Mafia 刀 かたな Katana [Kookmin] ©

Capitulo 36 ( Editando)

Welcome and a message

En el hospital el cuerpo de Kei mantenía su ritmo tranquilamente, ayer gracias a los mil dioses lograron llegar al hospital rápido y Kei fue sometido en urgencias, a las tres horas el doctor le dijo a Jeon, que Kei está bien, solo que recibió un gran impacto en la cabeza y este provocó que todos los sentidos de Kei se nublaran, además de que tenía una costilla rota. Jimin marco temprano para saber cómo está Kei y Jeon le explicó todo lo que pasó, Jimin ayer fue llevado con la niña a casa y ahí fueron los dos cuidados por muchos sicarios. Hoy solo Jeon continuaba esperando por la mejora de Kei.

— Señor Jeon, el paciente ocupa algunas cosas para su mejora, quiere que el hospital se encargue de comprar y ya le pasan la factura o usted se encargará de comprarlos?—

— Prefiero comprarlos yo—

Jeon le marco a uno de sus chicos y le dio la lista de lo que ocupa Kei, también me dijo que todo comprara de lo más original y bueno.
Al pasar horas solo obtenía mucha información de los médicos, asta que le permitieron pasar a la habitación de Kei, este estaba muy dormido como si estuviera en un estado en coma. Kei por fin despertó y pudo ver a su jefe a un lado de el.

— Como te sientes—

— Me siento bien, salve a mi hija que eso es lo que importa—

— Yo hablo de físicamente—

— Pues... Ahora seré una persona inservible, mi cuerpo se paralizó y pues esto no me ayuda a nada—

— Si me comentó el doctor sobre lo de la parálisis—

— Como está mi hija?—

— Ella está bien, Jimin la a estado cuidando muy bien—

Kei sonrió por imaginar a su hija con Jimin planeando planes malvados para que ella les haga a sus compañeras de clase. A los minutos esté termino dormido por el cansancio, Jungkook se quedó todo el tiempo a su lado, pasaron algunos días o tal vez semanas para que Kei pudiera volver a su casa, en esta fue recibido con sonrisas y lágrimas de parte de su hija y Jimin.

— Hola mi niña—

— Papi estoy muy feliz por qué ya estés en casa, papi por qué estás en una silla?—

— Lo que pasa es de que tu papi estará en esta tal vez por años por salud, pero tranquila, tu papi estará para ti—

Kei abrazo a su hija y también le dijo a Jimin le lo abrazara, así se quedaron estos tres por varios minutos como si fueran una familia, Jeon solo miraba desde lejos, no quería incomodar su ambiente.
Por el anochecer Jimin y Jeon se encargaron de ayudar a Kei a recostarse en la cama, después de eso, los dos se fueron a su propia habitación.

— Estás enojado Jeon?—

— No, Por que dices eso mi conejito?—

— Es que te noto muy distraído y un poco raro—

— No te preocupes, solo son problemas que tendré que resolver, pero todo está bien mi amor—

— Recuesta te, te daré un masaje—

— Wow esto si me gusta, solo deja me ducharme vale—

— Si—

Jeon se fue a tomar una ducha, mientras tanto Jimin ya se había bañado y ahora trataría de hacer feliz a Jeon. Jimin se puso una pijama tipo japonesa color rosa con rosas rojas con blando, está es de ceda pura, dejo un poco de la parte de arriba abierta para que Jeon lo mirara. Cuando esté salio se sorprendió de ver a su conejito con ese tipo de pijama sexy, con una sonrisa pícara se acercó a la cama y beso los labios de Jimin, sus manos fueron directas a parar en las nalgas del contrario, apretando las a su antojo, con un último beso se recostó en la cama para que Jimin le diera el masaje.

— Wow tus músculos están muy tensos, pero tranquilo, tu novio se encargará de esto—

Jimin puso manos a la obra y comenzó a masajear la espalda de Jungkook, con calma pero con fuerza para que cada hueso tronara, sus dedos dió unas alineaciones por la espalda.

— Jimin eso ya no es masaje—

— Calla y solo disfruta—

Se aflojó más la pijama y pegó su pecho contra la espalda de Jeon, con sus dedos hizo un trazo de hombro a hombro en forma seductora. Sus labios por obra llegaron asta estar depositando besos húmedos por la espalda, incluso llegó a morder está pero no al punto de dejar una marca.

— Jimin no estés jugando que después cuando me caliento, ya no quieres continuar—

— Y que pasa si te digo que está vez no pienso parar?—

— Pues con esa preguntita ya te sacaste la lotería—

Jungkook se volteo y Jimin está vez quedó en su regazo mientras el seguía acostado. Con picardía hizo como si sus dedos de las manos fueran caminando por todo su pecho, Jungkook estaba que se moría por tomar el control de esto, pero sería bueno ver qué sorpresas le tiene su conejito.

— El día de hoy soy un simple masajista que estará a las órdenes de su cliente, mi nombre es Jimin y hace unos meses me enteré que cumplió años, pero por diferentes motivos no celebro, así que hoy me prepare una sorpresa—

Jungkook tenía en claro que sí Jimin le seguía hablando de esa forma entonces rompería con lo que dijo antes sobre esperar a Jimin, sin duda Jimin está lleno de sorpresas y cambios de humor.
Jimin se paró del regazo de Jungkook y fue a sacar del armario la famosa katana, Jungkook al ver esto se enderezó un poco para poder ver qué es lo que hace. En su teléfono puso una canción un tanto lenta pero con sonido sexy, este fue aflojado la pijama asta que está termino en el piso y Jungkook pudo apreciar una clase de lencería muy reveladora de partes en el cuerpo de Jimin, este del closet tomo dos telas blancas un poco transparentes y una se la envolvió en la cintura como si fuera una tipo falda, solo que dejaba a descubierto parte de una de sus piernas, la otra tela se la puso por la nariz y la amarro tras de su cabeza, para que está ocultaras su nariz y boca, casi tipo árabe.

— Feliz cumpleaños Mi jeon—