Nairobi.
-¡Espera, wacha!- escuché que gritaba atrás de mi -¿Qué te pasa? banca.
-¡No me pasa nada!- exclamé dándome la vuelta. -Dejame en paz, quiero irme.
Alzó la ceja. -¿Estás celosa?
-¿Yo?- me reí irónica. -Ni ahí.
Comenzó a reírse y me tomó por la cintura. -Dale, ¿te pensas que soy tonto? es obvio que estás celosa.
-No me pongo celosa de mis clientes.
-Ah ¿ahora soy solo un cliente?
-Siempre lo fuiste, Lucas. - dije seria.
-No confundas las cosas.-Me parece que las estás confundiendo vos, con tus escenas de celos. yo puedo estar con quien quiera ¿o no?
-Si, igual que yo. - contesté desafiante.
Suspiró. -¿Porqué sos así?
-¿Así como?
-Así... Te enojaste por nada, no estábamos haciendo nada.
-No me tenés que dar explicaciones.
-Te las doy porque quiero, no porque me las pediste.- habló calmado y entrelazó nuestras manos. -Si sabe' que me muero por vo', flaquita.
-No me hables en tono turro solo para conquistarme.- me hice la seria, pero cuando empezó a darme besos en la mejilla que descendían a mi cuello, sonreí. -Basta...
-Si te encanta.- susurró. -Vamos adentro.
-No quiero estar ahí.- dejé un beso en su mejilla. -Anda vos, si querés.
Negó. - Si no vas, no voy. vamos a otro lado, a mi casa.
Sonreí. -Bueno.
Caminamos hasta su auto, donde puso música y me dediqué a mirar por la ventana. La noche era cálida y mi mano descansaba sobre su pierna, mientras que él tarareaba la canción que se reproducía. -Llegamos. - avisó.
Bajamos de su auto y fuimos hasta la puerta de su depto, al entrar, su aroma me invadió. Entró él primero y luego yo, nos quedamos acostados en el sillón mientras que él, acariciaba mi pelo. Ya ni sabia lo que pasaba entre nosotros y quizás me daba un poco de miedo pensarlo también.
-¿Vos qué querés de mi?- pregunté hartándome del silencio.
-¿Porque la pregunta?
-No sé.- me reí levemente.
-Y... de vos quiero todo si es posible.
-Pero es que, conmigo no vas a llegar muy lejos.- frunció el ceño. -Y si, no soy nada, vos sos importante.
-Y vos, sos importante, pero para mi.
-Qué chamuyero sos.- rodé los ojos.
-Te hablo en serio, cuando las personas se enteren que estás con alguien como yo, van a hablar y hablar.-Así que, ¿estás conmigo?- me tapé la cara, avergonzada. -Igual a mi me importa muy poco lo que digan, eh. Yo mientras sea feliz, me chupa un huevo.
-Que fácil es para vos, porque para mi, no.- tragué saliva. -A vos no te afectaría que la gente hable de vos, pero a mi si.
-Pero si vas estar conmigo, reina. Y si te dicen algo, o te hacen algo, los mato a todos.
-Sos tan... lindo.
Sonreí para después dejar un beso en sus labios. Cada vez, nos sentíamos más parte uno del otro y eso podía estar bien, o también muy mal. ¿Qué podrían decir? "Ay, sos la **** que se metió con el narco por plata." Aparte de que Lucas cada vez se volvía un poco más famoso.
-Basta de pensar.- dijo, sacándome de mis pensamientos. -Vamos a vivir lo nuestro.
![](https://img.wattpad.com/cover/240646690-288-k781968.jpg)
ESTÁS LEYENDO
tardes grises | homer el mero mero
RomansaSigo encerrado dando golpes contra la pared.