Eretria || Berlín×Tú×Palermo

TOCAR FONDO...

(...)

No hace falta decir que me la pasé la mitad del día en mi cuarto y la otra mitad caminando sola por los alrededores de la finca, disfrutando de la paz.

Por la noche decidí darme un baño. Llené la bañera hasta arriba de agua caliente, casi al punto de rebalsar y llenando de vapor todo el lugar. Tomé la pequeña radio de mi habitación para escuchar algo durante el baño y justo estaba terminando "Who you are" de Ed Sheeran. Debo admitir que me sentí algo tocada por la letra de esa canción, así que mientras la tarareaba mirándome al espejo comencé a sacarme la ropa al ritmo lento de la música. Sentía el tacto de mis prendas deslizarse por mi piel tibia y una leve brisa que entraba de la pequeña ventana entreabierta del baño me hizo poner la piel de gallina.

Lentamente me fui metiendo en la tina. Primero los pies para sentir un poco la temperatura del agua, y cuando estos tocaron el fondo, con cuidado me fui hundiendo, hasta tapar todo mi cuerpo, quedando solo con parte de mis hombros y mi cabeza fuera del agua. Cerré los ojos para relajarme un poco, y como si el mundo estuviera en mi contra, la radio comenzó a reproducir "Need You Now" de Lady Antebellum. Me reí irónica ante la canción que sonaba, más aún por la letra.

"It's a quarter after one
I'm all alone and I need you now
Said I wouldn't come but I lost all control
And I need you now
And I don't know how I can do without
I just need you now"

TRADUCCION:

"Es la una y cuarto,
estoy sola y te necesito ahora.
Dije que no vendría, pero he perdido todo control
y te necesito ahora.
Y no sé cómo puedo hacerlo sin ti,
simplemente te necesito ahora."

Las lagrimas llegaron una vez más a mis ojos, mientras reía, parecía una loca de verdad. Empecé a maldecir en 5 idiomas distintos, no sé a que en realidad, solo maldecía. Me odiaba a mi por estar de esa forma y solo pensaba en que hubiera pasado, si aquel día hubiera rechazado la oferta del profesor de unirme al atraco. Tal vez estaría presa, pero al menos no estaría en este momento de mierda. Y ahí es cuando empecé a putearme, a mi misma si, de sentirme tan idiota por haber tirado por el inodoro la pastilla abortiva hace unos días.

Si ya de por si era un problema que había disminuido un poco cuando conseguí la pastilla, ahora había crecido hasta el doble de gordo. Me creía tan inútil por haber dicho eso. Siempre hice idioteces por no pensar 2 veces, pero esto era demasiado. El Profesor no me conseguiría otras, eso era claro, y yo estaba jodida ya que tendría que proseguir con el embarazo, o al menos mantenerlo hasta que salga de la fábrica.

De solo pensar en todo eso y la música de fondo sonando, tomé aire y me deslice hacia abajo, haciendo que el agua me tape hasta la cabeza.

NARRA MARTÍN:

No podía dormir, como siempre. Todo lo que vine a hacer aquí fue intentar impedir que Andrés vaya a esa Fabrica, convencerlo de que robe el oro conmigo, arriesgado pero el premio era mejor. Si lograba convencer a Andrés, Sergio no seguiría adelante sin su hermano, por lo que cancelaria esto y sin ninguna otra opción, llevaríamos a cabo el plan del Banco de España.

Como sea, todo fue en vano, Andres estaba empecinado a seguir a cabo el plan de su hermano y no el nuestro, haciéndome perder el tiempo y quedándome aquí más de lo planeado. Lo único bueno que puedo rescatar fue reencontrarme con Merlina. Años habían pasado que no nos veíamos, luego de que ella huyó, sin siquiera despedirse; y me sentí pésimo después de que vio mi beso con Berlín, pero la realidad es que ella no sabe de mis sentimientos hacia él, de hace años.