Capítulo 11

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Narra Valentín



Me encontraba en un taxi rumbo al aeropuerto, hoy nos íbamos a Salta para la cuarta jornada de la FMS. Me estaba mensajeando con mi chico, él me esperaba, junto con Pedro, Mateo y Rocío, en una de las cafeterías del lugar. Estaba ansioso, la semana que pasé lejos de él me pareció eterna. En este último mes me había dado cuenta que era bastante dependiente de Dani, y viceversa, mi estado de ánimo dependía mucho de los momentos que vivíamos juntos. Ahora llevaba una gran sonrisa en mi rostro, pude verlo sentado, de espaldas a mí, disfrutando de su café. Me acerqué a la mesa que compartían los cuatro y los saludé a todos, dejando por último a Dani, a quien le dejé un beso sobre la comisura de su labio derecho.

-¿Cómo están?- me senté a su lado.

-Muerta- dijo Rocío apoyando su cabeza en el hombro de Mateo-. ¿Por qué tenemos que salir tan temprano?- Mateo pasó sus brazos alrededor de ella y la apretó. Eran las diez de la mañana.

-Vas a poder dormir en el avión y en el hotel cuando lleguemos- le contestó despeinando su pelo. Reímos cuando lo empujó y le sacó los anteojos.

-¿Realmente no son novios?- pregunté todavía riendo. Ella miró en mi dirección y me mostró el dedo del medio.

-No hagas eso- Mateo bajó su mano-, todos te están mirando. Pareces una nena chiquita haciendo un berrinche.

-Que mierda me importa lo que piensen- dijo sentándose derecha en la silla- ¿Cómo estuviste estos días Velen?- me preguntó.

-Bien- dije pensando lo que había hecho-, me junté con mi crew e hicimos una mini fiesta.

-Que divertido- se acercó a Mateo y le habló cerca de su oído.

-NO- gritó llamando la atención de todos a nuestro alrededor.

-Bueno- dijo ella levantando las manos-, tampoco tenes que gritar de esa forma.

-¿Qué te dijo?- preguntó Dani curioso.

-Es irrepetible- Rocío se tapó la boca para evitar soltar una carcajada.

-Sos muy inocente Mateo- le dejó un beso en la mejilla haciendo que este se ponga rojo.

-Basta- le susurró.

Seguimos poniéndonos al corriente, teníamos que matar el tiempo de alguna forma, faltaba que llegaran la mayoría de los competidores. Pedí un café para poder despertarme, al igual que Rocío, aunque a ella se le notaba más el cansancio. De a poco fueron llegando todos, y se reunían con nosotros en la cafetería, hasta que por fin el grupo se completó y nos trasladamos a la zona de abordaje. Nos dispersamos por los asientos que habían libre, Dani y Rocío se juntaron en unos un poco apartados para hablar de vaya a saber que, mientras que Mateo y yo los veíamos desde los asientos de enfrente a ellos. Me acerqué después de un rato en el cual ninguno nos prestaba atención.

-Me aburro- los interrumpí.

-¿Nos viste cara de payaso?- dijo ella.

-Ja ja- reí falsamente-, te recuerdo que estás manteniendo ocupado a mi novio- le susurré para que nadie escuchara.

-¿Desde cuándo somos novios?- preguntó Dani en mi mismo tono-. Que yo sepa nunca me lo pediste.

-Amor creo que eso no es necesario- le susurré en el oído-, después de todo lo que hicimos- se puso automáticamente rojo-. Como me pone cuando te pones nervioso.

-Valentín, disimula un poco- dijo Rocío abrazando a Dani-, se te cae la baba. Que asco- agudizó la voz. Dani se rió con ella, rodé los ojos y me apoyé en el respaldo de la silla junto a él soltando un suspiro.

Nuestra historia, solo nosotros la sabemos - WosaniDonde viven las historias. Descúbrelo ahora