Pandilla de Omegas - Vkook - Jimsu

0.9 Por ¿Qué?

Jungkook saltó a su cama apenas la vió, metiéndose bajo las cobijas sin importarle seguir vestido con elegante atuendo, y para rematar sucio de tierra y pasto debido a las últimas horas, pero no podría importarle menos, quería acurrucarse como un capullo de mariposa y agarrar el calorcito que tanto necesitaba dada la fría noche. Un puchero infantil se asomó en sus labios y miro al otro lado de su cama totalmente vacío, había insistido hasta más no poder en que Yoongi durmiera en su habitación como siempre que podían invitar a algunos de sus amigos, pero está noche Seokjin le había dado un rotundo NO, y el peli-menta tampoco era que intentará resistir junto a él para hacer su ansiada pijamada.

Si, Jungkook podía ser un poco mimado, pero ¿Qué Omega no lo era? en la cantidad que fuera, pedir pequeños caprichos era una condición de los de su clase.

Unos pasos se escucharon acercarse, había entrado sin cerrar su puerta y podía escuchar perfectamente lo que sucedía por el pasillo, en poco tiempo el aroma de su hermano mayor avisó su presencia dentro de la habitación, tras el cerró la puerta.

El castaño se extraño por eso, sacudiéndose de las cobijas para poder encarar al mayor que se hubo  sentado frente a la cama sobre la silla giratoria que tenía en su habitación.

-¿Yoonie? - Preguntó a pesar de estar viéndolo allí frente suyo.

El moreno sonrió y extendió una mano para revolverle el cabello con ternura. Namjoon amaba demasiado a su hermano menor. Hace poco tuvo una conversación sería con su pareja donde este le relató el desánimo que había estado llevando el omega menor desde que fueron a comprar su atuendo para la celebración del Solsticio.

-Hoy fue una noche muy estresante Kookie - Admitió el mayor considerando más como pudiera sentirse su hermano ante las circunstancias previas - ¿Te sientes bien?

El menor asintió con el entrecejo fruncido recordando las horas pasadas, más una sonrisa radiante sustituyó su expresión compungida.

-¡Pero como siempre llegaste a salvarnos! - Admitió aplaudiendo con entusiasmo - Tuve miedo, el señor Min es un monstruo, no podía dejar a Suga para que le golpeará - El chico bajó la mirada apretando los puños.

Namjoon notó como el ánimo de del chico se tambaleaba peligrosamente hasta llegar a la tristeza, sabía que la felicidad explosiva a veces era su escudo, mostrando una linda sonrisa por que se negaba a dejarse llevar por otras emociones. Sin dudarlo se levantó de donde estaba hasta ubicarse al lado del menor y envolverlo en un abrazo.

Jungkook había atravesado demasiadas emociones fuertes en un mismo día, él suele ser un chico alegre y animado, siempre buscando sacar una sonrisa y pedir un abrazo. Sin embargo todavía mantenía en sus pensamientos la posibilidad de que su hermano mayor buscará deshacerse de él a través de un matrimonio que definitivamente no quería, eso le hizo considerar la posición de Suga en ese momento, su amigo estaba viviendo justamente eso que tanto temía, de solo ponerse en esa situación hipotéticamente, su frágil corazón temblaba desamparado.

-Siempre estaré para cuidarte Kookie - Susurró mientras lo arrullaba como cuando era un tierno cachorrito - Incluso cuando tengas tu propio Alfa - Pronunció lo último con recelo, notando como el cuerpo entre sus brazos se ponía tenso.

Quizás existían promesas que no debían hacerse, pero a ninguno de los hermanos le importó.

-¿Por qué mencionas eso hyung? - Preguntó con una mueca floja siendo un intento de sonrisa.

El mayor alejó al chico tomando sus hombros para que no escapará, conocía a su hermano estaba nervioso por la mención de un alfa. Llevado por la duda, alzo una ceja observando de lado al chico que empezaba a jugar con sus manos.

-¿Hay algo que esté sucediendo que no me haya enterado Jungkook? - Demandó procurando no elevar la voz e intimidar al menor - Puedes contarme lo que sea.

El castaño mordió su labio no sabiendo qué responder exactamente ¿Debería decirle que ya sospechaba sobre sus planes para mandarlo lejos con otro alfa? No,no, no, eso no sería bueno, porque entonces terminaría rogando para que no le obligarán a casarse, y sabía que a su hermano no le gustaba ser contradecido. Una idea le iluminó como una bombilla que se enciende de repente.

