Capítulo 26: He vuelto

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Pov ___
En el camino yo estaba atenta, ya llevábamos aproximadamente 5 horas de viaje. Estaba aburrida, pero sentía la presencia de  Charlotte que no se alejaba, eso me hacía aguantar y ser paciente...

Cuando llegamos al lugar, había una casa de tamaño promedió, estaba algo deteriorada, era evidente, lo que la hacía inusual y “peligrosa” eran todas esas personas alrededor, ya que eran intimidantes hasta cierto punto, pero nada sorprendente obvio, en comparación a los vampiros que enfrenté cuando era más pequeña.

___- ¿Quienes son ellos? ¿Cuántos son en total? Son enormes ¿Las cicatrices las obtuvieron en en trabajo en casa? Si es así ¿No son muy torpes? ¿Por lo menos tienen buena condición física? ¿Podré jugar en la casa? ¿Ellos podrán jugar a las escondidas conmigo? ¿Tienen buen humos o están amargados? ¿Tienes hijos con los que pueda jugar? ¿Los traerán de visita a casa? ¿A qué hora me tengo que levantar? ¿O me puedo levantar tan tarde como quiera? ¿Tienen perros o gatos? ¿Prefieren loros o canarios? ¿Les gusta montar a caballo? Yo lo hice una vez y fue divertido... ¿A qué se dedican ustedes?

Tipo 1 y 2 - ¡Ya cállate!

Tipo 1 - ¡¿Que demonios pasó con todo el silencio de hace un rato?!

___- lo lancé por la borda cuando vi a los señores gigantes y fuertes de por allá.

Nos bajamos y antes de que corriera como la niña imperativa del papel que llevaba fui sujetada del brazo.

Tipo 2 - ¡¿A donde crees que vas?!

___- ¿No es obvio? A conocer a su esposa.

Tipo 1 - lamentablemente para ti, tu visita con tu futura madre tendrán que esperar, si te comportas bien consideraré no golpearte.

Me agarraron firmemente y me amarraron los brazos atrás de mi espalda, use las técnicas profesionales que aprendí en un manga. Ya que servirían estas cuerdas posteriormente junto a las que traigo conmigo. También me amordazaron, todo por andar de habladora.

Evidentemente no me revisaron por ser tan confiados en el hecho de que una jovencita no pensaría en eso, después de todo, no era tan alta, y ellos al ser unos gigantones trogloditas no eran muy inteligentes.

Solo esperaba que todo saliera conforme a lo planeado. Me cargaron como si fuera un costal me llevaron dentro de la casa, cuando entramos bajamos por unas escaleras a un sótano oscuro, donde me lanzaron sin cuidado, caí sobre algo suave y escuché quejidos.

Cerraron la puerta y todo se volvió oscuro, los niños se alteraron y comenzaron a llorar de nuevo, justo después de que me baje de encima de uno de ellos. Suspiré rendida, me acomodé y me puse de pie solté mis manos y me quite la mordaza y convoque un lumus máxima no verbal sin varita, todos se sorprendieron.

___- todo va a estar bien, tienen que estar tranquilos - dije y les sonreí, había niños un poco más grandes que yo que me miraron con asombro.

Comencé a desatar a algunos y los mismos me ayudaron a desatar a los otros, éramos 11 en total, era un almacén lo suficientemente grande para todos. Analicé la situación, eran alrededor de 20 hombres los que vigilaban la casa, más otros 4 que estaban adentro y los 2 que me trajeron, serían un aproximado de 26 hombres...

Bien, no puedo esperar a estampar mi puño en sus caras... Cuando reaccioné, los niños me miraban con miedo.

___- no les pienso hacer daño ¿Saben? Vine hasta aquí para ayudarlos.

Niño 1 - ¿no eres el demonio vestido de ángel que viene a reclamar nuestras almas?

___- ¡eso es ridículo! ¡¿Quién les dijo eso?! ¡Bueno no importa! Pongan atención, de eso dependerá el que estén sanos y salvos. - todos asintieron - no es mucho lo que tienen que hacer, simplemente se quedarán quietos aquí, espalda contra espalda unos con otros, es importante no llamar la atención por si vienen a revisarlos, voy a salir, sentí una voz en mi cabeza, era la de Charlotte... No había tiempo para pensar el por qué.

Cambiando al VillanoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora