𝑫𝑬𝑨𝑫 𝑳𝑶𝑽𝑬 [𝖩𝖺𝗄𝖾𝖧𝗈𝗈𝗇]

Forty three

Sunoo por fin lograba comprender por qué Niki no quería enamorarse otra vez.

Tenía miedo de que esa persona pueda volver a morir.

Era un trauma.

Un trauma que el mismo Sunoo había provocado.

Un trauma que iba a ser difícil de quitar.

Niki seguía negándose a visitar a Taki en el hospital, porque sabía que sí lo veía otra vez, se aferraría a él y no lo podría volver a soltar.

Niki odiaba ser dependiente de las personas, desde que se enamoró de Sunoo, su estabilidad emocional dependía solamente del omega, ahora que ya no estaba y conocía a su destinado, sabía que dependería de él.

Pero no

Él ya no quiere volver a sufrir.

Lastimosamente era así.

Cuándo encontrabas a tu destinado dependías de él todo el tiempo, no importa si eres alfa, beta u omega, siempre vas a depender del otro.

Niki estuvo reprimiendo esos sentimientos desde que supo quien era Taki para su lobo.

Pero el omega no lo hizo.

Y ahora estaba sufriendo en aquel hospital por qué su alfa no se dignaba ni a llamarlo por teléfono.

Se sentía tan devastado.

Fueron muchas horas, pero Sunoo se quedó toda esa tarde al costado de Niki.

Viendo como seguía negando cualquier sentimiento hacia Taki.

Le dolía tanto el hecho de que él haya causado todo esto.

Tenía que hacer algo, debía hacerlo cambiar de opinión, tenía que hablar con él en persona.

¿Pero cómo?

Nadie podía verlo

Se le ocurrió una idea.

Pero necesitaba un permiso especial

—¡¡Minhee!!—

El ángel se apareció

—¿Me llamabas?—

—Sí, necesito tu permiso para algo—

—¿Qué tienes en mente?—

—Déjame entrar a los sueños de Niki, por favor— rogó

—¿Y de qué serviría eso?—

—Podría hacerlo entrar en razón, que ya no tenga miedo de perder a alguien más, y que se dé la oportunidad de volver a amar—

—Puedes decirle lo que sea, pero eso no garantizará que de verdad te haga caso— dijo el ángel —Mejor date por vencido con él—