El día más estresante de mi vida

317 60 317
                                    

¿Adivinan que día es hoy?

Si, el día de la pijamada. Pero hay algo más.

Hoy es el día que voy a ir presa por segunda vez en dos años y un poquito más.

Intentamos grabar unas escenas y como son en la calle y no tenemos permiso para hacerlo, no podemos reclamarle a la persona de la casa cerca de donde grabamos que le baje volumen a la música.

Porque de paso es puro rock. Ni siquiera un merenguito o una salsa brutal ahí. No. Rock. Hasta los aliens que están en Marte están escuchando su bulla allá arriba.

-Intentemos de nuevo, chicos-dice Ani, cansada. Ya hemos grabado la misma vaina cuatro veces-Desde arriba.

Rodé los ojos y me paré frente a Danny, ese es otro que ya estaba ladillao.

-Me tienen el webo flaco-me quejo. Se supone que tendría que estar en mi casa desde hace dos horas. Pero no, aquí estoy.

-Me agrada como lo que dices-me dice Danny-Así que diré que a mi también, niña.

Ani gritó "Acción" sobre la música.

Pero antes de que yo pudiera hablar, un solo ruido me lo impidió. Un bajo siendo tocado como si estuviera torturando a alguien.

-¡Corte!-exclamó Ani y se restregó los ojos frustrada.

-Déjame solucionarlo, Ani-dijo Danny de lo más relajao y caminó hasta el frente de la casa.

-¡CIEN DÓLARES A QUE TERMINAMOS PRESOS!-le grité al equipo. Todos comenzaron a sacar dinero y a gritar apuestas entre todos.

Me fui a hacerle compañía a Danny porque de bolas que voy a meter cizaña. Y voy a reclamar mi autoridad como cantante para expropiarle el pobre bajo que tiene en su casa.

Danny silbó durísimo con sus dedos en la boca y unos segundos después, la música se detuvo y salió un tipo como de unos 30 años. Que ni siquiera aparentaba ser rockero con sus lentes gruesos, más blanco pote e leche que yo y de paso con cara e mongolico.

Casi se muere cuando vió a Machete en el frente de su casa.

-¿Ma-machete?-tartamudeó con los ojos bien abiertos.

-Hola, hombre-lo saludó serio-¿Crees que podrías bajarle volumen a tu música? Intentamos grabar una película.

El tipo salió de su trance y miró las cámaras a unos metros de donde estábamos.

-¡Claro que si, machete!-dijo feliz.

Fruncí el ceño.

-Ajá, ¿Y los coñazos?-cuestioné y Danny me tapó la jeta con la mano. Me encogí de hombros. Tiene razón.

-Gracias, hombre-le dijo y se despidió con una mano, el hombre entró a su casa de nuevo y Danny me empujó para caminar. Me destapó la boca.

-Por lo menos me hubiese quedado con el pobre bajo que está torturando en su casa, Danny-refunfuné.

Se rió y le hizo una seña a Ani que todo estaba bien. La música se había detenido por completo.

La mitad de la gente del equipo tenían cara de culo y le tendían billetes a la otra mitad que estaba celebrando haber ganado la apuesta.

-Estoy seguro de que tienes instrumentos en tu casa, niña-se burló.

Y patalee con la niña malcriada que soy.

-¡No tengo un bajo!-le aclaro.

-¡Entonces ya sé que regalarte en tu cumpleaños!-dijo, quitándole importancia al verdadero asunto.

¿Es neta, Venus? | Froy Gutiérrez (#VF2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora