Wait on me || Vughead, Jeronica

🌿Capítulo diecinueve.🌿

Tómalo, tómalo,
te daré gratis mi corazón, chica,
no lo rompas, rompas,

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—Tengo una buena noticia—soltó Jughead el cual estaba comiendo junto a ella.

Veronica alzó una ceja—Ilumíname—soltó divertida.

—Me tomé el atrevimiento de pasar por el registro civil y pues, mañana tienen una hora libre.—la morocha hizo un silencio y Jughead hizo una mueca—¿La quieres?.

Veronica lo miró—No—negó.—No la quiero. Pero... porque nosotros estamos comenzando algo y no quiero arruinarlo. No quiero hacerlo porque eso solo traería problemas con mi padre, y yo no quiero que él se interponga en nustra relación.

El chico se sorprendió y negó—Yo no dejaré que lo haga,Veronica. No voy a apartarme por nada de lo que diga o haga tu padre. Buscaremos una forma que deje de molesatrte.

Esta tomó aire—Prefiero que me moleste a mi, a que moleste a la relación.

Jughead hizo una mueca—Es lo mismo, Vero. Si tú estás mal, yo me daré cuenta y eso es parte de nustra relación.

—Solo, quiero que de verdad funcionemos.

El chico le sonrió y se acercó a sus labios—Lo haremos. Lo haremos funcionar.

Esa noche, Jughead se quedó junto a Veronica, pero a las siete de la mañana, un ruido los despertó.

—Dime que no lo has hecho—rogó este moviéndose en la cama.

Veronica suspiró—Debo irme al trabajo.

—¿Qué te costaba dormir un poco más?—preguntó, dejando de abrazarla al saber que esta se iba a levantar.

La morocha le dió un beso en los labios y se levantó—Recuerda que en la tarde debes estar aquí, iremos a comer a lo de mis padres.

—¿Me debo alegrar?

—Cállate—rió esta para entrar al baño.

Jughead se sentó en la cama pero luego se levantó. Caminó hasta la cocina para hacer el desayuno, en especial para que Veronica comiera algo.

—Creí que segurías durmiendo—soltó esta.

—Decidí levantarme y hacerte el desayuno.—este le dió una taza de café—ni lo digas, soy el mejor secretario, babosa y pretendiente que has tenido.

Esta lo miró divertida mientras tomaba el café, lo tragó para hablar—¿Acaso te quieres un poco?

—Iré a una cena con tus padres, ¿eso contesta tu pregunta?

—Por favor, has manejado y luchado con pandillas. ¿Me estas diciendo que no puedes con un mafioso?—dijo con un tono de diversión.

—Ya, pero el mafioso de tu padre me intentó matar.

—Pero no le salió. Y eso porque eres de hierro.

—No se si es un cumplido—negó.

Veronica se encogió de hombros—Yo tampoco.—suspiró—me iré—esta tomó su cartera y besó los labios de Jughead—No te olvides de la cena.

—¿Cómo me voy a olvidar si tengo las horas de mi muerte contadas?

—Exagerado—soltó esta rodeando los ojos para salir de ahí. Pero volvió a abrir la puerta—Por cierto, hay una copia de llaves en el primer cajón de mi escritorio. Cierra al salir.