Un beso

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PARTE 4/?

La obra había sido un éxito, las mamás tomaron cientos de fotos de sus hijos, y las maestras estaban aliviadas de que no hubo incidentes de llantos o "repentinas desapariciones" de los actores. Desde luego que hubo momentos en que había que recordarles a los pequeños sus diálogos, o acciones en los casos más extremos, como cuando Taehyung tenía que "atacar" a la princesa, pero en realidad le invito a jugar al tomar su mano.

Incluso con esos detalles —que habían sido previstos por las maestras, todo salió mejor de lo esperado, y ahora los pequeños estaban con sus mamás, paseando por los pequeños puestos de cosas alrededor la escuela. Jungkook iba comiendo un helado de moras mientras su madre miraba alrededor.

—¿Te gusto actuar, calabacita? —Pregunto ella poco después de detenerse para comprar algo de comer.

—Sip, fue muy divertido. —Replico el pequeño con sus labios llenos de helado, haciendo reír un poco a su madre. Era algo bueno que Jungkook lo disfrutara, aun si no había tenido ningún dialogo en la obra.

Compartieron una orden de papas fritas, a petición de Jungkook, como siempre comieron en un silencio muy tranquilo, con el ruido ambiental de fondo, y para cuando terminaron, desecharon lo que había que antes de emprender el camino a la salida, donde Heeyeon les encargo a su pequeño hermano, pues ella aún tenía clases ese día y su madre había tenido una reunión de emergencia en su trabajo.

Así fue como Seokjin y Jungkook fueron de la mano el camino entero, cargando sus mochilas en la espada y hablando de lo genial que fue el mayor durante la obra. Jungkook no había tenido escenas con él, así que pudo verlo desde atrás del telón e incluso desde los asientos pues se había escapado cuando todas sus partes se terminaron, así que vio con sus ojitos brillos lo genial que era su mejor amigo. Wheein también lo hizo bien, pensaba el nene, pero en definitiva Seokjin era el mejor de todos.

Al llegar al departamento, dejaron las mochilas cerca de la puerta, ese día no tenían tareas que hacer, y fueron a jugar a la habitación de Jungkook, seguidos de la pequeña gatita que también quería jugar.

No era la primera vez que Seokjin iba a la casa de Jungkook, aquella vez ya había ocurrido y aunque el menor de los dos se sintió muy cohibido en ese momento, pues tenía menos cosas que el mayor y su cuarto también era más pequeño que el de Seokjin, el castaño en ningún momento hizo alusión a una burla por el tema, en realidad parecía más que encantado con las cosas de Jungkook, y ese día era lo mismo.

Seokjin lucia muy feliz de estar ahí. Jungkook estaba contento de estar con su amigo, tanto que olvido hacerle la pregunta que quería desde unos días atrás. El pelinegro no pidió el permiso que su mamá le dijo debía, simplemente se acercó a su mayor y le dio un inocente beso en la mejilla, quedando con sus propios cachetes rosas al separarse del castaño.

El castañito le miro algo sorprendido por ese beso, pero sus mejillas también estaban rosadas, el rojo de Seokjin le llegaba hasta a las orejas, así se avergonzado se encontraba por ello.

—¿Por qué fue eso, Jungkookie?

—Es que te quiero mucho, Jinnie. —Susurro el pequeño dentro de su vergüenza, le daba algo de pena admitirlo así, tan al aire, tan directo, sin embargo, también sintió algo muy bonito el su pecho al decirlo.

Él quería mucho a Seokjin, no había nada de malo en eso, ¿cierto?

—Yo también te quiero mucho, Kookie.

Los pequeños compartieron una sonrisa, y sonrojo más grande cuando Seokjin decidió juntar sus labios con los Jungkook, apenas un roce de no más de un par de segundos, pero ese era el primer beso de ambos, aun cuando todo era normal a su alrededor, se sintió como si fuera algo mágico para el par.

Un secreto que no tenían que compartir con nadie.

Luego de eso, fueron llamados a comer. Después de la comida esperaron en la sala a que la madre de Seokjin fuera por él, Jiyeon estaba vigilándolos de cerca pero no escuchaba la pequeña conversación entre los niños.

—¿Por qué ese beso, Jinnie? —Susurro el pequeño Jungkook. Los besos en los labios eran raros, le daban algo de asco en las películas, solo que... Ese que Seokjin le dio no fue asqueroso, fue algo bonito.

—Porque te quiero mucho, Yeonnie le da a su novio besos así cuando cree que no veo, y ella lo quiere mucho. —Explico el castañito con una sonrisa amable.

Para él tenía mucho sentido, como él y Jungkook se querían bastante, también podían darse esos besos, así como su hermana y él novio de ella, ¿cierto?, aunque Seokjin y Jungkook no eran novios, eran amigos, ¿habría algún problema con eso?

—Oye, Kookie, ¿quieres ser mi novio?

—¿Qué es un novio?

—Mm, es alguien a quien quieres y te quiere

—¿Y qué hacen los novios?

Seokjin lo pensó un poco, recordando las cosas que su hermana hacía.

—Pues ven televisión juntos y salen a jugar

—Oh, nosotros hacemos eso, ¿somos novios entonces?

—Yo creo que sí.

—Está bien, seamos novios. —Concordó Jungkook en un susurro, y una enorme sonrisa en su boca.

Sonrisas y Caramelos {Jinkook-Kookjin}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora