Capitulo 9: La madre

73K 4.3K 147
                                    

-Buenos días Robert –Mireya entro a la cocina sonriendo –Hola Marcela

-Hola Mireya –ella le sonrió –Enseguida te preparo en el desayuno

-¿Y Mark? –ella pregunto sentándose en la mesa de la cocina. Le había extrañado no verle sentado en el comedor desayunando esa mañana.

  

-El señor Cardoni tuvo que irse temprano –Robert respondió mirándola –Tenia una reunión importante en Berlín

-¿Berlín?  -Mireya abrió los ojos sorprendida, después frunció el ceño. Aun no se acostumbraba a que ese hombre dispusiera de su propio avión para ir donde quisiera. Fijo la vista en Marcela -¿Y Diego?

-El señor le dio el día libre, así que supongo que estará por ahí con sus amigos –Marcela respondió mientras dejaba un zumo ante Mireya y un plato con fruta -¿Tostadas?

-No, gracias –ella tomo un tenedor y tomo un trozo de fruta, después la llevo a su boca.

-Buenas –Gonzalo entro por la puerta que daba al jardín y con una sonrisa se acerco a Mireya, dejo sobre la mesa un estuche alargado de terciopelo azul.

-¿Y esto? –Mireya frunció el ceño

-El señor Cardoni me lo dio para ti –Gonzalo se encogió de hombros y dejo un trozo de papel doblado sobre el estuche –Junto a esto

Mireya tomo la nota y la desdoblo, la leyó con el ceño fruncido.

Me dijiste que tu amiga tenía una especie de obsesión con ella. Quizás te gustaría regalársela.

Mark.

 

-No puede ser –Tomo el estuche y lo abrió despacio. La pulsera brillo en su interior y una pequeña sonrisa se extendió en sus labios.  Entonces miro a Gonzalo. -¿Puedes llevarme a un lugar?

-¿A ti? Al fin del mundo –el sonrió y camino hacia la puerta –Tendré el coche listo en cinco minutos

-Gracias –y Mireya se bebió el zumo rápidamente. Se levanto sin borrar la sonrisa de sus labio y tomo el estuche.

-Mireya –Robert la observaba serio –No olvides que no eres la primera a la que regala joyas.

WifeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora