Como Una Estrella Fugaz BNHA

10 - Aizawa -

Llegamos a la cafetería, Todoroki me dejó en una de las mesas.

-Iré por algo caliente. - Dijo- ¿Quieres té? ¿Chocolate?

-Chocolate está bien, gracias. – Sonreí.

Mi cuerpo empezaba a recuperar su temperatura, estuve esperando y recordé que tenía que pasar por la oficina del director, Todoroki regresó y colocó en la mesa dos tazas que contenían chocolate.

-Chocolate caramelo, chocolate vainilla. - Dijo él y señalo cada uno. Tomé el chocolate vainilla.

- Gracias. - di un sorbo.

-Está muy caliente.

-Muy tade.- dije mientras aventaba con la mano un poco de aire hacia mi boca.

-No creí que tu Quirk también sería de fuego y hielo. - Dijo y lo miré.

- No es exactamente de hielo y fuego. – Dije mientras enfriaba un poco mi bebida.

- Pero lo que hiciste.

-No le digas a Bakugō que te lo conté primero, si se entera me mata. – Él asintió. – Mi Quirk no es exactamente de hielo y fuego como el tuyo. No puedo crearlo de la nada como tú lo haces.

-Hiciste muros de hielo...

-Eso es otra cosa, puedo aumentar o disminuir la cantidad del elemento. Necesito tener presente lo que voy a usar, como puede ser las explosiones de Bakugō, que van principalmente con nitroglicerina y al detonarse contiene fuego, puedo aumentar la intensidad de la explosión o disminuirla hasta que desaparezca por completo, de la misma manera con el agua, puedo manipularla, cambiarla de estado.

- ¿Y las rocas?

-Oh eso. – Puse mi mano sobre la mesa. - Puedo usar telequinesis y mover lo que quiera. - Atraje la otra taza de chocolate que estaba en la mesa. – Y eso es todo.

-Lo del final...

-Ah... Verás... - Bebí un poco. - No sé cómo, pero, por alguna razón, puedo almacenarlo y usarlo para otra ocasión. Hasta que se termine. - Extendí mi mano y dejé salir un poco del hielo que había dejado entrar en mí. – Es la primera vez que tomaba agua en su estado sólido, así que sentí que me congelaba. - Reí.

-Lo que pasó con Bakugō, cuando Aizawa intervino, ¿Eso fue...?

Hasta aquí llegaba la charla de mi Quirk.

- Oh, mira la hora. – Me levanté. – Tengo que ir donde el director. – Tomé el chocolate y empecé a caminar rápido mientras cojeaba.

- Te ayudo. – Dijo él.

-No.- Extendí mi mano. – Iré sola. Gracias por el chocolate, te lo pagaré más tarde.

Salí del lugar. Fui a los vestidores y me cambié de uniforme, me quedé sentada por un momento esperando que el dolor de mi tobillo se fuera, poco a poco disminuyó, pero no desapareció del todo, ya era capaz de caminar con normalidad.

Llegué al despacho del director, golpee tres veces y esperé hasta que la voz dentro de este, diga que podía pasar. Entré y vi al director en su silla. Me señaló el asiento que tenía enfrente y me senté.

- ¿Qué tal tu entrenamiento? - Dijo él.

- Creo que bien. – Dije. – Aizawa Sensei dijo que viniera a verlo.

-Necesito que me des ya tu nombre para hacer los papeles que necesitas.

Rebusqué en mi maleta.

-La verdad, me olvidé de pensar en un nombre. - Abrí uno de los bolsillos. - Pero, quizá este sirva. - Le entregué el papel que Todoroki me había dado junto a su flan salado. – Me gusta ese.