Ever Rolling (UsaMex)

75 12 19
                                        

Ciudad de México, diciembre del 2017

El invierno en México siempre le sabía cálido, un tanto hogareño, y más sereno, que las fiestas usualmente  grandes de la Casa Blanca; él sabía que podía explicar esas características al frío más bien amable de esas tierras, pero en realidad eran cosas muy distintas las responsables de esos sentimientos. 

Alfred podría haberse quedado el resto de diciembre en la Casa Blanca; habría podido consagrarse con algún invitado que fuera considerado importante por su presidente en la fiesta de fin de año; pero…¿qué tanto disfrutaba esos eventos? A lo mejor en los anteriores (y de ser así, habría sido él quien arrastrará a su vecino al sur), pero en tiempos presentes, con su actual jefe, eran experiencias más bien artificiales, similares a un negocio.

Eduardo no parecía estar cómodo con su actual jefe tampoco, así que dejando ver eso entre videollamadas que surgieron por trabajar entre ambos (y, por supuesto, cuando querían verse), habían decidido pasar el resto de diciembre juntos, incluyendo fin de año. Y después de lo sucedido en el sismo del pasado septiembre, Alfred se sentía un poco preocupado. 

—Venga güero, que eres mi invitado no el canciller, así que muévete a ayudarme con limpiar si vas a quedarte estos días —reprochó Eduardo,  barriendo los pies del estadounidense con toda intención.

Alfred que estaba sentado con absoluta comodidad en el sofá de la sala de estar del mexicano, se quejó con una mueca, y terminó por ceder cuando vio a Eduardo irse para regresar con un trapeador bien mojado. 

Ok, alright. ¿El héroe debe darte una mano siempre, honey? —dijo Estados Unidos con una sonrisa enorme mientras se ponía de pie, y se acercó al otro, e inclinándose un poco para murmurar cerca del rostro de México.

—No andes fregando, y ve a limpiar —exigió México frunciendo los labios, un tanto avergonzado; cuando quería Alfred, sabía sacarlo de sus cabales. 

—Podría simplemente contratar un servicio local, y tener todo el tiempo para descansar —ofreció Alfred, quitándole el trapeador a Eduardo, que se cruzó de brazos molesto por ser interrumpido—; pero eres muy terco, Eduard.

—Mi casa es pequeña, es innecesario —dijo, y se dirigió a la cocina a preparar algo de desayunar—. ¿Cómo pa’que pagaría algo que yo puedo hacer?

Su relación era una dicotomía, un tira y afloja constante que hacía recordar a Alfred la situación entre Inglaterra y Francia.  El desastre de septiembre les hizo dejar de lado sus obligaciones, ser más honestos consigo mismos. 

Frente al mundo se odiaban, no había otra forma en que los vieran, o que debieran verse. Tenían papeles que cumplir, y opiniones que satisfacer para seguir vigentes en la ruleta internacionales; un paso en falso, o disgustar a alguien, podría ser un error grave.

México frente al mundo era como el siervo, el aliado incondicional en desventaja, de Estados Unidos: poco recibía de su relación con él, y no había un agrado entre sus poblaciones. Y la nación estadounidense poco más que una potencia inclemente.

Ambos eran interpretados bajo esos términos, incluso ignorando quiénes eran ellos como personas; como humanos. Ellos habían crecido juntos de alguna forma; habían hecho mucho daño al otro por decisiones ajenas, pero siempre terminaban en un sendero que los unía. 

.
.
.
.
.

Alfred nunca se disculpó por su guerra con Eduardo; no había forma de disculparse, y posiblemente eso solo hubiera sido honestamente cruel si realmente consideraba los sentimientos del mexicano. 

>>—No tiene caso que volvamos a hablar de eso, gringo. Soy hombre, y reconozco que perdí; Texas se quería ir, me lo dejó claro. 

Alfred aún así se sintió arrepentido: México se veía solo, y él odiaba eso, cuando siempre quiso pensar que aún el pasado pesara, y su presencia, su amor, no fuera suficiente. Trabajaron mucho para poder separar sus historia, su existencia como nación, de lo que eran ellos en su forma de vivir, de ser, como Eduardo y Alfred. 

Stories, Fate, & Etc [Hetalia] [Oneshots]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora