El Miedo De Escogerte (Denki Y Tu)

⚡8. Tigre⚡

Los rayos de son entraban por mi ventana molestandome, el dolor de cabeza era horrible acompañado de nauseas y de unas tremendas ganas de tomar agua. Solté un gruñido y me dispuse a bajar a desayunar o solo irme a morir a otro lugar, al salir de mi habitación mi pie chocó contra algo, más bien contra alguien que estaba tirado en pasillo. Kaminari.

Hice una mueca cuando murmuró algo, seguí mi camino dejándolo en su sitio, el era prueba de que la fiesta había superado los límites de todos. Apenas entre al elevador sentí que la musiquita de este podría reventar mis tímpanos, sería un viaje largo.

Cerré mis ojos un momento para calmar las náuseas pero en su lugar un recuerdo inundó mi mente. El beso de Kaminari y mío. Abri mis ojos de golpe ante el recuerdo, tal vez por eso estaba fuera de mi habitación, pero también puede haber muchas más explicaciones, tal vez solo era una jugada del alcohol, mi subconsciente me estaba haciendo una mala jugada.

-Si, eso debe ser- dije para después salir a la cocina a tomar un poco de agua.

Los que estaban presentes tenían un aspecto igual al mío o peor, camine en silencio hasta la cocina encontrándome a Tsuyu.

-Te ves horrible- dijo dándome un vaso lleno de agua.

-Y me siento horrible, mi cabeza explotará en cualquier momento- hable llevándome el vaso a los labios. Sentir el agua recorrer mi garganta me dio mil años de vida.

Sero y Kirishima se unieron a nosotras, sentándose justo enfrente nuestro, el pelirrojo dejó reposar su cabeza sobre la barra de la cocina, los cuatro solo estábamos existiendo, y después de un rato a nosotros se unió Todoroki y Midoriya junto con Jiro, cuando la vi recordé como ayer al parecer se le había confesado a Kaminari. Sacudi un poco mi cabeza, eso a mi no me importaba.

-Cuanto silencio, parece un funeral- el rubio hablo muy apenas uniéndose a nuestro círculo de silencio.

Jiro y yo levantamos la mirada hacia Kaminari que tenía que admitir se veía adorable en ese aspecto, el observó un momento a Jiro y le sonrió, puse los ojos en blanco y volví mi vista hacia mi vaso sintiendo mis mejillas calientes. Midoriya se ofreció a hacer el desayuno para todos cosa que yo rechacé ya que mi cuerpo parecía que no toleraría comida. Regrese a mi habitación, me coloqué ropa cómoda y volví a bajar para salir a dar un paseo.

-¡Hey! ______ ¿a donde vas?- Kaminari hablo alto provocando el quejido de algunos de los presentes.

-Iré a hacer unas compras- si no lo miraba no me sonrojaria, me lo repetí varias veces pero fue en vano, mis ojos viajaron hasta sus iris amarillos y un pequeño escalofrío recorrió mi espalda.

-Voy contigo, también tengo que hacer algunas cosas.

Mierda. Asenti levemente dejando que se pusiera a mi lado para emprender el camino.

El sol no ayudaba para nada a la resaca y los nervios de tener a Kaminari que lado no era muy favorable, ambos caminábamos en silencio, moría por saber si el recordaba algo de lo sucedido anoche, pero tampoco quería preguntar, ¿que tal si no recordaba nada? Quedaría como una estupida. Definitivamente todo era obra de mi mente, tenía que ser así.

-Me diverti mucho anoche- Kaminari rompió el silencio.

Solté una risa nerviosa y aclaré mi garganta.

-Si, yo igual, aunque no recuerdo mucho- mentí. -Fue muy gracioso ver a Uraraka confesarse ante Midoriya, y el sonrojo de Momo por culpa de Todoroki, aunque puedo apostar que la mitad de ellos no recuerdan mucho- dije entre risas al recordad como Midoriya salió corriendo.

El rubio asintió pensativo.

-Que suerte tuvieron ellos- dijo simplemente guardando sus manos en los bolsillos de su pantalón.