⚡24. Sabado ⚡

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El sol había salido más temprano que de costumbre y el ambiente cálido parecía que la primavera estaba comenzando, el cielo sin nubes brillaba sobre mi cabeza y el aire fresco me hacía cosquillas en la punta de la nariz. Había preparado una pequeña mochila con estambres y dulces para llevarle de contrabando a mi madre, estaba mordisqueando la punta de mis dedos debido al nerviosismo, no sabía como pudiera reaccionar Kaminari, constantemente miraba la pantalla de mi celular en busca de una señal de vida de su parte, el horario de visitas iniciaría pronto.

Volvi a llamarlo unas cuantas veces más pero de nuevo no hubo respuesta.

—Hey ______ ¿a donde vas tan temprano?— pregunto Sero en cuanto entro al recibidor.

Alce mi vista hacia el quien me miraba con una sonrisa un tanto cansada debido a la fiesta de anoche, sus ojeras estaban marcadas y su cabello revuelto indicando que llevaba solo unos minutos fuera de la cama.

—Denki y yo teníamos una cita pero no tengo idea de dónde se ha metido.

En ese momento entro Shinso junto con Kirishima que a decir verdad el pelirrojo parecía que aún tenía algo de alcohol en su cuerpo, camino despacio hasta sentarse frente a la barra y esconder la cara entre sus brazos, Sero quien parecía divertido por su amigo dejó caer un vaso sobre la barra provocando un sonido hueco. Kirishima parecía que se le iría encima y Sero no dudo en echarse a correr riendo a carcajadas.

—Buenos días, Liebling— dijo Bakugo sentándose a mi lado antes de darle un mordisco a su manzana.

Me giré hacia el frunciendo el ceño ante su extraño apodo y su inusual actitud, no había llegado tratando de matar a alguien o gritando por que se habían comido parte de su comida.

—¿Que rayos es liebling?— pregunte divertida.

—Significa basura— me respondió sonriendo orgulloso. —Es alemán ¿te gusta?

Infle mis mejillas para evitar reír, algo que termino siendo totalmente en vano ya que su sonrisa me había contagiado. Había despertado de tan buen humor que no había nada que pudiera molestarme, ni siquiera el hecho de que Kaminari no me respondiera el teléfono, ni los mensajes.

—¡_______! ¡Te buscan en la puerta!— el grito de Mina resono por todo el lugar.

Extrañada, me levanté de mi asiento y camine hacia la puerta con curiosidad, no tenía nadie que me pudiera buscar y si hubiera sido Norman, Mina hubiera tratado de echarlo sin que yo lo supiera. Al llegar junto a Mina ella estaba sonriendo y mirándome con picardía, dio un paso hacia un lado dejándome el camino libre para encontrarme a un chico rubio parado frente a mi, su mirada estaba llena de aburrimiento y parecía querer irse lo más rápido posible.

—¿Me buscabas?— dije cruzandome de brazos.

—Me pidieron que te entregara esto— dijo entregandome otro tulipán de color negro junto con una tarjeta. —Tu admirador es muy molesto.

En cuanto termino de hablar giro sobre sus talones y comenzó a caminar a dirección contraria de nuestro edificio, ¿había dicho que mi admirador era muy molesto? Eso significaba que el lo conocía y podría decirme quién es, y así podría darle las gracias por las flores.

—¡Espera!— dije en cuanto lo alcance. —¿Tu sabes quién me manda las flores?

—Las flores llegan de otra persona— dijo simplemente. —Es una cadena, así que puedes ir preguntando de persona en persona si quieres saber quién es o esperar a que se presente ante ti. Adiós.

¿Porque alguien haría tanto esfuerzo para solo entregar una flor?

El olor a lluvia invadió mi nariz haciendo levantar mi vista al cielo: el sol había desaparecido sustituyendolop por nubes grises y corrientes frías de aire indicando que  lloveria en cualquier momento. Antes de entrar a la residencia volví a intentar contactar a Kaminari y esta vez saltó directamente a buzón,  frunci mis labios en una mueca de disgusto.

El Miedo De Escogerte (Denki Y Tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora