Fall To Hell

ᏟᎪᏢᏆ́ͲႮᏞϴ ᏙᎬᏆΝͲᏆႮΝϴ

“ʏ ռօ ɛs ɖɛ ɛxtʀañaʀ, քʊɛs ɛʟ ʍaʟ sɛ
ɖɨsʄʀaʐa ċօʍօ áռɢɛʟ ɖɛ ʟʊʐ.”

15 de mayo, 2021

—¿Tienes lo que pedí? —cuestioné al hombre que se encontraba a unos pasos de mí.

—Primero muéstrame lo mío.

Apreté los dientes, si no fuera importante lo que necesito lo castigaría hasta que entendiera que nadie me controla.

Apreté la agarradera del maletín y luego lo arrojé a sus pies.

—Ahí lo tienes —masculle—. Dame lo mío.

—Aguarda caído, tengo que asegurarme que no sea una trampa.

Se arrodilló y abrió el maletín con cuidado, un brillante destello impacto su rostro, en el cual se formó una sonrisa maligna.

Noté que su mano se movió hasta su bolsillo, me mantuve alerta, se que no se podía confiar en nadie. De ahí sacó una pequeña bolsita negra.

—Lo tuyo —me la aventó.

La atrapé sin dificultad, procedí a desatar el listón para después vaciar el contenido en mi mano.

Una pequeña moneda cayó sobre mi mano, era de bronce y su diseño se notaba que no era moderno, en un lado tenía dibujado un pentagrama y del otro un enorme castillo que conocía bien.

El cumpleaños de Everly se acerca, tengo que estar preparado para lo que se aproxime, algo me dice que el caos reinará la tierra. No por nada quieren asesinar a Everly.

Se que están asustados, el poder de Everly es tan grandes y nuevo que nadie sabe lo que podría suceder cuando lo desarrolle al cien porciento.

—Se que eres de palabra caído, pero tenía que asegurarme. Hay un rumor de que las cosas no van bien arriba, tu hermano Miguel al parecer no sabe qué hacer con eso de que la hija de Lilith y Adán está en la tierra.

Apreté mandíbula con fuerza, si este estúpido cazador sabe lo de Everly es posible que todos lo sepan ya.

—¿De que hablas?

Soltó una risa.

—Uno de tu especie está diciendo que la hija de esa bruja está en la tierra y que es muy poderosa. Nosotros también la estamos buscando —mencionó saboreando las palabras, en sus ojos se podía ver la avaricia.

—¿Por qué la buscan?

Esta plática comenzaba a impacientarme, pero tenía que descubrir que estúpido demonio abrió la boca y asegurarme de proteger a Everly.

—¿Qué no eres de haya? Debes de saber todo esto.

Gruñí tomándolo del cuello y alzándolo un poco, cine hasta que su espalda chocó con la pared.

—No te metas en donde no te llaman y contesta mi pregunta.

La avaricia que había en sus ojos paso a pánico.

—Lo siento, es todo lo que se. Por favor no me mates —apreté un poco más su cuello.

—¡Habla! —brame furioso.

—¡Dicen que si bebemos su sangre seremos inmortales y todos nuestros deseos se cumplirán!

El sonido de mi móvil me interrumpo, solté su cuello y dejé que cayera al piso.

Saqué el teléfono y sin ver quién era contesté.

—¿Quién? —pregunté.

—Amigo.

Reconocí la voz al instante.

—Se la llevaron —la sangré hirvió en mis venas—. Se han llevado a Everly.

Colgué sin decir nada, la furia desbordaba de mis poros, sabía que era mala idea dejarla sola y viajar a Suiza.

Me acerque al hombre que aún estaba tirado en el suelo intentando reponerse. Volví a tomarlo del cuello, sus súplicas no me importaban, una vida más, una vida menos, qué más da.
Para intentar calmar mi furia impacté con fuerza mi puño en su rostro, causando que su cuello se quebrara al girar más de lo que los humanos podían.

Lo deje caer con simpleza, el haber hecho eso no había calmado nada, quiero asesinarlos a todos, hacerlos sufrir y recuperar a Everly.

Me acerqué a la pared y solté un grito de rabia al tiempo que impacté mi puño al concreto buscando calmar la tormenta que comenzaba a formarse en mi interior.

No lo logré, en la pared quedó un hoyo, pero yo seguía igual. Agarré el maletín y salí con prisa del almacén, con una misión y muchas ganas de destruir.

Se quién pudo haber sido, sé que me buscan a mí, pues me acaban de encontrar.