Capítulo 16: Dos hombres y un destino.

55 5 5
                                    

POV Louis

Esas navidades les tocaba pasar la Navidad en casa de sus abuelos por parte de padre. Siempre le había fascinado pasar tiempo en familia con sus primos pero este año era diferente. James y él compartían su amor por Diana. Verdaderamente él no quería enamorarse de la española pero  habían pasado tanto tiempo juntos que era imposible no sentir cariño por ella. Allí estaban todos los Weasley La Madriguera con los jerséis de la abuela pasando la mañana juntos. Molly se acercó al joven y le sonrió.

- Louis, mi niño... - Lo abrazó su abuela. - Esta mañana le he enviado a tu amiga Diana un jersey de los míos. Espero que no te moleste.

- Son novios, abuela. - Dijo James entrando en la cocina.

- ¿Novios? - Preguntó extrañada. - Pero si me dijo tu padre que estaba saliendo contigo, James.

- Así es, abuela. - Afirmó James. - Pero lo dejamos hace más de un mes.

- No olvides omitir la parte en la que la traicionaste con Lizzie y luego el resto de primos la ignorásteis por completo. - Dijo Louis. - O mejor cuenta como ligas con otras chicas delante de ella sabiendo que le estás haciendo daño o que se declaró de ti delante de todo el colegio y la ignoraste.

- Ven aquí, rubito, te vas a enterar. - Amenzó James.

Louis levantó el mentón y lo dirigió hacia fuera de la casa.  Parecían dos animales en celo luchando por una misma presa. Se respiraba masculidad tóxica como desde hace un tiempo pasaba desde que se juntaban. James cogió su varita y la tiró al suelo. Su primo hizo lo mismo. Esto iba a ser una pelea a la antigua usanza. El moreno le dio un puñetazo que no supo esquivar y él se lo dio de vuelta. De repente todos los primos aparecieron. Teddy cogió a Louis y Fred a James.

- ¿Pero que hacéis? La abuela está dentro llorando. - Chilló Lily. -  ¡Sois idiotas!

- Victorie y Dominique estan intentando frenar a vuestros padres. - Dijo Rose.

- Todo es culpa de James ¿Por qué todos le permitís que sea un capullo? - Louis estaba enfadado.

- ¿Por qué te lo permiten a ti? - Se rio James. - Fred, sueltame. 

Los padres de James y Bill salieron muy enfadados. Teddy y Fred soltaron a sus primos. La tensión se respiraba en el ambiente. Incluso Fleur había sacado su lado veela y su cabeza estaba empezando a transformarse. Harry los miró detalladamente y se calmó. Nadie se movía.

- Alguien puede iluminarme y decirme por qué os estáis peleando. - Dijo Harry.

- Tu hijo es un capullo. - Respondió Louis.

- Y tu un santo ¿no? - Dijo James.

- ¡BASTA! - Gritaron Ginny y Bill.

- Yo os explicaré. - Dijo Albus quien salía de la casa. - Louis ha estado cuidando de Diana porque, desde que James la engañó con Lizzie, todos la hemos ignorado. Además, James ha estado saliendo cada pocos días con una chica diferente y se hacia el chulo delante de Diana sabiendo que ella estaba pasándolo mal por ello.

- Eso no es así... - Dijo James.

- Calla.  - Dijo Albus. - Diana ganó el concurso de poesía y lo tuvo que leer delante de todo el colegio el cual era una declaración de amor donde decía que aunque la hubiese traicionado no podía odiarle. Lo que es una pena porque su vida sería más sencilla si pasara de James y se fuera con él.

Todos se quedaron sorprendidos ante el discurso de Albus quien entró dentro de la casa. James miró a Louis arrepentido. Quizás viéndolo así en plano, sonaba mucho peor. El rubio estaba a punto de llorar porque sabía que su primo tenía razón. Si Diana seguía amando a su primo, jamás lo amaría él. James lo abrazó. Sintió como ese abrazo era una disculpa por su parte. Todos aplaudieron. Suponía que la magia de la Navidad era esa. Entraron dentro la casa y vieron a su abuela con la mirada perdida hacia la ventana. Sostenía un cuadro con la cara de su tio Fred. Para su abuela la familia lo era todo y verlos discutir le había provocado un dolor terrible. Louis y James la abrazaron y le pidieron perdón. Ella sonrió y los besó.  De repente, un ruido los asustó. Todos salieron y lo vieron. El tio Charlie había llegado pero esta vez acompañado de una mujer. Noa. La habíamos visto alguna vez en fotos. Tenía el pelo liso y castaño y los ojos marrones. Era más baja Charlie a pesar de que sus deportivas tenían plataforma. Louis se rio al pensar que era alguien real y no photoshop.

- ¿Quién quiere escuchar a su tio hablar durante horas sobre dragones? - Dijo Charlie riéndose.

- Charlie, me encantan los dragones, pero gustaría descansar por un día del trabajo. - Dijo Noa. -  ¡Hola! Soy Noa- Miró al resto de la familia y se puso roja.

- ¡Eres real! - Exclamó Ginny.

Todos se rieron y fueron a abrazar a la chica quien se puso aún más roja. Era el centro de atención. Jamás Charlie había traído a nadie a La Madriguera. Que hubiesen encontrado pareja era una auténtica novedad. Tenían ganas de hacerle muchísimas preguntas.

- Noa ¿Eres la novia del tio Charlie? - Dijo.

- Bueno... sí... - Dijo Noa.

- Podrías contarnos cosas de ti. - Dijo Rose.

Noa contó que nació en Bulgaria aunque sus padres eran españoles. Asistió a Durmstrang y que hizo un año de intercambio en Ilvermorny. Al acabar estuvo especializándose en criaturas mágicas por diferentes partes del mundo hasta hace un año decidió volver a Bulgaria para estudiar dragones donde conoció a Charlie. Todos bromeaban con que pensaban que ella era producto de la imaginación de su tío porque les resultaba imposible que tuviese novia.

El resto del día transcurrió con  normalidad. Todos estaban contentos y todas aquellas anécdotas de la familia que habían contado tantas veces se volvieron a contar con muchísima alegría. George no paraba de bromear con Bill y Percy sobre Charlie. Ginny recordó cuando en su despedida fueron a una discoteca muggle y bailó sobre la barra. Anécdota que a Ron no le hizo mucha gracia. Andrómeda Tonks contó como pilló a su nieto Teddy escribirle una carta de amor a Victorie. Los niños no podían parar de reírse con las anécdotas de sus padres. El teléfono sonó y Harry lo cogió. Cuando la palabra Malfoy salió de él se hizo el silencio.

-  ¿Que Nick te ha contado qué? - Dijo Harry. - Claro. Ves a ver qué traman. Sí, claro. Estarán aburriéndose con tanto adulto estirado. Genial, nos encantaría. Ron, tú, dos copas de whisky y ya seréis amigos. Os esperamos. Un abrazo.

Harry se volvió y se vio a toda su familia espectante. El hombre sonrió ampliamente.

- Diana Rodríguez, Nick Goyle y Scorpius y Draco Malfoy están de camino.


Howgarts patas arribaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora