𝑫𝑬𝑨𝑫 𝑳𝑶𝑽𝑬 [𝖩𝖺𝗄𝖾𝖧𝗈𝗈𝗇]

Ninety nine

Jake corrió hasta que llegó a un parque.

Se apoyó sobre un árbol y comenzó a llorar.

La brisa se hacía cada vez más intensa, parecía que en la noche habría mucho viento.

El sol desapareció en el horizonte dando a mostrar a la hermosa luna en el cielo.

Jake tenía miedo.

Sunghoon aún no sacaba teorías sobre lo que realmente había sido el problema.

Tampoco tardaría en darse cuenta.

No había duda de que lo culparía a él.

¿Pero cómo podría defenderse?

No había recolectado pruebas, solo tenía las memorias de lo que había visto y de lo que Sunoo le había dicho en el pasado.

Al final, ni siquiera tendría idea de lo que estaba ocurriendo si Sunoo no lo ayudaba.

El fantasma que sabía más cosas era él.

¿Pero cómo pondría de prueba que hablaba con fantasma si la idea de por sí era muy descabellada?

Es más, Sunghoon podría confirmar los rumores que alguna vez habían hecho de él, que estaba loco

—Luna, me siento tan perdido, ya no sé que hacer— dijo limpiando su rostro —Solo quería una vida tranquila, conocer el amor ... Yo no deseaba tener estos problemas— Jake miraba al cielo como si fuera la Luna a responderle —¡¡No te costaba nada darme un destinado!!— gritó con desesperación —Ahora mi amor correspondido depende de Sunghoon ... No debí meterme en esto ... No sabía que sufriría así— suspiró —Aunque ... En cierto modo agradezco tanto que Sunghoon pueda o haya podido amarme ... Él se convirtió en mi estrella—

Sunoo se había quedado con Sunghoon.

No le había parecido correcto el tono con el que se había dirigido a Jake, más si sé había preocupado por ver como se sentía.

El rostro de Sunghoon era uno que expresaba molestia, decepción y ahora mucho estrés.

El rostro de su omega lo terminó por romper.

Jamás había usado su voz de mando y mucho menos con Jake.

Su omega no se merecía este trato, había estado apoyándolo siempre, y él como cojudo le había gritado.

Lo llamó, pero Jake no contestó, decidió no insistir más, él había bloqueado su conexión.

Tal parece que ahora ambos querían estar solos.

Sunghoon entro a su auto y se recostó en el asiento, dando un largo suspiro.

Sunoo se sentó en el lado del copiloto.

—A veces me pregunto cómo es posible que seas tan tarado— decía el fantasma —No sé lo que es estás pensando ahora, pero por favor no lastimes a Jake ... Yo ya lo hice al obligarlo a ayudarme ... Jamás creí que esto pasaría—