Nuestra guardaespaldas

Día en la base

Una mañana, mientras todos desayunaban en la cocina, Wind entró con una noticia.

-Buenos días chicos

-Buenos días Wind -contestaron todos a la vez.

-Bueno, como veo que estáis todos aquí, os daré la noticia. Todos habéis mejorado muchísimo en estas últimas dos semanas, así que hoy haremos un entrenamiento especial -anunció ella.

-¿Y en qué consiste ese entrenamiento? -preguntó RM.

-Bueno, hoy vamos a ir a la base del ejército, allí os dejaré con los instructores y ellos os dirán más, no quiero desvelar la sorpresa -dijo ella.

-Oooh vamos, no seas mala -dijo J-Hope haciendo aegyo.

-Lo siento, son órdenes de arriba -dijo ella saliendo de la habitación antes de darse por vencida ante J-Hope.

-Sé que no te puedes resistir a mí aegyo -dijo J-Hope desde la cocina.

-Lo siento, no te oigo, estoy muy lejos -gritó Wind desde el otro lado de la puerta. Todos se rieron y volvieron a desayunar.

Un rato mas tarde, todos estaban listos y esperando al coche que los llevaría hasta la base del ejército. Wind llevaba sus armas para entrenar también, pues necesitaba comprobar que funcionaban bien y calibrarlas. Los chicos, llevaban agua, y ropa para cambiarse allí, pues les esperaba un entrenamiento largo.

Al llegar allí, Wind les presentó al Capitán General Chul.

-Es un placer conocerles y un honor entrenarles aquí -dijo el Capitán General Chul. Los acompañó hasta las instalaciones en las que entrenarían hoy y les presentó a sus monitores. Wind les siguió hasta allí y se quedó observando desde una silla.

-Bienvenidos a nuestras instalaciones, la Sargento Wind me llamó expresamente para enseñarles algunas técnicas de defensa personal, así que espero que estén preparados, hoy no serán cantantes ni estrellas, hoy serán soldados y aprenderán a defenderse -anunció el monitor. El Capitán Chul observaba también con ella el entrenamiento de los chicos.

-¿Por qué no los entrenas tú? -le preguntó el Capitán.

-Porque quiero que tengan una base para poder enseñarles yo, además, conmigo no se lo tomarían tan en serio, estos chicos tendrían miedo de hacerme daño... -contestó ella -Por cierto, ¿cómo va la investigación?

-Pues parece como si la tierra se los hubiera tragado, no hay rastro de los tipos ni de la cosa que te atacó, pero últimamente tengo un sentimiento extraño, como si alguien estuviese vigilando el lugar. Hemos revisado cámaras y demás, pero no vemos nada fuera de lugar.

-¿Ha llegado algún soldado nuevo a la base? -preguntó ella preocupada.

-Un par de ellos, y uno con un gran nivel, no sé de dónde habrá salido el chico, pero se parece bastante a ti -dijo el Capitán.

Ella se quedó pensativa durante un rato hasta que el Capitán habló.

-Bueno, me alegro de que confíes en mi equipo para prepararlos -dijo el Capitán.

Wind iba a contestar cuando el monitor la llamó.

-Sargento Wind, ¿podría simular una pelea conmigo? -dijo el monitor.

-Por supuesto -contestó ella.

-No seas mala con él -le dijo el Capitán Chul riendo -No te confíes Dong-sun.

-Lo intentaré -dijo ella mientras se acercaba a ellos.

Ambos contrincantes se acercaron al centro de la sala y se saludaron. Wind no había vuelto a pelear contra nadie desde el rescate de los chicos, así que le vendría bien para poder ponerse en forma de nuevo. Todos los presentes se apartaron y dejaron espacio para poder observar la pelea. Ambos decidieron que Wind sería la defensora y Dong-sun le atacaría.