Sofy se estiró, estaba cansada, ayer el trabajo fue doble ya que ni Ceres ni Adaya se presentaron a trabajar y Dam tenía que cuidarse, la verdad no le importaba tomar ese tipo de turnos, pues su jefa siempre ha sido comprensiva cuando ella necesita ausentarse. Vio el calendario notando que cierta fecha se aproximaba, siempre se había preguntado qué hubiera pasado si ella en lugar de beta fuera alfa o un hombre, tal vez su historia con la omega castaña sería diferente. Soltó un suspiro, había cosas que era mejor no pensar.
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Arthur se movió entre las sábanas, su cuerpo le estaba reclamando la ausencia de sexo que llevaba desde hace unos días, pues se había acostumbrado a varias sesiones por semana y a veces en un solo días con Damy, pero debido al estado actual de su pareja eso no sería posible por un tiempo. Frustrado se levantó, debía ocuparse en otra cosa o mínimo tomar una ducha fría. Se alegraba de ser beta, pues si fuera alfa sus instintos lo traicionarían.
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Tom había decidido darse un descanso de sus "amigas" más que nada porque después de pasarla en grande con Sergei las experiencias en bares comunes no eran lo mismo. Tal vez llamaría al alfa para que salieran juntos de nuevo.
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Ceres se había levantado temprano para recibir a los proveedores, después del descanso y los cuidados de ayer se sentía mucho mejor, además había decidido hablar con Adaya sobre su situación. Tom llegó saludando como siempre, un rato después apareció Dam.
–¿Cómo les fue ayer?
–Todo bien, nada de lo que no pudiéramos hacernos cargo ¿tú qué tal?
–Pues estoy aquí hoy, gracias por todo.
–Veo que Day fue una buena enfermera, te ves muy bien.
–Hablando de Day ¿por qué no ha llegado?
–Acomode su turno, ella trabajará en la tarde y yo estaré en la mañana y así trabajamos mejor y ella estará menos tiempo cerca de ti, justo como querías.
–Ya veo –respondió sin denotar emoción –mejor –comenzó sus labores con una sola pregunta: ¿qué estará haciendo la alfa?
...
–Ven, está maquina es mejor –una hermosa alfa de melena roja en ropa deportiva guiaba a su compañera de ojos oscuros por un amplio y muy bien equipado gym del norte –te acomodas así y puedes ejercitar los brazos.
–¿Así? –la morena atendía cada indicación de la heredera, la verdad es que ambas se estaban divirtiendo.
–Muy bien –le sonrío –aun no puedo creer que nunca te hayas ejercitado en uno –se pasó una toalla secando algunas gotas saladas que bajaban por su rostro.
–Pues –dijo haciendo fuerza para mover el aparato –solía estar en equipos deportivos en mis escuelas, me ejercitaba al aire libre o en las canchas, muy diferente a esto –juntaba un par de barras frente a ella para devolverlas a su lugar.
–¿Y qué te parece?
–Me gusta –le regalo una sonrisa y la pelirroja se acercó.
–Después de esta rutina vamos a las caminadoras –la morena asintió repitiendo sus movimientos –y después podríamos ir a las duchas –dijo en tono sugestivo y la alfa de ojos oscuros se sonrojo.
–Suena bien, aunque pensaba que saliendo de aquí también podríamos ir a desayunar.
–Está bien –sujeto las barras haciendo que se detuviera –siempre y cuando pueda hacer esto –se inclinó y rozo sus labios con los Adaya, quien gustosa correspondió el beso. La heredera marcaba el ritmo lento y suave disfrutando de la boca de la otra alfa como si fuera un dulce, el móvil de la pelirroja sonó y ambas se separaron de mala gana –es mi hermano, debe haber visto las noticias –la morena negó con una sonrisa mientras su pareja se retiraba y ella volvía a los ejercicios.
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El deseo de la estrella
Fanfiction"Mi mamá me leyó alguna vez un cuento donde una princesa pide un príncipe todas las noches a las estrella. Un día una estrella fugaz escucha su plegaria y decide bajar para ayudarla a encontrar a su verdadero amor..." Ceres, a pesar de ser omega, s...