- Es por el compromiso de Suga - En teoría no era una mentira, y estaba relacionado con un Alfa, así que debía trabajar con eso.

Namjoon suspiró y soltó los hombros del chico quien aprovechó de relajarse contra un costado de su hermano.

-¿Qué opinas de ese compromiso? - Dudó el moreno observando de reojo.

"¿Por qué la pregunta? "  Se cuestionó.

-Siendo sincero, me parece algo horrible Nam, ambos deberían casarse por que se aman - Afirmó sin evitar pensar en el mismo - Suga es muy especial, y ese amigo tuyo... no sé ni de dónde salió ¿Y sí es un tipo agresivo? - El castaño negó repetidas veces temiendo por la vida del omega - Me pongo en los zapatos de mi amigo y se me frunce el estómago...

Un escalofrío recorrió el cuerpo de Jungkook y prefirió alejarse del calor que le brindaba el cuerpo de su hermano llevando por el sentimiento, creyéndose el siguiente en la lista.

-Su padre no lo quiere y por eso no le importa regalarlo a un desconocido - EL moreno afirmó comprendiendo a lo que se refería - Y pensar que tú podrías... - Su voz se quebró y ocultó el rostro avergonzado de escucharse de esa manera.

Había dicho que no rogaría a Nam, pero era demasiado débil como para no hacerlo.

La conmoción golpeó a Namjoon directo en el rostro, molestia y dolor por iguales ¿Cómo podría pensar su hermanito semejante cosa? Le ha demostrado toda su vida que era una prioridad, le cuidaba, le mimaba, le explicaba cada tontería que pudiera preguntar, y ¿esa era la imagen que Jungkook tenía de él? 

-¡Basta! - Gruño silenciado las súplicas del menor - No entiendo de donde sacas semejantes ideas, me siento decepcionado por esto - Jungkook abrió los ojos asustado - ¿Crees que te obligaría a unirte a alguien? -Preguntó ofendido por la desconfianza - ¡JAMÁS HARÍA ALGO ASI! - Gritó espantando al menor.

Jungkook se sintió un verdadero idiota, vergüenza era poco para lo que estaba sintiendo, sin contar la enorme culpabilidad que lo empezaba a comer por dentro, quería celebrar que sus suposiciones eran, más que absurdas, imposibles, pero entonces observó el rostro molesto del moreno, le había ofendido.

Namjoon era un hombre comprensivo, la mayoría de las veces perdonaba lo atolondrado del más joven, excusando que su personalidad risueña era igual de dramática y torpe para ciertas cosas. Pero esto iba más allá de un descuido del menor ¿Dónde quedaba la confianza en la familia? para el Alfa eso era algo sagrado.

-¿Qué gritos son esos? - Un azorado Jin abrió la puerta sin pedir permiso para entrar, luciendo una pijama rosa palo, con los últimos botones sin abrochar - Tenemos invitados durmiendo - Regañó entrando a la habitación exigiendo respuesta con la mirada.

El moreno se levantó de la cama aún con el sentimiento a flor de piel, dio un último vistazo hacia su hermano y negó con la cabeza, dejando un beso en la mejilla de su omega al pasar junto a este, saliendo sin decir nada de la habitación.

-¿Y bien? - Exigió una respuesta al menor, enfatizando con un movimiento de la cabeza.

El menor cubrió su rostro apenado y respondió sin ver a su cuñado a los ojos.

-Creo que acabo de ofender a Nam... - Explicó dejando caer su cuerpo sobre la cama.

Seok Jin llevó una mano a su rostro y negó desaprobando aquello.

-Jungkook -Llamó con voz demasiado dulce para el gusto del mencionado.

-¿Si? - dudó.

-¡NO TE DUERMAS VISTIENDO ESA ROPA! - Regañó al menor evitando alzar la voz - La vas a estirar y es nueva - El menor bajó la vista a su cuerpo y asintió dispuesto a obedecer.

Ya dejando las cosas claras sobre la importancia de cuidar la ropa, el mayor dejó la habitación deseandole buenas noches.

Sin embargo el sentirse tan tonto como para haber acusado a su hermano, ignorando los años de amor y cuidados que éste le había brindado, no le permitieron pegar un ojo en lo que quedaba de la noche.