Capítulo 25
Luego de unas horas todo está limpio, he limpiado toda la casa yo sola. Claro, con la ayuda de Jacob trayendo agua en dos baldes. La casa solo tiene dos habitaciones y un baño.
Termino de acomodar la pequeña cama, no es de un cuerpo; pero tampoco es de dos. O tal vez si es de dos, solo que yo nunca había visto una cama así, siempre me acostumbré a lo más caro y a lo más grande. Jacob trajo una cama, un colchón inflable y tres mesas (Que una la coloqué en la sala, la otra en la cocina y otra en la habitación) También trajo algunas sillas.
Termino de arreglar la poca ropa que trajo Jacob de los dos en un pequeño clóset que hay en la habitación principal. Tampoco es muy grande, pero tendré que acostumbrarme.
Bajo las escaleras para buscarlo, pero Jacob no está por ningún lado y ya está oscureciendo, me estoy preocupando.
Voy fuera y siento gotas de lluvia caer sobre mi cabeza y hombros. Llamo a Jacob dos veces pero no me contesta, los sonidos de los grillos y el del río son los únicos que se escuchan.
- Entra - pego un brinco cuando siento la voz de Jacob detrás de mi.
- ¿Donde estabas? - me ignora y empiezo a caminar, hago una mueca cuando siento que una piedra me lastima el pie.
Camino dentro de la casa y me siento en el suelo, estoy cansada. Creo que es el día más intenso que he tenido en mi vida, y créanme, he tenido muchos. Jacob entra con una caja grande.
- Estas son algunas cosas para la cocina, hay algunos platos, vasos y ollas. No son muchas.
Dos horas después está completamente oscuro, solo hay algunas velas prendidas y llueve a cántaros. Cada vez la tormenta es más fuerte al igual que el sonido de los truenos. Jacob se bañó (Si es que se le puede llamar así), en el río y trajo un poco de agua para que yo me bañara.
Estoy esperando que el termine de cambiarse para que me acompañe al baño. Ni loca voy al baño yo sola.
- ¿No te vas a bañar? - me pregunta mientras se seca el cabello con una toalla.
- Si, te estoy esperando - murmuro lento mordiéndome el labio.
- ¿Para qué? Ya yo me bañé - frunce el ceño.
- Lo sé - giro los ojos - solo es para que me acompañes. Me da miedo.
- ¿A qué le tienes miedo? - dice mirándome a los ojos.
- No lo sé, a la oscuridad o tal vez a alguna cosa que me aparezca en el cuarto de baño, que se yo.
Jacob pone los ojos en blanco y se mueve hacia la cama para agarrar la camisa y ponérsela luego.
- Aquí no sale nada de eso. Vete a bañar ya.
- ¡Ay por favor! Solo tienes que esperarme fuera del baño y listo. Solo van a hacer algunos minutos, no me voy a demorar mucho. Por favor - le suplico.
- ¿Es enserio? Estas haciendo todo un show porque no te acompaño. Taylor, mientras estas discutiendo aquí conmigo, porque mejor no te vas a bañar. Ya son pasadas las 6 de la tarde y te va a dar algún tipo de resfriado si te bañas más en la noche - gruñe.
Pongo los brazos en jarra y trato de no hacer puchero ni mucho menos de llorar. Pero es inútil, las lágrimas se me resbalan por las mejillas sin mi autorización.
Los hombros se me hunden y gimoteo. ¿Por qué todo tienen que ser tan difícil entre nosotros dos? Nunca podemos estar bien del todo.
- ¿Estas llorando? - pregunta estupefacto.
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Menor que Yo (En Edicion)
Teen FictionJacob: un chico posesivo, lindo, niño de mami, egocéntrico, virginal... Espera un momento ¿Virginal? ¿Es una broma? Bueno, no muy virginal. Iqhscsyqvqlodhwjwhuq seguimos: lindo, muy lindo. Le gustan las cosas a su manera, no le gusta que lo contradi...