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"El tiempo te dirá cuánto te amo"

—Jeon Jungkook

Jungkook descansaba su cabeza en las piernas de su única y querida amiga; la misma acariciando su sedoso cabello oscuro

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Jungkook descansaba su cabeza en las piernas de su única y querida amiga; la misma acariciando su sedoso cabello oscuro.

Miraba el cielo limpio de manchitas blancas. La estrella agarrando cada rayito de luz para llevarlas consigo y darle paso a la luna menguante.

Mañana es mi graduación.

No habíamos tenido la oportunidad de encontrarnos, ambos estabamos en las finales de los exámenes consumiendo todas las horas de nuestros días, tampoco habiamos vuelto a correr juntos. Por acuerdo tácito seguimos corriendo por caminos distintos
Y bueno, aquí estamos; aprovechando al máximo el tiempo juntos. Como si fuera él último día como amigos.

Hablando de nada y de mucho a la vez. Jihyo me contó que poco a poco iban operando a sus compañeras de clase.
Permaci callado escuchando atentamente el rumor de una chica; antes de sus intervención había desaparecido y que no era la única. Mientras que el reloj giraba, yo llevaba la cuenta atrás

La mayoría no volverá a verse, Jihyo y yo no nos volveremos a ver, y aunque nos veamos será distinto. Seremos adultos, estaremos curados, numerados, etiquetados y emparejados; identificados y colocados pulcramente en nuestro camino vital, piedras bien pulidas a las que se empujan rodando por cuestas uniformes bien trazadas.

–Saquemos una foto. – propuso de la nada Jihyo.

Aunque me negara sabía que la acción de Park sería todo contrario a mi respuesta.

No me quedo de otra que levantarme y caminar hacia mi mochila, reposando en la canasta de mi bicicleta. Sacando de esta un trípode.
Con la mirada pedí a Jihyo que me alcanzará su cámara fotográfica. Posicionó la minicandy apuntando directo por donde había desaparecido el sol. Yendo a configuraciones pinche el temporizador configurando con diez segundos.

Me sentía extraño haciendo este tipo de cosas, sacarse fotos o como dirían los chicos de mi edad; selfie.
La última fotografía tomada con un Jungkook, fue hace mucho tiempo.

Soy inseguro en muchos sentidos, así que me sentí idiota levantando la mano formando un puño, solo dejando mi dedo índice y dedo del medio a la vista. Ni siquiera me había ocurrido algo mejor. En el último momento, Jihyo se cuela de un salto y me pasa el brazo por los hombro...

¡Click!

Ahí estamos: yo vuelta hacia ella, con la boca abierta, con la boca abierta, sorprendido, a punto de reírme

De verdad pienso que aquel día había algo especial, algo dorado y quizás incluso mágico, porque a pesar del revoltijo de emociones en mi cabeza; siento que puedo sonreír sin forzarme.

De camino a casa, repaso cada momento con Jihyo en la pradera. Ella no volvió a mencionar la tarde en los laboratorios, para mí sopresa, porque su mente tiene tendencia a saltar de tema a otro, y su nueva obsesión es un derrumbamiento en un extremo de la frontera. Yo ni siquiera me planteo volver a ir a los laboratorios, ni por una milésima de segundos. Me centro en cualquier otra cosa que no sean mis pensamientos con respecto a Taehyung, pero no me cuesta tanto, teniendo en cuenta que ahora no puedo creer que pasara una noche corriendo por las calles de Seul, y que mintiera a Hee-sook solo para reunirme con él.

DELIRIUM | TAEKOOKDonde viven las historias. Descúbrelo ahora