Canción: Ganster/Kehlani.
Personaje:Liquir,pero mi visión de él.La ciudad era un modelo para el mundo. Todo allí funcionaba con la precisión de un Patek Philippe, reloj que llevaba en su muñeca, escondida bajo el puño de esa impecable camisa que se asomaba bajo la manga de su chaqueta color grafito. Liquir era su nombre y su imagen estaba por toda la ciudad.No sólo en los afiches que recordaban las reglas a seguir, también en la publicidad y revistas que lo ponían como la personificación de la elegancia y éxito.
Como alcalde llevó a esa pequeña capital regional,a la cúspide del progreso erradicando el crimen,el desempleo,la contaminación y cualquir cosa que fomentara los vicios en sus pobladores. Todo en esa burbuja que construyo,tenia que ser perfecto,nada podía estar fuera de lugar y Liquir podía volverse un maníaco del orden y la perfección, llegando a ordenar el despido de una recepcionista por tartamudear o no saber la hora exacta.
Pero en pos de este orden inmaculado,permitía algunas cosas muy por debajo de la superficie. Cuando la ciudad dormía y las calles estaban vacías,él también descendía a las cloacas de la ciudad. A los lugares marcados como mecas de los bajos instintos,donde la decadencia estaba permitida con la única condición de que nada que allí ocurriera transcendiera a la superficie.
El sonido de sus pasos advertía al portero de su llegada,por lo que se apresuro en abrir la puerta para dejarle entrar a él y a ese hombre alto que le hacia de asistente. Ambos bajaron por la escalera que conducía al salón del espectáculo. Allá abajo aguardaba el deshago a su propia postura,en forma de un juego en el que competía con algunos empresarios exitosos.
Tomaban algunos individuos miserables. Gente desempleada,
enferma o fracasada y la hacían pasar por varias pruebas en las que tenían que sortear toda clase de obstáculos,a cambio de una recompensa monetaria. Por ejemplo podían pedirles que se rompieran un brazo por diez millones o que se arrancarán un ojo por veinticinco millones.-No deberían horrorizarse,sino agradecer la oportunidad que se les brinda-decia Liquir,cuando una persona de esas le cuestionaba ese juego-Alla arriba,una persona normal con una familia y un empleo promedio,tarda años en conseguir ahorra una suma como esa. Ustedes pueden conseguirla en unos pocos minutos...
-No hace falta que seas tan cruel-le solía decir una mujer de vestido rojo y cabello negro-Tienes que darle alguna esperanza.
-¿Esperanza? Feliz exterminaría a todas estas lacras-le respondía Liquir mientras ella se sentaba en sus piernas-Existir es algo que debe hacerse de una forma fructífera y equilibrada. A la luz se debe dejar siempre lo mejor y más bello;el resto tiene que estar en las sombras.
-¿No te parece peligroso dictaminar eso?
-No es un dictamen,es el orden natural de las cosas-le respondió Liquir, después de saborear el cuello de la mujer-¿Has conocido a alguien que se comporte de forma opuesta a esto? Yo no. La perfección radica en tener cada cosa en su lugar.El lugar de los deseos que transtornan,de las ambiciones profanas y todo eso que la gente esconde,es aquí.En las sombras y tú lo sabes muy bien.
Se levantó cargando a la mujer que se sonreía,pensando que irían a otro lugar,pero termino siendo arrojada a la arena,con los otros jugadores.
-Un millón por cada uña que te arranques y quince si te cortas la lengua-le dijo Liquir antes de darle la espalda.