45

96 8 15
                                    

Largos minutos habían pasado, o quizá más, Harry desde que había atendido la llamada había perdido la noción del tiempo. Estaba sentado en su escritorio con su computadora abierta y mirando a la pantalla brillante causando molestias en sus ojos sin ni siquiera darse cuenta.

No sabía cuánto tiempo llevaba sin cortar la llamada, pues estaba tan enfocado en lo que hacía que casi no notó la silueta de Louis en la puerta.

Él lo miraba impresionado de no haber sido visto, pues rara vez sucedía. Tras largos segundos y sin ninguna mirada posada en él, Louis comenzó a acercarse, y ahí fue cuando Harry lo vio de reojo y giró su mirada inmediatamente hacia él.

Apagó la llamada antes de poder despedirse de su amigo y cerró el portátil de una manera que sorprendió al menor.

—Lou, mi amor no te vi, lo siento, ¿llevabas mucho tiempo ahí?—se acercó y besó su frente sujetando sus dos mejillas para contemplarlo.—¿Por qué despertaste? ¿Tienes hambre?

Louis sin responder ninguna de las preguntas, miró a su portátil recién cerrado y giró su mirada a él.—¿Qué hacías?

—¿Qué? Nada, ¿por qué?

—¿Con quién hablabas?

—Liam, tenía que contarme algo y.. y aproveché que dormías para después poder estar contigo.

Louis se alejó de sus caricias.—¿Por qué tuviste que cerrar todo así tan rápido? ¿Hay algo que no quieres que vea?

—No, no, ¿Por qué lo preguntas? ¿Qué iba a tener, además? ¿Quién dijo que tengo algo? Yo no fui.

Louis suspiró y asintió.—No importa.—salió de la habitación, Harry enseguida lo persiguió y sujetó su mano.—¿Qué sucede, bebé? No tengo nada, te lo digo enserio.

—Hazz, cariño, no tienes por qué mentir.

—Louis yo no-

—Enserio no tienes por qué hacerlo. Yo no soy nadie para evitar que tengas tu privacidad, no me meteré en tus asuntos si no quieres que lo haga. Simplemente me gustaría que me dijeras las cosas claras. Escondes algo, lo sé y lo sabes, te conozco lo suficiente como para notar tus nervios. Así que dime..—amarró sus brazos.—Sinceramente.—Harry tragó saliva.—¿Tiene que ver conmigo?

Harry rascó su nuca.—No, no. Estaba simplemente borrando unos archivos que ya no voy a necesitar.

—¿Ah sí? ¿Como qué?

—Las... neuronas cerebrales de los pacientes que están en coma.

—¿Sí? ¿Hay un apartado para eso?

—Eh.. sí.—forzó una sonrisa.—Es em.. es interesante, aunque muy complicado porque tienes que em.. tienes.. en fin.—bajó su mirada.—Había pensado en preparar algo calentito para poder tomar, ¿quieres?

Louis suspiró y se acercó. Abrazó su cintura.—¿Por qué no me cuentas ese apartado?

Harry lo miró y acarició su mejilla.—Es un poco aburrido Lou, no quiero que te canses de escucharme.

—Insisto.

Harry miró a otra parte.—Esto.. es... es que no me acuerdo.

—Hm..—acarició su espalda baja.—¿Y si cuando eres mayor viene un paciente con ese problema? ¿Qué le dirás a la familia? "Lo siento, borré el archivo porque creí que no lo necesitaba, que descanse en paz"

—Lou no digas eso.

—¿Quieres decirme qué realmente hacías entonces?

Harry lo miró y suspiró. Sentía cómo el ojiazul podía leer todos sus pensamientos, como si fuese una bola de cristal a la que se le veía el contenido. Era patético.

Beachwood Café (Larry Stylinson)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora