Protegeme [Carl Grimes]

Capítulo 42: Escapando.

Alex se abalanzó sobre mi haciendo que cayéramos en mi cama.

- ¡Déjame! -solté mientras forcejeaba.

- Tu me debes algo.. -soltó sosteniendome bajo de el.

Estire mi mano a no mas poder y saqué mi arma debajo de la almohada.

Apunté directo a su cráneo.

- Un movimiento más Alex, y juro que te volaré los cesos -espeto furiosa.

El levantó sus manos y se paró de la cama, en ningún momento quité mi arma de su cabeza.

- No quiero volver a verte.. largo -solté entre dientes.

El se retiró de la habitación sin más.

Me sentía asustada.. como una cobarde.. lo hubiera matado.

Me sentía cansada, ya será de noche, ya eran más malditos días desde que me separé de Carl.

Escaparé de aquí.

[...]

Narra Carl

- Dime.. - solté sin mirarla.

- Qué harás si.. Maya, está.. ya sabes.. -masculla Hayley.

- No vuelvas a decir eso, juro matarte por lo que acabas de decir, ella es la chica mas valiente que he conocido en toda mi vida. Ella esta viva -solté furioso y seguimos buscando, se hizo tarde y fuimos a la casa.

[...]

Estaba acostado, con la vista en alto. Ya son semanas desde que perdí a Maya.

Cada día de mi vida ruego encontrarla, y que me abrace tan fuerte como lo solíamos hacer.

Nunca olvidaré nuestro primer beso, fue mágico.

Ya son semanas desde que camino sin rumbo entre los bosques, clavando cuchillos en los cráneos de los caminantes que se interponen en mi camino, busco una señal de ella, nada, nada.. pero se que en algún lugar está..

Y la voy a encontrar.

[...]

Ya han pasado dos semanas.

¿Escapar?

Lo intenté, de no ser por Morgan ya estaría allí fuera, quizás con Carl, quien sabe..

Me descubrió escapando, fue cuando Carrie volvió a pegar su mano contra mi rostro.

Ya han pasado dos miserables semanas.

Y ya se donde estamos.. estamos en Carolina del Norte, a unos cuantos kilómetros de Georgia, donde nos separamos.

Va a ser duro escapar y atravesar las demás ciudades en camino a Georgia.. los caminantes aumentan, no se cansan, andan por todos lados, deambulando, hambrientos, y al estar sola juro que el miedo fluye por mis venas.

Alex, no se ha acercado a mi, solo no noto como me observa, los demás han sido amables conmigo, pero aun así, no me quedaré, lucharé cada segundo de mi vida para estar con la persona que más amo en todo el mundo, nada mas ni nada menos, Carl Grimes.

Me dirigí a Lucy, ella ha llegado hace una semana, la encontraron en las afueras de Carolina del Norte.

Es rubia, de ojos azules, me hace acordar a Beth, pobre Beth..

- Que tal si salimos al bosque a cazar.. -suelto aburrida.

- Es una broma, ¿no? - soltó patéticamente. - Aquí en Carolina no hay nada, ni un maldito ciervo, los podridos echaron a perder lo que quedaba, hay un lago aquí cerca, podemos ir allí.. -bufó.

- Bien, iré a hablar con Carrie.. -hablo mientras me retiro.

Me dirigí a Carrie quien se encontraba afilando su cuchillo.

- Hey.. -solté.

- Ahora que quieres.. -masculla sin mirarme.

- Quiero saber si, puedo ir con Lucy al lago de aquí cerca.. -pregunto.

- Escuchame, te dejaré ir, pero no intentes escapar, no lo harás, te atraparemos, y si te resistes.. juro que te mataremos -masculla.

- Bien -solté.

Entré al cuarto y coloqué mi arma en mi cinturón, ya podía usar mi arma en caso de caminantes.

Y mi amada navaja iba en mi mano.

Me dirigí a Lucy y caminamos adentrándonos al bosque.

- ¿Sabes para que te traje, cierto? -mascullo mirando hacia los lados en caso de que haya alguien.

- Escapar.. -suelta ella con una sonrisa.

- Mi grupo te agradará. Son buenos.. -suelto y sonrío.

Llegamos al mencionado lago, y caminamos por los bordes hasta llegar al otro bosque.

Allí nos dirigimos a la carretera.

- Maya.. nos encontraran, no hay como llegar a Georgia. Son muchos kilómetros.. -soltó Lucy preocupada.

- Si que lo hay.. -solté con una sonrisa.

Miré hacia la carretera, un auto abandonado.

Creo que podré manejar.. subimos al coche, lo encendi, perfecto.

Intenté, puse en cambio, primera, y deslice suavemente el acelerador, el auto arrancó y empecé andando despacio..

Lucy tenia en su rostro una perpleja sonrisa.

Estaremos a salvo.

Narra Carl

- ¡No, papá!, ¡no dejaré de buscarla! -suelto en voz alta.

- Hijo debemos irnos de Georgia.. -insiste Rick.

- Váyanse.. -suelto.

- No.. no lo entiendes. -masculla Rick.

- Si lo entiendo, son caminantes, gente podrida que quiere comerte, somos lo suficientemente fuertes como para sobrevivir. Nunca dejaré a lo que amo, ella ha sido mis únicas esperanzas desde que perdimos a mamá, ella es mi familia. Como ella, no hay ninguna papá.. - mascullo. - el día en que esto acabe tengo la esperanza de estar junto a ella y nuestros hijos papá. La amo, yo no me iré, cada día de cada inútil semana me pasaré buscándola, en esta vida ya nada me importa mas que ella, tu, Judith y el grupo. Pero Maya, no me pidas que haga algo imposible, papá no la dejaré -insisto.