Al veterinario

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PARTE 2/?

El día viernes habían planeado tantas cosas para poder atrapar al pequeño gato, o eso era lo que ellos habían pesado, pues el pensar en ponerle comida y esperar escondidos a que el gatito comiera para poder atraparlo tampoco era el plan maestro del año, pero era suficiente para ellos.

Además, tenían el permiso de sus madres para adoptar al gatito, esto a raíz de que, aunque la madre de Jungkook dijo que estaban bien tener al gatito, no estaba del todo segura de que pudieran tenerlo en el edificio de apartamentos, por ello es que la madre de Seokjin acordó que ellos podrían quedarse con el minino de ser necesario, y por supuesto, si fuera el caso Jungkook podría ir a verlo siempre que quisiera, pues el gatito sería de ambos niños.

Ahora solo faltaba esperar a que fuera lunes para poder atrapar al gatito y Seokjin no podía esperar a ello, paso todo el domingo ansioso con la idea, tanto que su mamá tuvo que llevarlo a dar dos paseos para que la idea estuviera algo escondida en su mente durante el día, solo que al regresar a la casa había vuelto a pensar en ello.

Al menos su hermana mayor logro hacerlo olvidar durante unas horas mediante la serie de pokemon y el juego de cartas. Por la noche lo dejaron con su pijama favorita puesta y luego de cenar se fue a dormir temprano.

El lunes por la mañana, se despertó él solito e incluso se fue a arreglar por su cuenta, con algunos detalles fuera de lugar en su uniforme que luego su hermana mayor se encargó de arreglar. El desayuno en la casa de Seokjin era silencioso, su madre solía leer cosas del trabajo mientras comía, él y su hermana por otro lado, simplemente se mantenían en silencio.

Heeyeon lo acompaño a la escuela, hablando de camino a esta él como atraparían al pequeño gatito, Seokjin estaba muy emocionado con la idea de tenerlo, aunque su hermana le tuvo que recordar que, en primera instancia, el gatito se quedaría con Jungkook.

—Mira, yeonnie, ahí está el gatito. —La dulce vocecita de Seokjin interrumpió lo que ella estaba diciendo, y al mirar a donde apuntaba el pequeño, que lo hacía con el dedo meñique, encontró a un pequeño gatito de varios colores.

De forma silenciosa y precavida, siguieron al mínimo, pues no querían asustarlo y que huyera de ellos. La mayor también preparo la lata de comida que compraron para cuando el pequeño animalito se detuviera, atraerlo a ellos con el alimento, de forma que pudieran tomarlo para llevarlo a un veterinario antes de alguna de las casas.

Mientras lo seguían, se encontraron con Jungkook y su mamá, siendo el pequeño quien se unió a la búsqueda del gatito con una enorme sonrisa, y la promesa de que irían a sus clases tan pronto como lo atraparan, aunque ambos niños habían cruzado los dedos en secreto.

—¿Crees que sea niño o niña? —Pregunto el castañito a su amigo en susurros, estaban viendo al gatito meterse a unas casas, parecía buscar algo mientras lo hacía, pues terminaba saliendo y buscando en otra parte.

—No lo sé, Jinnie, pero no importa, será nuestro. —Replico con una sonrisa el pelinegro.

—Lo querremos mucho sea lo que sea. —Acordó Seokjin sonriendo también.

Heeyeon solo los escuchaba y tomo sus manos para seguir al gatito nuevamente, llegando a encontrar que buscaba comida para llevarle a un perrito que estaba amarrado en un lugar algo desolado, aquello le rompió un poco el corazón a la mayor, ¿cómo alguien podía abandonar de esa forma a su mascota?, a veces odiaba a las personas. Lo peor vino cuando los menores le preguntaron porque estaba el perrito solo ahí, amarrado sin poder siquiera ir por agua.

Soltaron al perrito, y dividieron la comida para que ambos animalitos pudieran comer. Cuando ambos estuvieron listos, Jungkook tomo al gatito en los brazos, y Seokjin al perrito, ambos estaban encantados con el animalito en brazos y siguieron a la mayor hasta una veterinaria.

Estando ahí, les dijo que en lo que revisaban a ambos felino y canino, los dejaría en su escuela para que no se perdieran la clase, aunque los dos pequeños se negaron varias veces, terminaron aceptando una vez que estuvieron en las puertas de la escuela. No hace falta mencionar que tuvieron un regaño por llegar tarde, y que como "castigo", ayudarían a la salida con unas cosas para la obra.

Al menos pudieron hablar entre ellos para los nombres del gato y el perro.

Para el final del día, Seokjin se llevó al perrito Jjangu a su nuevo hogar, y Jungkook se quedó con la gatita Pepper.


Quiero pedir una disculpa :c se suponía que (de la última vez que publique) publicaría un capítulo por día o algo así, aprovechando que estaba de vacaciones de invierno, pero... fue un mes difícil xd ya no solo por las vueltas de Navidad y todo eso, sino que se me enfermo una de mis gatitas y entre el estrés de primero no saber que tenía por el de luego apenas tener el dinero para pagar todos los gastos, pues... fue un diciembre un poco feo, pero bueno, ya estoy en mi casita bella nuevamente e intentaré publicar más cositas de las que tenía planeadas originalmente 

También aprovecho para agradecerles que sigan leyendo esto, y a las personas que encontraron la historia mientras no estaba jeje

¡Feliz año nuevo! 

Sonrisas y Caramelos {Jinkook-Kookjin}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora