—Buenas noches familia— Rian se muestra frente a nosotros con una bandeja en sus manos. Luego de él fueron llegando Allan, Hannah y su familia. Todos con algo en sus manos que aportar para nochebuena en el patio trasero de mi casa. Todos nos veíamos muy elegantes, las chicas llevábamos vestido rojo como habíamos acordado en secreto y los chicos solo traje pero eso los hacía lucir bien de todas formas.
—¿Cuando se pusieron de acuerdo para esto?— Pregunta el padre de Hannah viendo como incluso las gemelas llevaban vestido del color asignado
—Es un secreto— dijo Sofía para marcharse corriendo con las gemelas como si ocultaran algo
—Debimos acordar algo nosotros también— se queja Allan
—¡Familia, es Dereck, reúnanse!— mi mamá se inquieta ante una videollamada entrante de mi hermano, nos reunimos en círculo y saludamos al mismo tiempo a mi hermano
—Quería enseñarles esto— baja la cámara hasta sus brazos donde sujetaba a un bebé vestido de un traje azul, al lado de mi hermano estaba su novia —familia les presento a James, mi hijo— el bebé dormía plácidamente en brazos de mi hermano, era muy tierno aunque me había hecho un poco más vieja. Ahora soy tía.
—Es hermoso, quiero ver a mi nieto— ustedes ya saben cómo es Issa.
Todos estábamos muertos de ternura con James, aún no lograba parecerse a nadie pero si que tenía unos rasgos asiáticos heredados de su madre que se apareció a la llamada e intentaba hablar español como podía para comunicarse con nosotros.
Dereck se marchó a pasar su primera navidad como padre aunque el pequeño James estaba durmiendo y nosotros hicimos lo mismo, esta extensa familia en una extensa mesa repleta de comida preparada por Barbara, Issa, Hannah y yo; o fue lo que mi mejor amiga y yo dijimos cuando en realidad habíamos comprado la comida.
—¿Hay golosinas tía?— se acercan a mi las gemelas ya transpirando de tanto jugar cuando apenas iniciaba la noche
—Por supuesto— responde Rian sonriendo —pero no en este momento, primero a cenar señoritas— parecía su padre, pero yo me volví la esperanza de las niñas y les guiñé un ojo a escondidas de mi novio dispuesta a consentirlas sin que él se enterara. Las niñas se marcharon y nos dejaron a solas.
—Annie necesito hablar contigo, ¿Subimos?— dice serio, su tono me preocupó y no me quedó otra más que aceptar subiendo a mi habitación.
—¿Qué pasa?— digo cerrando la puerta de esta pero él no me deja siquiera terminar de hablar y ataca mis labios con desesperación
—Cuando te conocí— posa su mano sobre la tela del vestido en una de mis piernas —te dije que usaras vestidos más largos— y ataca nuevamente mis labios. Claramente recordaba como nos conocimos y lo que había pasado, creo que fue el momento en que fui más atrevida en mi vida pero no me arrepiento de nada. Ahora tengo a Rian como novio.
—Pensé que te gustaría mi vestido papi, lo siento— sujeto su corbata mirándolo a los ojos ya entristecidos
—Y me encanta— se acerca a mi oído —mucho— me pone de espaldas frente a la puerta y baja el cierre de este. Acaricia mi espalda y sus caricias van bajando mientras siento su respiración en mi oído, gemidos leves salen de mi boca no pudiendo ser contenidos. El vestido cae finalmente al piso, me toma entre sus brazos para acostarme en la cama.
Rian no se despoja de sus prendas por completo, sólo desabrocha su cinturón, dos botones de su camisa y su pantalón a mitad de sus piernas.
Corre la tela de mis bragas a un lado y empieza a jugar con mi intimidad, yo como puedo también hago lo mismo con mis manos.
—Te extraño bebé, te quiero ya mismo— se introduce bruscamente en mi sin previo aviso, me quejé y puso sus manos en mi boca evitando que cualquier sonido pudiera salir de esta y ser escuchados por las personas en casa. —amo tus gemidos amor, pero no estamos en casa así que cierra esa boquita sucia— siguió con sus movimientos hasta que ambos llegamos al climax y nos vestimos rápido antes de que alguien se diera cuenta que no estábamos, era una de las mejores cosas que tiene salir con Rian, la adrenalina en cualquier lugar sin importar qué.
—Chicos acérquense, ya vamos a empezar— nos llama mi padre. Antes de acercarnos completamente limpio la comisura de los labios de mi novio que tenía restos de mi labial
—Justo hoy tenías que usar labial rojo— ríe
Nos sentamos juntos en la mesa, yo estaba situada justo el medio de él y Hannah que ya había empezado a tomar alcohol.
—Mejor retiro esto de aquí— Allan quita el vaso de alcohol a la pelirroja, esta molesta solo rueda sus ojos y se cruza de brazos.
Servimos la cena, no sin antes agradecer e iniciaron los elogios sobre lo buena que estaba la comida que "habíamos hecho" Hannah y yo. Con mi mejor amiga nos reímos sin nadie entender por qué. La cocina no se nos daba mucho, al inicio tratamos de hacerlo por nuestra cuenta y a causa de esto Sofía tiene un mechón de pelo quemado, pudimos sobornarla con algunos caramelos así que nadie se enteró a pesar de que Bárbara cuando la estaba peinando notó la falta de cabello en esa área.
Terminamos de cenar, faltaba poco para navidad. Todos estábamos tomando alcohol a excepción de Hannah porque ya tenemos más que claro lo que pasa cuando Hannah toma alcohol.
—Tu tampoco sabes tomar mucho así que por favor, una sola copa y ya— Rian ordena como si yo fuera parte de las gemelas, o una bebé más. Pero recordé que si lo era por lo que obedecí y sólo tome una copa, aunque sólo con eso el mundo me empezó a dar vueltas, suerte que él estaba ahí para sujetarme cuando daba pasos en falso.
Seguro me veía muy tonta pero el alcohol me decía que me veía fabulosa.
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• Feliz navidad chicas 🥳🎄
•Gracias por todo el apoyo que le brindan a la historia 🥰 no se olviden de votar y comentar. Las amo
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My daddy
Romance❝Los ángeles no conocen el infierno, el infierno implora por los ángeles ❞
