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El país con el que entramos en guerra estaba dos días en viaje en barco. Querían usar la lluvia de titanes de Zeke, romper las barreras con Reiner y lograr que entre Annie, además querían usar al Colosal para destruir las flotas, al Carreta para abrir camino en el campo de batalla, al Mandíbula para destruir las armas anti-titanes.

Noto a Karina tensa y disconforme con la decisión de los altos mandos, ambas sabemos bien que no están listos para una guerra. Padelli mantiene sus ojos en ella y Karina la mira cuando necesita contenerse para no decir lo que piensa.

-Queremos usar el elemento sorpresa así que saldremos mañana por la tarde - dice el Jefe de Infantería, mira a los guerreros , que están detrás de mí -. Preparen sus cosas.

-Me gustaría objetar - digo con calma. Los mandos se miran y mi padre me da la palabra -. No creo que los guerreros estén listos para esta guerra, he leído sus expedientes y...

-Y son más que eficientes como portadores - dice el encargado de la estrategia -. También los he estudiado.

-Los expedientes contiene información sobre actividades cognitivas y resistencia, no sobre sus habilidades bélicas - los mando me miran, pidiendo que suelte mi petición de una buena vez -. Me gustaría que los retirarán, no están listos para esta guerra, no sabemos lo suficiente de ellos como los nuevos portadores. Confío en que Marley es capaz de ganar esta guerra...

-Los titanes son necesarios en esta guerra - dice el de aviación.

-Entonces, ¿admite que si Marley ha ganado es gracias a ellos? ¿A los eldianos? - digo casi sin pensar, casi.

Todos me miran, aunque siento a todos los mandos en mi contra, siento el apoyo de los guerreros en mi espalda, la mirada confortante de Padelli y la sonrisa aprobante de Karina. En cuanto a mi padre... él no habla.

-Sabemos que los titanes son de gran utilidad - dice Karina, alejando la atención de mí -. Es por eso que les pedimos una semana para saber sus habilidades en combate.

El jefe de todos, no recuerdo su nombre, solo que es el jefe y que ni el mismo rey le dice que hacer. Digámosle Jefe Parche, porque tiene un parche en su ojo derecho. Jefe Parche gruñe en silencio y solo levanta la mano. Mi padre asiente y, por primera vez en toda la junta, me mira.

-No.

Es todo lo que dice.

-Los guerreros parten mañana por la tarde junto con los demás soldados - continua -. Eso es todo, pueden retirarse.

Los presentes se ponen de pie y salen de la sala de juntas. Me pongo de pie y me doy vuelta, los guerreros me agradecen por el intento, aunque desde un inicio sabíamos que era una batalla perdida. Salen de la sala guiados por Padelli, quien les hará un examen de rutina para verificar su salud, espero que salga algo que les impida ir. Pero su habilidad de regeneración lo hace imposible.

Mi padre se queda en la sala junto con Jefe Parche, el Jefe de Infantería y otros altos mandos entran por la puerta. Karina sale del lugar y yo le sigo, ella se adelanta para completar los archivos e informar a Inteligencia sobre la guerra, pronto tendrán que desplegar espías, talvez me toque acompañar a los guerreros al extranjero.

Camino por el pasillo haciendo una lista mental de lo que tengo que hacer: nada. Tal vez Padelli necesite ayuda en la Enfermería. Camino con determinación ahora que tengo un lugar a donde ir.

-Ancel - me detengo y me doy vuelta al reconocer la voz del encargado de estrategia.

Cuando se acerca trato de buscar su nombre en alguna parte de su uniforme. Klaus. George viene a mi mente. Todos sus hermanos habían estado en el ejercito, ¿sería el un hermano o el padre? Como sea, no le deben de agradar los eldianos después de que la menor de los Klaus haya rechazado la pureza de su sangre con tal de estar con quien ama.

Prohibido. (BertholdtxY/N)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora