aquella pequeña niña estaba debajo de la cama y yo no podía alcanzarla, ya que no cabía debajo de aquel mueble. Teníamos que salir de aquel lugar lo más rápido posible, pero ella estaba tan asustada que no se movía de su sitio.

—Vamos, cariño. Salgamos de aquí. Estaremos bien —le decía, pero nada cambiaba.

De pronto, oí un estruendo que hizo que voltee al instante. Era un sonido raro que no había escuchado jamás en mi vida... y hubiera deseado nunca escucharlo.

Escuché que algo se derrumbaba, al tiempo en que un avión se estrellaba contra el edificio.

No lo podía creer.

Abrí bien los ojos, me quedé estática por unos segundos al ver como el avión se acercaba a mí. Lo vi por la ventana de la habitación. 

Afortunadamente, cuando ya estaba bastante cerca, reaccioné y creé una gran burbuja para protegerme a mí y a la niña debajo de la cama. 

El avión se estrelló con el edificio, llegó a tocar mi burbuja pero no nos dañó. La niña, inmediatamente salió de su escondite y se aferró a mí. Al tiempo en que el avión se estrellaba, todo a su alrededor iba explotando.

Era simplemente espeluznante.

Cerré los ojos con fuerza para no ver nada mientras abrazaba a la niña a mi lado. Ella gritaba.

Escuchaba los gritos de las personas afuera del edificio. En el avión ya no se escuchaba nada.

—¿Qué hace un avión aquí? —me preguntó la niña.

—Lo mismo quisiera saber —contesté.

El avión era enorme y ya se veía bastante destruido y dañado. Me preguntaba mentalmente si había alguien dentro de él con vida. 

No pasaron muchos minutos hasta que me dieron la respuesta:

Help! Help! —escuché. Parecían ser niños. 

—Allí están. Mira —señalaba la niña con su dedo. Miré con atención a los últimos asientos y un par de niños rubios trataban de levantarse sus asientos. ¿Cómo diablos seguían vivos después de la explosión? La respuesta es que la explosión no afectó mucho a la parte final del avión. Además de que se protegieron con los asientos—. Tienen heridas.

—¡No se muevan! —les grité. Ellos voltearon a verme y fruncieron el ceño, dándome a entender que no me entendían. "¿Cómo se dice 'no se muevan' en inglés?", me pregunté—. Don't move! —me acordé.

Why not?! —preguntó el mayor, de unos siete años—. We need to get out of here! 

—¿Qué está diciendo? No le entiendo nada —comentó la niña a mi lado.

AVENTURAS #3Donde viven las historias. Descúbrelo ahora