Nuestra guardaespaldas

Todo ha terminado pt. 2

***********************UNA SEMANA DESPUÉS****************************

-Buenas tardes Capitán Chul, ¿quería hablar conmigo? -preguntó Wind entrando al despacho del Capitán.

-Buenas tardes Wind, pasa -dijo él señalando el asiento frente a su mesa para que ella se sentara.

-¿Qué ocurre? -preguntó ella.

-Bueno, primero de todo me gustaría preguntarte cómo te encuentras sé que ha pasado una semana pero con todo el papeleo de la misión no he podido ir a verte.

-La verdad es que me encuentro muy bien, todo ha sanado bien así que le agradezco su interés.

-Me alegro mucho, ahora...sabes que la misión ha terminado...

-...lo sé señor.

-¿Sabes lo que eso significa?

-Sí.

-¿Cuándo les darás la noticia?

-Sinceramente no lo sé, supongo que cuando termine de decidir quiénes serán sus guardaespaldas.

-Espero que sea pronto, sabes que no puedes tener relaciones en tu trabajo.

-Lo entiendo señor.

Después de aquella charla, Wind salió cabizbaja del despacho. Tener que alejarse de los chicos, que tanto le habían dado, que tanto la habían ayudado...sinceramente no iba a ser algo fácil. Y Namjoon...no tenía ni idea de lo que ocurriría con él.

Volvió a la casa dónde se encontró con Daniel y Héctor que reían junto a los chicos y entonces se le ocurrió una fantástica idea.

W: Parece ser que he encontrado a los chicos perfectos.

Fue corriendo al despacho y llamó a su padre.

-Dime hija -contestó él desde el otro lado del teléfono.

-Papá, ¿qué tal todo por ahí? ¿Cómo estás? -preguntó ella.

-...¿qué quieres? -dijo él sonriendo al teléfono.

-¿Cómo sabes que quiero algo?

-Kailanne, soy tu padre, te conozco.

Ella puso los ojos en blanco y rió.

-Bueno, verás... yo...sabes que la misión ha terminado y ya no puedo seguir siendo la guardaespaldas de los chicos.

-Entiendo, esto será bastante duro además porque tendrás que buscar al siguiente que te sustituya.

-Exacto. Y he encontrado a los chicos perfectos.

-¿Los?

-Sip, Daniel y Héctor son los chicos perfectos. Los entrené yo y son chicos de confianza, además de que ya se llevan genial con ellos.

-¿Y a ellos qué les parece?

-Aún no se lo he comentado, pero en cuanto termine de hablar contigo se los diré.

-Entonces, ¿para qué me llamas?

-Para pedirte el traslado...papá, sé que te dije que volvería a España, pero...he encontrado mi lugar aquí. Podré seguir ejerciendo mi profesión, pero me gustaría que fuese aquí en Corea.

Su padre suspiró pesadamente.

-Tarde o temprano sabía que esto pasaría, el Capitán Chul me lo dijo pero no quise escucharle. Me dijo que él estaría encantado de recibirte allí si decidías quedarte en Corea, así que supongo que no hay ningún problema -dijo él tristemente.