𝔹𝕖́𝕤𝕒𝕞𝕖 "𝐋𝐚 𝐂𝐞𝐧𝐢𝐜𝐢𝐞𝐧𝐭𝐚"

Capitulo 44

Mi respiración se entrecortaba por el llanto y mi dolor no me permitía parar, me sentía tan triste y defraudada no quería saber nada de ella si quiera podía verla a la cara, tuvo tantas oportunidades para decirme la verdad, pero prefirió el silenció, el silenció que se transformo en una mentira que cada día me iba carcomiendo tratando de hallare una respuesta razonable.
Luego de unos minutos Jughead llego a mi, y sin decir absolutamente nada solo me rodeo por la cintura, coloco su cabeza sobre la mía y me abrazo fuertemente mientras que yo agradecía por tenerlo a mi lada, ya que sin el no supiera como estaría en estos momentos.

-Ahora si me dirás que sucede- me miro fijamente después de haber pasado algunos minutos.

-Es sobre- tartamudee- es sobre mi madre- solté y pequeñas lagrimas comenzaron a brotar de mis ojos

-¿Sobre tu madre?- preguntó incrédulo- ¿A caso sabes quien es?- me miro con confusión

-Siento que esto es demasiado para mi- moví mi cabeza a varios lados- Mi verdadera Madre es Alice

-¿Alice?- se admiro- Si...- respondí

-Betts...- me miro con ternura y me abrazo nuevamente

-¿Por que lo hizo?- decía sin parar de llorar pues mi sufrimiento y dolor no paraba- Siempre la necesite y ahora que sentía que mi vida estaba comenzando a mejorar tenía que pasar esto- me lamente y baje mi cabeza

-Hey- la tomó con dulzura- Se que esto es duro para ti, se lo que se siente perder a tu madre y también se lo que es estar en un ambiente agresivo, aunque no lo creas mi padre era el diablo en persona, al morir mi madre entro en una profunda depresión y se volvió bastante agresivo- Siempre me golpeaba y maltrataba cuando veía la ocasión- su voz se entrecorto- Pero luego el se dio cuenta de su error y yo lo perdone- Tal vez Alice este arrepentida también- Además ella es una gran persona, yo la considero mucho mas que una simple empleada de servicio para mi ella es como mi madre.

-No lo se

-¿Ya le preguntaste por que lo hizo?- arqueo una ceja

-No...

-Que tal si lo haces, no pierdes nada con intentarlo

-Tengo miedo

-Yo estaré allí para lo que necesites- Yo seré tu ángel guardián en tiempos oscuros- me miro con amor reflejado en su mirada

Seguí el consejo de Jughead y camine hasta la habitación de Alice en la cual estaba ella llorando aun con la fotografía en sus manos.

-Quiero que me cuentes la verdad- dije fría y me senté a su lado  

-En primer lugar quiero decirte que lo lamento mucho, siempre te quise y ame con toda mi vida, y espero que algún día me perdones- coloco sus manos sobre las mías pero yo las aparte rápidamente y trataba de mantenerme firme mientras que por dentro quería soltar en llanto- Yo conocí a tu padre gracias a la banda en la que estaba, nos enamoramos o bueno eso creía yo, mientras que estábamos juntos el solía con otras mujeres pero yo nunca lo supe, hasta el día que resulte embarazada de ti, al decírselo se puso histérico y comenzó a golpearle sin importarle que llevaba en mi vientre a su hija, y  repetía una y otra vez que lo había engañado y que ese hijo no era suyo- derramaba lagrimas sin cesar- Ese día salí de su casa echa un mar de lagrimas y al siguiente llego como si nada a donde vivía, me trajo rosas y prometió que todo iba a cambiar- Me trague esa vil mentira- movió su cabeza con disgusto- Ambos éramos tan solo unos adolecentes inexpertos, yo tenia 18 y el acababa de cumplir 19, nos mudamos  casa de sus padres pero con el paso de los días el se volvió alcohólico y sus padres ya no le querían mas allí, por lo que tuvimos que irnos, yo reciente tenia seis meses de embarazó y necesitaba un lugar en el cual estar tranquila, uno de sus amigos le consiguió un pequeño tráiler y fuimos a vivir allí- Los meses pasaban y la situación solo empeoraba, pero aun así yo trataba de mantenerme tranquila- El día en el que naciste fue el mas feliz de mi vida, y creo que el primer en meses- soltó una leve risita- pero a la vez fue triste tu padre no se presento en tu nacimiento si no hubiese sido porque su madre le aviso el no se hubiese enterado de nada- A pesar de todo yo lo amaba, y pensaba que con tu llegada todo iba a cambiar, pero me equivoqué...- Ms bien se volvió mas agresivo, me golpeaba y me hacia la vida imposible, pero cada vez que quería escapar, te miraba y sentía que no podía dejarte, eras lo único que tenia y debía cuidarte con mi vida- Y eso hice, te cuide hasta que 

-Hasta  que me abandonaste- la interrumpí antes de que pudiera volver a hablar

-Yo nunca te abandone- me miro con dolor- Justo el día en el que cumpliste tres añitos, me golpeo, me golpeo como nunca lo había hecho antes y me amenazo con hacerte lo mismo si no me marchaba- Con todo el dolor de mi alma tome las pocas cosas que tenia y m fui de allí, quise buscarte pero el me tenia mas vigilada que un halcón, por lo que decidí mudarme y así fue como fui a dar con los Jones, llegue a una enorme casa en la que necesitaban empleada de servicio, pero para mi sorpresa ya no me necesitaban pues ya estaban ocupados los puestos, pero Gladis la esposa del Sr Jones se compadeció de mi y me dijo que podía trabajar como niñera de su pequeño hijo- Me dieron una pequeña habitación en la casa y comencé a cuidar a Jughead como si fuera mi hijo, pues para mi era una forma de sanar mi dolor al no tenerte a mi lado- Gladis se convertí en esa amiga que nunca había tenido, y luego de varios años le conté todo sobre ti y sobre mi historia, se puso triste al oír todo lo que había pasado así que me dio algo de dinero para que viajara de vuelta a Riverdale, te recuperara y te trajera a vivir nuevamente conmigo- Pero al llegar me partió el corazón al ver que ya no había nadie allí, llore como una loca al enterarme que tu padre te había vendido como si fueses un objeto, me quede allí a buscarte algunas semanas, pero al regresar nuevamente a la ciudad, me entere de la lamentable noticia de que Gladis había muerto- Para mi tanto como para Jughead y Fp fue un golpe demasiado duro, mi plan era despedirme de ellos y volver para buscarte, pero no los podía dejar solos, al menos no aun. Después los años pasaron y mis esperanzas de encontrarte pasaron con ellos. La pequeña Jellebean ya tenia 10 años y me alegraba a ver visto a Jughead convertirse en todo un hombre, mi relación con el era tan mutua que al mudarse a esta casa decidió que yo fuera con el y así lo hice- sin pensar que aquí te encontraría- acaricio mis mejillas.

Todo era una mescla de emociones para mi, no sabia que decir y me cabeza daba vueltas, me sentí compadecida con Alice, y me corazón se destrozaba al escuchar todo lo que había pasado por mi, estaba mareada por el asombro y quería soltar en llanto ahí mismo y abrazarla, pero mis emociones y mi orgullo no me lo permitieron, no sabia por que pero algo en mi aun no permitía perdonarla, al menos no aun la mire con tristeza, dolor  compasión con lagrimas en mis ojos, para luego salir de allí corriendo de vuelta a mi habitación en la cual me acurruque en los brazos de Jughead, cerré mis ojos y caí en un profundo sueño.