19 - No quiero ir -

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- ¿Cuándo vas a dejar de evitarme?

- No te estoy evitando. – Respondió a la pregunta de Aizawa.

Hikaru regresó la mirada hacia su tutor mientras él conducía.

- Yo... Nunca estuve preparado para ser un buen padre. – Detuvo el auto en una luz roja. – Y tampoco creo que sea un buen tutor.

- Lo eres. – Confirmó la chica. – Y serías un muy buen padre. – Volvió la mirada hacia la ventana. – No recuerdo a mis padres. Pero me gusta tenerte a ti. Me cuidas y me proteges, aunque a veces es mucho... - Aceleró.

- Lo hago porque me preocupo y quiero que te sientas bien.

- Lo sé. Y creo que... eso te hará un buen padre. Si en algún momento tienes una hija o un hijo, será muy feliz de tenerte. – Suspiró. – Yo... Yo soy la única que trae problemas y lo lamento. Haré lo posible para que no tengas que preocuparte por mí. – Arrimó la frente en la ventana y cerró los ojos. – Todavía estoy procesando la parte en que ya no puedo usar mi Quirk por completo... Y creo que necesito algo de tiempo... Y... - Suspiró.

- ¿Sucedió algo más?

- ¿Supiste lo de Kiri y Shoto?

- ¿Lo que se pelearon? Si. El señor de la tienda llamó para que los fuera a ver.

- ¿Se pelearon en una tienda?

- ¿No me hablabas de eso?

- Si... Si. ¿Te dijeron qué sucedió?

Aizawa negó.

- All Might fue quien habló con ellos.

- Oh, bien.

Llegaron a las instalaciones de la U.A y Aizawa dejó a la chica en donde se encontraban todos los estudiantes, para luego retirarse hacia la residencia de maestros.

- Como te fue, princesa. – Shoto salió al encuentro de la chica.

Ella de su bolsillo sacó su licencia.

- ¡Ta-da! – Rio.

- Felicidades. – Se acercó y depositó un beso en sus labios.

- No deberían besarse en medio de la sala. Si Iida los ve, va a darles una larga charla. – Uraraka entró junto a Mina, Sero y Midoriya.

Hikaru rio y volvió a besar a Shoto.

- Iré a descansar. Adiós. – Se despidió de todos y fue a su habitación.

Se dio una larga ducha y colocó el pijama, se recostó en la cama, dio vueltas por unos minutos, sin poder conciliar el sueño, tomó su celular y llamó a Todoroki.

Tú:
Mochi. ¿Estás despierto?

Mi número 1:
Si. ¿No puedes dormir?

Tú:
Tenía sueño, pero me acosté y ya no lo tengo.

Mi número 1:
Espera.

Tú:
Ok.

Hikaru esperó y él no volvió a responder.

Tú:
¿Mochi?

Tú:
¿Shoto?

Tocaron la puerta tres veces, se levantó de la cama y la abrió. Del otro lado se encontraba Todoroki Shoto con los ojos adormilados.

- ¿Qué haces aquí? – Dijo ella.

- Dijiste que no podías dormir. Vine a acompañarte hasta que te duermas. – Bostezó.

Como Una Estrella Fugaz BNHADonde viven las historias. Descúbrelo ahora