Capitulo 27:Un nuevo color

192 10 3
                                    

Al salir del bar nos despedimos todos, Rose espera a que Jhon traiga el auto, Adam se acerca y le dice que me llevara con él esa noche, que no me espere, ella muy risueña, y medio tambaleándose por los tragos de más, se sujeta a su brazo y le resp...

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Al salir del bar nos despedimos todos, Rose espera a que Jhon traiga el auto, Adam se acerca y le dice que me llevara con él esa noche, que no me espere, ella muy risueña, y medio tambaleándose por los tragos de más, se sujeta a su brazo y le responde.

- Pues que no nos espere nadie, porque yo me voy con Jhon.

Y suelta una risa graciosa, mientras lo palmea en el estómago, a lo que el, medio incomodo, pero risueño le palmea la cabeza. Ya quiero ver su cara, cuando le diga mañana lo que hizo, se pondrá roja de vergüenza.

Ya de camino en su auto, llevo su saco en los hombros y entierro mi nariz en él, llenándome de su exquisito aroma, mientras observo su perfil, se ve cansado y despeinado de bailar, lo que me hace sonreír.

-¿Cómo salió todo en tu viaje?

- Bien, nunca me he molestado estos viajes, eran solo rutina, pero esta vez fue diferente, te extrañe mucho, a la otra te vas conmigo.

-¿Ana te acompañaba ?, no lo mencionó .

- No, prefería ir solo. Y ella lo agradecía.

-Y Demian ¿lleva a su asistente?

-Sí, paso algo muy molesto.

-Si fue molesto, ¿Por qué sonríes así? Le pregunto confundida, porque una sonrisa enorme se formó en sus labios, cuando me dijo eso.

-Es que siempre tiene que andar con sus cosas este hombre.

-¿Que Paso?

-Pues que siempre termina saliendo con sus asistentes, les da regalos y todo eso, pero no es nada serio, y ellas lo saben, no duran mucho, siempre surge algo o él se cansa rápido y las cambia. Como esta vez. Por la noche, escuche gritos de su habitación al lado, el muy idiota se fue a un bar y se trajo a una chica con él, olvidándose que Gina estaba ya ahí, la cosa se puso fea, se escucharon golpes, lanzaron cosas supongo, a su cabeza espero, obviamente los huéspedes llamaron a recepción, todo se salió de control, cuando me asome por la puerta vi muchos huéspedes en el pasillo, observando como el gerente fue a calmar la situación, él estaba todo mojado, alguna de las dos le lanzó algo a la cara empapándolo, ellas estaban deplorables, despeinadas, con la ropa rota y arañazos en la cara. Demian me miró rogándome por ayuda con los ojos.

-¿Qué hiciste?

-Me reí y me metí a mi cuarto, dejando que arreglara sus líos él solo.

-Que pena pobre ... pobres chicas ... me hubiera gustado verlo . No pude resistirme me reí solo de imaginarlo en esos aprietos.

- Fue todo un espectáculo, el vuelo de regreso fue bastante incomodo, venían enfurruñados, lanzándose miradas asesinas.

Ya que dejamos de reírnos, la conversación me hizo pensar en algo y después de dudarlo un poco, decidí preguntarle.

-¿Tú también has hecho cosas así? Ya sabes, llevarte chicas a tu cuarto.

DestinadosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora