Las fiestas se acercaron muy rápido, las vacaciones se hacían más cortas sin embargo sentía más felicidad por la navidad.
El tiempo le había servido a Hannah para adaptarse a su nuevo hogar, a Rian y a mi para desmentir a Julieta quien no había estado embarazada, sólo era una farsa y a Gael para regresar a su país, porque fue lo que se vio obligado a hacer nuestro amigo.
𝐄𝐬𝐜𝐞𝐧𝐚 𝐫𝐞𝐭𝐫𝐨𝐬𝐩𝐞𝐜𝐭𝐢𝐯𝐚:
Mi novio siempre se disponía a llevarme a casa, aunque era más complicado para él en este momento, íbamos en un carro distinto, no tan moderno como los otros pero si que era muy bello. Aunque no le gustaba decirlo y confiaba en su habilidad Rian estaba perdiendo mucho. No quise preguntar al respecto, al final él siempre dice que sabe lo qué hace y yo siempre lo iba a apoyar en cada una de sus decisiones sin importar qué.
—¿He mencionado lo feliz qué me haces?— dice cuando se detiene en un semáforo y posa su mano sobre mi pierna acariciando suavemente
—Tú también me haces muy feliz— contesté y deposité un beso en su mejilla
—Quiero pasar esta y el resto de mis navidades junto a ti— me mira a los ojos y en estos solo se reflejaba la verdad que contenían sus palabras
¿Hablaba en serio? Rian no es de las personas que quieran quedarse para siempre en un lugar, ni siquiera su trabajo era cosa estable, ¿Por qué alguien inestable haría ese tipo de juramento?. Pese a que sé que decía la verdad yo solo sonreí, era lo que siempre hacía pues no quería decir ninguna palabra que el viento iría a borrar o llevarse.
Siguió conduciendo, nos sentíamos cómodos aún con el silencio que había y eso daba mucho que decir. Pasamos por la antigua casa de Hannah donde un hombre alto sacaba equipajes de la casa, y no muebles y esas cosas. Parecían las pertenencias de alguien, sólo se me pasaba Gael por la mente al verlas.
—Detente aquí— exigí a mi novio y lo hizo
—¿Pasa algo bebé?— pregunta sin entender nada
—Creo que son las cosas de Gael— salgo con prisa del auto y Rian me sigue
Abrí la puerta del taxi que llevaba el equipaje sin siquiera molestarme en pedir permiso y efectivamente era Gael.
—¿A dónde vas?— pregunto desconcertada y él golpea su frente lamentando haber sido descubierto y sale del auto
—Me voy a España, ya es tiempo de volver— suspira, decía una cosa pero parecía querer otra: quedarse.
—¿Por qué te vas? Nadie sabía esto Gael, no puedo creer que ibas a dejarnos así por así— ruedo los ojos indignada
—¿Que querías que hiciera Annie? No me voy a quedar con Rocío, incluso Hannah ya encontró su lugar y es hora de que yo encuentre el mío, en España pero lejos de mi familia que está completamente loca— al fin tanta felicidad fingida había estallado y ahora estaba hablando desde el corazón, no pensé que cuando lo hiciera sería porque fuera a marcharse
—Si tienes lugar aquí, tus estudios, y ya tienes familia, ¿Qué hay de Hannah, Rodrigo, Allan y yo?— lo empujo dejándome ganar por la rabia y Rian me contiene abrazándome por la espalda impidiendo moverme
—Los quiero demasiado chicos, por eso me iba sin despedirme, no quiero verlos sufrir. Gracias a ustedes reuní el coraje de encontrar mi propio camino, de enfrentar a mi padre y es algo que siempre les agradeceré. Gracias por enseñarme que mi destino está en mis manos. Prometo volver cuando tenga éxito. Se los juro— Rian me suelta para que pueda abrazar a mi amigo y despedirme de este. Algo que me sorprendió fue también el abrazo y la sonrisa que se brindaron mi novio y Gael
—Te extrañaré mucho— me aferro a él dejando mis lágrimas caer.
Minutos después Gael no miró atrás y se marchó en el taxi. Nuevo destino: España.
Estuve triste todo el camino restante y Rian me consolaba como podía.
—¿Cómo voy a decirle esto a mis amigos papi?— mi tono triste no pasó desapercibido
—No es necesario que lo hagas, eso le corresponde a Gael— se estaciona frente a mi casa y toma mi cara entre sus manos haciendo que nos miremos fijamente y me besa
Lo invito a pasar a mi casa, Coco nos da la bienvenida maullando desenfrenadamente
—Coco aléjate de mi— se queja Rian y trata de quitar las garras que se habían impregnado en sus jeans
—No trates mal a Coco— muerdo su mano
—No me trates mal a mi— me atrae a su cuerpo sujetando mi cintura —o te castigo— me pone de espaldas contra la pared
—No estamos en tu casa, recuerda que mis padres están arriba— susurro y vuelve a la realidad
—Te salvas por eso— palmea mi trasero mientras subimos las escaleras
Rian saluda a mis padres que estaban arriba pasando el rato en el balcón, rápidamente sale a flote la conversación de trabajo
—¿Por qué no dejan el trabajo en la empresa?— se queja mi mamá. Yo también quería hacerlo pero no podía, cuestiones de edad.
—Son temas importantes— reclaman y siguen hablando de lo mismo que yo había ignorado hasta que platicaban de un tema que logró interesarme
—Me veo en una situación difícil, una chica que jugaba un papel importante en la empresa está embarazada, dudo encontrar a alguien que haga tan bien el trabajo mientras ella no esté— se queja mi padre
—¿Julieta verdad?— Rian menciona el nombre que tanto detesto oír
—¿Julieta?— ríe mi padre —Julieta no está embarazada— ahí fue cuando decidí prestar atención a la conversación que no era conmigo pero si de mi interés
—Si lo está, de hecho por eso vino al país—
—Rian— Rodrigo vuelve a reír —Julieta no puede estar embarazada, todas las empleadas antes de obtener el puesto deber realizarse una prueba de embarazo— suelta mi padre y Rian me mira sorprendido, por mi parte nada que viniera de Julieta podía sorprenderme
—Con esa mentira me hizo traerla hasta aquí—
•
•
•
•
•
•
• Espero que les guste ☺️ este es el primer capítulo del especial de navidad, los otros los iré subiendo más tarde.•¡NO SE OLVIDEN DE VOTAR Y COMENTAR!
•Pasen feliz noche buena 🥳🎄
ESTÁS LEYENDO
My daddy
Romance❝Los ángeles no conocen el infierno, el infierno implora por los ángeles ❞