Espérame ©

¥Capitulo 29¥

Maraton 1/7

—Karol Sevilla, Argentina.

Las cosas pasan muy rapido, el enterarme que estoy embarazada ahora, es dificil de creer para mi, saber que si hablo con Ruggero sobre Rafaela será complicado para el embarazo que llevo me preocupa, pero ya llego el momento de que él sepa la verdad, no puedo seguir callando esto, vamos a tener una familia, y a la familia nunca se le ocultan cosas.

—Sabes es que ya nos vimos juntos, en una casa grande, con varios cuartos, para que los niños no se peleen.—La emoción que refleja es impresionante, se nota que siempre quizo esto.—este serca a un super para hacer las compras, y podemos buscar colegios que no queden muy lejos.

—Y tambien les vas a buscar la univercidad.—lo interumpo riendome, generando un pequeño regaño con su vista que no dura mucho para que me acompañe en estas risas.—Aun no ha nacido y planeas ya una vida, me haces sentir inutil.—Sincera.

—No amore, mira es que.—suspira.—siempre fue mi sueño ser papá, creo que fuera de todo lo que es mi carrera, me gustan los niños, y quiero tener mucho hijos.—comenta con orgullos, mientras toma mi mano para planatar un beso en ella.

—Muchos hijos, y con quien?—me hago la desentendida.

—Contigo, con la reina de mi vida, y la que va hacer madre de mi primer hijo, y todos los hijos que vengan.—me explica con ternura.

—Respecto a eso.—supiro.—tengo miedo Ruggero, soy muy pequeña aun, tengo 21, por lo que se es muy peligroso tener hijos a tan temprana edad, tengo temor de no ser buena madre?—saco mis inseguridades a flote.

—Haber no, no, no—niega abrazandome—tu vas hacer la mejor madre del mundo, vamos a estar junto en esta te lo prometo.

—Esque le temo más a eso, Ruggero despues de que te diga algo, puede que no me quieras ver nunca más.—me duele aceptar que si le digo la verdad en este momento el me odiara de por vida, pero es mejor ahora, no quiero que cuando mi hija nazca ve a sus padres peliarce y estar separados.

—Es tu secreto verdad?—pregunta intrigado, pero a la ves veo su rostro, tiene miedo, miedo de saber si lo que le puedo contar es tan grande, que cambiaria nuestro futuro juntos.—tan grande es que hasta nos puede separar?—sigue con esa incognita, que yo aún tampoco quito de mi cabeza.

Estos a nada de contarle y soltarlo todo, pero un ruido en la puerta nos interumpe, son las chicas que vienen a cuidar a ruggero.—Hola Karol—habla una de ellas.—Nos enteramos que desperto y queriamos venir a verlo—comenta la segunda.—pero si estann ocupados nos vamos—completa la chica que faltaba hablar.

—Quiene son?—pregunta ruggero, y no es raro, ya que practicamente no las conoce y ellas a el demasiado diria yo, que no me vean así no estoy celosa, son sus fans y ellas lo cuidaron mientra yo tenía que limpiar la imagen de ambos.

—Te presento, ella es Giare, Ana y Tini.—digo señalandolas en el mismo orden.—son tus fans, sus madres son doctoras, y venian a cuidarte mientra yo no estaba.—le explico mientras me siento al lado de la camilla para rodear mi mano con la suya y plantar un beso.

—Bueno gracias por cuidarme.—dice ruggero y las chicas no pueden creer de que estan hablando con su idolo, siento su emoción hasta donde estoy.