11 - ¿Te gusta? -

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- Cuídate y no te lastimes – Dijo Mina. – Si estás aburrida llámame. – Me abrazó.

- ¡Suerte! - Dije.

- ¿En serio te quedarás aquí? – Dijo Kaminari.

- Si, pasaré con Aizawa y Eri. – Dije.

- Llámanos si quieres hacer alguna cosa. – Kaminari salió de la residencia.

Era el último viernes antes de las vacaciones de verano, el director dio permiso para que los estudiantes puedan pasar un mes fuera de las instalaciones de la U.A. yo la pasaría en la residencia, ya que Aizawa se quedaría cuidando a Eri en la residencia de maestros y prefería que estemos relativamente cerca.

La primera semana no hice nada, solo tuve una "seria" conversación con Kirishima.

Llamada

-...

-...

- Entonces... ¿Te gusta? – Preguntó y escuche como masticaba algo.

- No lo sé. – Dije y me puse boca arriba.

- Ya te he dicho todas las razones por las cuales debería gustarte.

- ¿Acaso estás actuando como cupido o qué?

- Nunca había visto a Todoroki actuar así con alguien, en mi opinión de hombre. – Aclaro su voz. – Le gustas.

- Claro que no.

-Claro que sí. ¿Te sigue enviando mensajes todas las noches?

-Sí, pero eso no tiene nada que ver.

- Le gustas.

- Que no le gusto.

- Si, si le gustas

- Que no.

- Si le gustas.

- Ya te dije que no.

-Pero te gusta.

- Si... No... No... No me gusta.

- Me quedo con el sí.

- Olvida lo que dije.

- Si se hacen novios avísame.

- ¡Kirishima!

- ¡Buenas noches, pequeña! – Colgó

También hubo nuevamente problemas con la prensa. Intentaron entrar a las instalaciones.


Eran pasadas las 6pm de un miércoles, estaba en mi habitación escuchando música, el calor entraba por la ventana y el aire acondicionado estaba al máximo, no tenía nada que hacer. Me levanté y fui a la cocina de la residencia. Abrí la nevera y vi lo que había comprado Aizawa para la semana, él era quien se encargaba de hacer las compras ya que no me dejaban salir sin la supervisión de "alguien responsable", pero gracias a eso, lo único que había en la nevera eran vegetales y botellas de agua. Abrí la alacena, había bolsitas de té y galletas de sal.

La puerta se abrió y me asome para ver quién era. Eri entró corriendo y detrás de ella, Aizawa se encontraba de pie con una maleta.

- ¡Hikaru! – Dijo Eri y llegó a mi lado.

-Hola Eri. – Dije y le acaricié la cabeza. – Hola Aizawa.

-Hola, Nyx – Dijo él y me extendió la maleta. – Voy a estar ocupado por esta semana. Cuida a Eri ¿Si?

- Claro. – Dije y cargué la maleta. - Eri, ve a la cocina ¿sí? Prepararemos algo juntas – Ella asintió y fue a donde le había dicho. –Si te llamo contéstame. ¿Entendido? – Dije y lo miré seria.

Como Una Estrella Fugaz BNHADonde viven las historias. Descúbrelo ahora