Capítulo 42

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Anoche pasamos una noche hermosa con Manuela y hoy tenía preparada una sorpresa para ella y para otras persona importantes para mi.

Ya habíamos desayunado y estábamos yendo a mi casa a buscar a Emilio, no sabía nada así que el enano se iba a volver loco cuando viera a Manuela, me preguntaba todos los santos días por ella.

- ¿A donde vamos a ir gordo? - estaba impaciente desde que salimos de su casa no dejaba de preguntarme lo mismo.

- Ya te dije que es una sorpresa, ya le avise a mi viejo, así que Emi va a estar listo, vos me esperas acá así el enano se lleva una sorpresa. - le conté lo que teníamos que hacer mientras ella iba asintiendo con la cabeza.

- Bueno, pero no me vas a decir a dónde vamos ? - negué con la cabeza mientras le escribía a mi abuela, esa era mi sorpresa, quería que una de las mujeres más importantes de mi vida conozca a Manuela.

Cuando llegamos a mi casa, le volví a aclarar a Manuela que no iba a tardar mucho, solo algunos minutos y volvía.

Entre a mi casa, salude a mi viejo, cruzamos algunas palabras y me fui a buscar a mi hermano, que ya estaba listo y ansioso por saber que íbamos a hacer hoy.

Nos despedimos de mi viejo y cuando abrí la puerta, Emilio se dio cuenta que estaba el auto de Manuela, su cara se iluminó, se generó una sonrisa y corrió hacia el auto. Ella abrió la puerta y lo abrazó, como si se quisieran de toda la vida y solo se habían visto un par de veces.

- Manuelaaaaaa al fin viniste, yo te extrañe mucho, si te peleas con Mateo, vos vení a visitarme igual, no te olvides de mi. - largue la carcajada porque a mi hermano no le importaba nada.

- Voy a venir igual enano, pero con Mateo no nos vamos a pelear. - sonreimos los dos a la ves. - Subí enano que tu hermano nos tiene una sorpresa, de la cual no sé nada porque no me quiere contar.- hizo un puchero, negué con la cabeza y me subí de nuevo al auto.

En el camino fuimos escuchando un poco de rap, el estéreo del auto prácticamente era mío y yo mandaba en la música, a Manu no le molestaba para nada, es más ya amaba el rap, no tanto como yo pero algo es algo.

Después de un rato largo, de charlas y peleas con mi chica debido a su ansiedad y ganas de saber adónde vamos, cosa que no logro descubrir, ya estábamos acá en la puerta de la casa de mi abuela. Emi entendió que era una sorpresa para Manu así que se mantuvo callado y no dijo ni una sola palabra, se lo agradecí en silencio.

Tocamos el timbre y se escuchó la voz de mi abuela renegando con los perros, diciéndonos que ya abría, emi largo la carcajada y Manu tenía cara de no entender absolutamente nada.

- Ya te vas a enterar, cambia la cara te prometo que la vas a pasar bien - le dije bien despacito al oído.

Cuando termine de hablar se abrió la puerta y ahí estaba, la persona más loca que existía sobre la faz de la tierra y no podía creer lo que veía.

Tenía puesto, como para no perder la costumbre una vincha flúor, con el pelo todo revuelto; aparte, tenía puesto un top y una calza llena de emoticones, y ahí comprendí la cantidad de veces que mi mamá me dijo "primero llámala, que sepa que vas a ir así no te encontras con cualquier cosa", si, definitivamente tendría que haber llamado.

Me colgué pensando en lo tonto que fui hasta que emi me saco de mi nube cagandose de risa y por inercia mire a mi chica que estaba bordo, no sé si de vergüenza o de ganas de reírse y no hacerlo por respeto, creo que era lo último.

Mi abuela al darse cuenta de la situación, miro a Emi, me miro a mi y por último miro a Manu y se empezó a descostillar enfrente nuestro, así que yo también lo hice, si había algo en mi familia es que no éramos normales sin dudas.

- Bueno Manu, está mujer loca que está acá es mi abuela. - suspire - Abuela ella es Manuela mi chica. - a mi abuela automáticamente se le generó una sonrisa, sabía lo mucho que deseaba que yo vuelva a rehacer mi vida.

- Ay por Dios que hermosa sos, sin dudas el buen gusto se hereda, ya te voy a contar lo lindo que era el abuelo de Mateo. - listo mi abuela no tenía filtros.

- Eeeeh hola si? Yo soy Emilio, abuela podemos pasar? Tengo hambre. - Manuela se empezó a reír, pero sabía que era por lo raro que le resultaba todo esto.

Después de un rato charlando con mi abuela Manu se fue soltando y contando un poco sobre ella.

Se estaban llevando piola, se pusieron a hablar sobre no sé qué cosa de zumba, algo que mi abuela había empezado a hacer y Manu había hecho alguna vez pero cómo iba sola no quiso ir más. Mi abuela como buena confianzuda que era la invito a ir con ella y sus amigas, a lo qué Manu le dijo que sin dudas quería ir con ella.

Comimos "algo rápido" como dijo mi abuela no le avisamos para que nos prepare algo más digno según sus palabras.

Me encantaba la facilidad de Manuela para llevarse bien con todo el mundo y tratar de encajar en todos lados. A mi familia le caía bien y a mis amigos también, todo está etapa de mi vida estaba siendo realmente perfecta.

Después de pasar una tarde hermosa con personas importantes para mi, decidimos irnos, mi abuela y Manu cambiaron números para hablarse, y partimos rumbo a casa.

Cada día que pasaba Estaba más hasta las bolas con esta chica, hacía todo bien.

De ves en cuando me agarraba esta sensación de que nada dura para siempre, pero la alejaba y trataba de concentrarme en él ahora.

Y ahora era feliz Gracias a ella ...




























Mateo mateo chiquito mío 🥺

Quedan exactamente 4 capítulos para terminar esto 😥

Ame escribir esto, le puse demasiadas ganas.

Hoy son dos, más tarde publico el otro ❤️

Tus ojos guiándome ~ Trueno Donde viven las historias. Descúbrelo ahora