Capitulo 39: Como comenzo

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-¿Y que vas a hacer? -Ángel la miro de reojo sentado junto a ella en el vehículo

-¿Para qué quieres la respuesta? -Mireya aparto la vista de la ventanilla para mirarle a los ojos -¿Para decírsela a él o para saberla tu?

-Ya sabes porque hice esto Mireya -suspiro -Entiendo que no confíes en mí, no como antes. Pero en ningún momento he actuado para hacerte daño.

-Lo sé -Mireya se removió en el asiento -Lo siento, es solo que.... No sé ni lo que yo misma siento.

-Tranquila -Ángel alargo el brazo y tomo su mano -Decidas lo que decidas, yo estaré a tu lado. Pero piensa una cosa, todo eso te pertenece, pero no solo a ti. Estamos hablando también de Lucia, de su vida, de su futuro.

-Nunca le conté nada, nunca le dije lo que Kevin hizo -Mireya hablo con la mirada perdida -Ella piensa, que fui yo. Yo me aleje de él, yo le deje, porque quise. Me culpó, como de tantas otras cosas entonces.

-Quizás sea el momento de contárselo -Ángel apretó su mano con fuerza -Vaya, sí que hay prensa

-Mark no iba a dejar pasar la oportunidad de que su joyería se hiciera famosa -Mireya observo a los periodistas en la puerta . Cuando el coche se detuvo justo ante ella, la puerta se abrió y Kevin apareció ante ella, le tendió la mano, esperando que la aceptara para salir.

Necesito varios segundos, respirando profundamente y tragándose todos sus sentimientos, para colocar su mano sobre la de él, para sentir su piel de nuevo y salir del vehículo con la sonrisa mas falsa que jamás había logrado poner.

Ángel salió por la otra puerta y se dio prisa en rodear el coche hasta pararse junto a ella, colocando la mano en su espalda, dándole algo de apoyo, protección.

Kevin, aun sosteniendo la mano de Mireya, la obligo a girarse y parase ante los periodistas que aprobaron para echar fotos. Ella trato de marcharse pero él la sostuvo.

-Sonríe, este es tu trabajo -Le hablo en voz baja, pero Ángel pudo escucharlo y lo miro molesto

-¿Me estás dando una orden? -ella pregunto mientras sonreía hacia las cámaras, entonces le miro fijamente y hablo en voz baja -Si soy tu socia, no puedes darme ordenes -se giro y camino hacia el interior de la joyería, dejando a Ángel y Kevin observándola confundidos.

-¿Eso significa? -Kevin la alcanzo, tomándola del brazo y mirándola a los ojos -¿Aceptas recuperar lo tuyo?

-Ya veremos -Mireya tiro de su brazo obligándole a soltarla -De momento te agradecería que te mantengas lo más alejado de mi posible.

-Ya la has oído -Mark se paro al lado de ella, colocando la mano en su espalda -Empieza la rueda de prensa.

-Deberías sentarte a mi lado -Kevin volvió a tomarla del brazo, mirando a Mark a los ojos -Es lo que corresponde

-También me puedo sentar yo a tu lado -Ángel le miro con ambas cejas alzadas -Igual que ella, soy un empleado

-Mireya dirigió la campaña -Kevin miro a su hermanastro molesto

-¿Qué no has entendido de lo que acaba de decir? -Mark la tomo del otro brazo -Déjala tranquila

-¿Igual que tú? -Kevin entrecerró los ojos y tiro del brazo de Mireya -Porque no creo que tenga ganas de que tu estés cerca.

-¿Te estás comparando conmigo? -Mark tiro del otro brazo de ella -Te lo advierto...

-Eh...chicos -Ángel observaba como Mireya cerraba los ojos y apretaba los labios

-¿Qué? ¿Me adviertes qué? -Kevin sonrió -Puedo pisarte como el insecto que eres

-No tendré tanto como tú, pero lo que tengo lo conseguí honradamente -Mark le miro con asco -Yo no se lo he arrebatado a nadie

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