Espérame ©

¥ Capitulo 21 ¥

Karol Sevilla, Mexico.

Alguna vez, pensaron que una mentira podría arruinarles la vida, o que simplemente ocultar un secreto del pasado, haría que tu mundo se derrumbe, en este momento no se como sentirme, el lo descubrió todo, y por más que me duela, se que tengo que decirle la verdad, aunque eso signifique que se aleje de mi, para siempre.

—Tenemos que hablar.—entre al cuarto, para tomar su mano y entrelazarla con la mía.—Pero no aquí.—lo saque de la habitación, con mano en brazo, y antes de cerrar la puerta, observe el cuarto por última vez, suspire con tanta fuerza que hasta él me escuchó.

—Que es lo que tienes que decirme.—pregunto preocupado, todo su sueño de esta mañana había desaparecido.—Te ves muy pálida.—concreta.

—Hay algo que debes saber.—me siento en el mueble de la sala, y esperando a que él haga lo mismo.—hace dos años yo...—El sonido de mi celular, se hace presente, y sinceramente no sé si sea un salvado por campana.

—Tu celular, contesta, es tu mamá.—me da el aparato son más.

Cell Phone.

—Karol, estas con Ruggero, ahí.

—Si porque.

—Aléjate un momento.

—Pasó algo con la familia.

—No, es solo que me acabo de acordar, que no desempaque el cuarto de Rafaela, como me lo pediste, perdón he estado muy ocupada.

—Pues ya ni te inmutes, ya lo vio.

—¿Que?, ¿Como que lo vio?, Karol ¿No le habrás dicho nada verdad?

—Estaba por decírselo.

—Pues vete olvidando de esa idea, si te pregunta por el cuarto dile que el departamento en el que estás es de tu prima Nancy.

—Para que?

—Para que así, le puedas decir que ese cuarto lo decoró ella, porque su hija falleció y es una bonita forma de recordarlo, pero como últimamente está tratando de superarlo te dejo el departamento a ti.

—No le puedo mentir así mamá, me va a odiar.

—Ya tu vez qué haces, pero no le digas nada, por lo menos no ahora, hazlo por mi si.

—No se si pueda.

—Eres buena actriz, saca los dotes que llevas dentro.