PISTA 18

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SASUKE

CRAZIER (3:08)

Asunto: ¡Dios mío! ¡Buenas noticias!
Reúnete conmigo en el embarcadero hoy al mediodía. En el sitio nuevo. Tengo que enseñarte algo. ¡Ven preparado!
Sakura

Asunto: Re: ¡Dios mío! ¡Buenas noticias!
Estoy bastante seguro de que, sea lo que sea, ya lo he visto. Varias veces anoche, y la noche pasada, y la semana pasada...
Sinceramente,
Sasuke

Asunto: Re: Re: Re: ¡Dios mío! ¡Buenas noticias!
Esto no está relacionado con el sexo, gracias. Date prisa.
Sakura

Una hora después, vi a Sakura frente a la tienda. Esperaba que se diera la vuelta y me mirara. Llevaba el pelo recogido en una coleta y sus ojos jade brillaban aún más bajo los intensos rayos del sol.

—Has tardado un montón —dijo al verme—. Ya veo que hoy has decidido ponerte camisa.

—Solo porque me has dicho que esto no estaba relacionado con el sexo. — Casi la abracé para besarla, pero me contuve. Todavía no sabía qué era lo que estaba pasando entre nosotros, y aunque ahora manteníamos una relación más íntima, todavía no habíamos pasado a la etapa de mostrar afecto en público, y no estaba seguro de qué pasaría si lo hiciera.

—¿Quieres que te lo cuente aquí o mientras almorzamos? —me preguntó.

—Mejor durante el almuerzo. —Le indiqué que me siguiera al interior del local y nos sentamos en la parte de atrás.

La camarera anotó el pedido con rapidez y prometió que nos lo traería en menos de diez minutos.

—Entonces... —empezó ella, sonriente—. De hecho, tengo tres noticias, y voy a dejar que elijas cuál...

—Hoy estás jodidamente preciosa —la interrumpí, mirándola mientras me preguntaba por qué nunca me había fijado antes en lo impresionante que era—. De verdad. Estás guapísima....

Se sonrojó.

—Gracias... —Guardó silencio durante un momento antes de volver a hablar —. ¿Quieres que te dé antes las buenas noticias, las malas o las regulares?

—Las malas.

—Hace media hora me he encontrado con tu ex, Karin, y se me ha puesto a gritar delante de todo el mundo en el supermercado.

—¿Qué te ha dicho?

—Que me odia, que te odia, que odia tu polla diminuta....Me ha dicho que si alguna vez terminábamos juntos, se encargará personalmente de sabotear nuestra boda... Con un ejército personal de gatos, estoy segura.

Me reí.

—¿Cuáles son las noticias regulares?

—Intentó golpearme y ha acabado en el suelo.

—¿Lo dices en serio?

—Por supuesto que no —se burló—. La han puesto en el suelo los de seguridad, pero lo he intentado. —Sonrió mientras la camarera nos dejaba los sándwiches.

—¿Quiero conocer las buenas noticias?

—Perdón, son fenomenales. —Sacó un sobre doblado del bolsillo y lo puso encima de la mesa para deslizarlo hacia mí—. Ábrelo.

Dejé la servilleta y cogí la carta. Se trataba de una breve notificación del Collège Culinaire de Francia.

—Están profundamente arrepentidos por el enorme error que cometieron al procesar tu solicitud anterior y estarán «encantados y muy honrados de que formes parte en su nuevo grupo de chefs de formación clásica» —leí, realmente contento por ella.

—Sigue leyendo... —Sonrió—. Eso no es lo mejor.

Lo leí y lo resumí en voz alta.

—Dado que ha habido un error y el plazo es ahora muy corto, debido a tu enorme talento y las cartas de recomendación recibidas, te ofrecen una beca completa si confirmas tu aceptación.

Lanzó un chillido.

—¡Enhorabuena! Me alegro muchísimo por ti. —Le estaba devolviendo el papel hasta que capté la línea en negrita que había en la parte inferior—. Ahí dice que tienes que estar allí el 16 de junio. ¿Te va bien?

Asintió, todavía sonriendo.

—Saku, solo faltan dos semanas.

—¿Qué? —Su sonrisa se desvaneció lentamente y me arrebató la carta—. No, no es así. Es... —Volvió a leer la carta una y otra vez—. Cuando la he recibido esta mañana, no me he fijado en la fecha... Hubiera jurado que decía que era en julio.

—Y es un programa de dieciocho meses sin descansos intermedios —informé, leyendo la letra pequeña—. Solo tienes cinco días libres entre semestres para tus cosas... Y el primero será dentro de seis meses.

Sus ojos se encontraron con los míos, y ninguno de los dos dijo nada durante un buen rato.

Me levanté y me senté a su lado en el banco. Sus dedos y los míos se entrelazaron de forma automática por debajo de la mesa mientras la miraba a los ojos.

—Aprovecharemos al máximo el tiempo que nos queda.

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Nos estamos acercando a la mitad de esta historia wuuuu, espero leer sus comentarios <3

Siempre SasukeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora