— No pierdas la esperanza mi niña —le consolaba Maz, acariciándole el hombro. Se habían sentado en una de las mesas del café, aprovechando que no había gente y Rey le estaba haciendo saber sus temores a la vieja amiga de su padre.
— Soy un fracaso. Ni siquiera he empezado a buscar trabajo. El agente Dameron me ha dicho que tiene que entrevistarse con el tío de Ben que desgraciadamente no se encuentra en la ciudad. Encima, mi padre está lejos grabando su película y no sé si lo vea para año nuevo como habíamos quedado... y bueno, me siento un poco triste.
— Debes confiar, Rey.
La jovencita estaba suspirando por el pesar de su corazón cuando entró una llamada a su teléfono. No reconoció el número, pero suponía de quién se trataba.
— ¿Y cómo fue todo, pelirrojo?
— Todo salió muy bien, mejor de lo que esperaba, tenías razón, estaba pensando cosas que no eran —Rey notaba a Hux muy animado del otro lado de la línea.
— ¿Ves? Te lo dije.
— Rey, Rose encontró a mi madre.
— ¿Qué? ¿De verdad? ¡Armitage! ¡Me da muchísimo gusto! ¿Cómo te sientes? ¿Cómo es ella?
— Decir que estoy feliz se queda corto y ella, es maravillosa.
— Eso me da esperanzas, sé que encontraré a mis padres pronto, lo sé. También me encantaría conocer a tu mamá, si es posible.
— De hecho, para eso te nueva imagen del local, está buscando llegar a más clientes, creemos que un cambio de ese tipo ayudaría mucho ¿Cuándo podrías venir?
— Oh dios mío... ¿quieren contratarme? Yo encantada, mañana mismo puedo ir —respondió contenta. llamaba. Mi madre es dueña de una repostería y nos encantaría que te encargaras de diseñar la
— De acuerdo, te enviaré la ubicación al chat. Nos vemos mañana —se despidió el escritor y colgó.
Rey ensanchaba una sonrisa de oreja a oreja.
— ¿Buenas noticias? —le preguntó Maz ajustándose sus enormes lentes en el puente de la pequeña nariz. Rey asintió.
— Creo que después de todo, las cosas comienzan a tomar rumbo.
*
— ¿Me llamabas, Jefa Holdo?
— Si, Rose, por favor siéntate —le indicó la alta y delgada directora.
— ¿Pasa algo?
— Pasa que, quisiera felicitarte por haber hecho realidad la "Operación reunión de Navidad" y que hoy 22 de diciembre, ese joven realmente esté con su madre.
— Muchas gracias, jefa. Acepto sus felicitaciones, pero la verdad creo que fue más suerte que otra cosa. Encontré a Mara por mera casualidad y de ahí todo se desencadenó —Holdo negó con la cabeza.
— A mí me pareció que trabajaste arduo. Estoy de acuerdo, quizás hubiera sido coincidencia que la encontraras, pero tuviste la capacidad de darte cuenta que era ella, porque recordabas la foto del expediente y al hijo. Así que mis felicitaciones para ti, agente Tico. Le has dado a dos personas un regalo de Navidad adelantado que jamás olvidarán. Sigue trabajando así, eres un gran elemento.
— Gracias, jefa, de verdad. Yo también estoy muy contenta por ellos.
— Y dime ¿pasarás las navidades con el chico y su madre?
— ¿Qué? ¿Por qué dices eso?
— Bueno, no sé, a lo mejor los he visto de la mano por la ciudad y supuse cosas, pero tu desmiéntelo.
— Holdo, te juro que no quise involucrarme sentimentalmente, lo intenté y...
— No te estoy regalando, eso no es asunto mío y el caso ha quedado resuelto, relájate cinco minutos y contéstame.
— No, bueno... no creo que eso suceda. Ellos tienen mucho de qué hablar no creo que yo deba entrometerme. Mis planes son quedarme en casa, ver una película y dormirme temprano.
— De acuerdo, pero si te sientes animada y no quieres pasarla sola, estás invitada a mi cena de navidad.
— Oh, eres muy amable, gracias.
Rose no pudo evitar sentirse feliz y triste a la vez porque, aunque estaba con el pelirrojo escritor, sabía que él y su madre iban a querer privacidad, puesto que necesitaban tener tiempo a solas como madre e hijo y ella no quería entrometerse en algo tan importante.
No tenía nada de malo pasar la Navidad en casa, sola, recordando a sus padres y su hermana. Después de todo ya estaba acostumbrada.
*
La cara de Rey se iluminó cuando Ben apareció en la puerta de la cafetería de Maz con un ramo de rosas. Corrió a abrazarlo y besarlo con emoción colgándose de su cuello.
— Hola, guapo —le saludó enérgica. Él lo notó enseguida.
— Estás muy animada ¿algún avance por parte del agente Dameron?
— No, es otra cosa. ¿Recuerdas a Armitage Hux?
— Arg... —soltó irritado—, por supuesto, aquel escritor que tanto te gusta a ti y a mi madre y que es una persona nefasta...
— Ben, es mi amigo, no hables así de él, además no lo conoces —Ben volteó los ojos sin esconder su molestia, el pelirrojo hacía que le saltaran los celos de inmediato—. Me habló hoy temprano para decirme que encontró a su mamá ¿puedes creerlo?
— Vaya... ¿solo por eso te marcó?
— Es maravilloso, estoy muy contenta por él.
— Por eso estás así de sonriente...
— Si, porque de cierta forma me da esperanza en el caso de mis padres, pero hay algo más. Me han contratado para diseñarle la nueva imagen a la repostería de su mamá e iré mañana a ver el espacio.
— ¿Puedo acompañarte? —Rey lo miró de soslayo—. M-Me gustaría verte en acción de nuevo eso es todo, pero si consideras que no está bien...
— Está bien, acompáñame, para que ya dejes de ponerte celoso de él y te des cuenta de lo agradable que es.
Ben suspiró. No podía decirle aún que ya lo había conocido cuando intentaba buscar el regalo de navidad de ella y su madre, que terminó patrocinando el escritor muy a su pesar.
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Last Christmas
FanfictionDiciembre comienza. El viento frío choca contra la piel. Es un frío que un abrigo no puede contrarrestar. Los aparadores de las tiendas y las calles están llenos de luces y armonía. Diciembre hace pensar a los corazones... Está ahí, el anhelo de al...