Mientras JiMin está de viaje, su novio JungKook lo engaña con una mujer que ha estado viendo por meses... Pero lo que JungKook no se espera, es que JiMin llegue antes de tiempo y se entere de la verdad.
JungKook tardará en entender que clase de teso...
—¿Y qué es eso que me quieres decir? —me pregunta JiMin; está hostil.
—Ese es el problema JiMin. No sé cómo decírtelo. —me paso la mano por mi cabello.
—Mira JungKook, no tengo tiempo para perder contigo. Tu Eliza, Melisa, Zali o como sea que se llame, se pondrá furiosa si me ve contigo y yo no quiero problemas con tu zorra. —nunca ví a JiMin tan agresivo—. Yo me tengo que ir, mi pareja me está esperando.
Duele que él mismo me lo diga a la cara.
—¿TaeMin? —le pregunto.
JiMin agranda los ojos pero se recupera y me mira desconfiado.
—¿Cómo sabes su nombre? —pregunta—. ¿Nos estás vigilando?
—No... Solo... Lo sé. —no es momento de decirle que vivimos en el mismo edificio.
—¿Cómo lo supiste, JungKook? —me pregunta más calmado.
La clara diferencia de JiMin y Lisa.
—Te oí decirlo hace unos días... —murmuro.
—¿Cómo?
—Te ví hace unos días en la calle hablando con él y escuché su nombre. —miento.
—Mmmm... Bueno, no importa, me debo ir. Si no debes decirme nada, es mejor decir adiós. —hace ademán de irse.
Desesperado, me acerco, tomo su mano, le doy el sobre con el cuadro de su felicidad y la carta metida ahí.
—Toma esto por favor... —le pido cuando me mira asustado y confundido— Ahí dice todo aquello que mi boca no es capaz de liberar. Es mi manera de pedirte perdón, en un futuro y cuando tenga más agallas, te las diré en persona... —este es mi último recurso.
—No creo que sea lo más correcto aceptar algo de ti JungKook. En la carta te especifiqué que no quería nada de ti, ni que nos vinculará. —se suelta de mi mano y me extiende el sobre.
—Por favor... Solo acéptalo, es lo único que te pido.
—No Jung... —es interrumpido por una nueva presencia.
—¿Qué ocurre, caramelo? —pregunta el baboso sujetandolo de la cadera.
¡Suéltalo! No lo toques.
—Nada, mi amor —auch, justo a mi corazón...—. Solo tenía un problema con alguien de mi pasado. —me mira de reojo.
TaeMin me mira y alza una ceja.
—¿Quién es él? —le pregunta a JiMin.
—No es necesario que sepas quién es, no quiero problemas, solo vámonos. —JiMin toma su mano intentándolo alejar.
—Caramelo, dime quién es, te has puesto de mal humor desde que estás con él. —lo detiene y aprieta tu mano.
—Si te lo digo, cumplirás tu promesa y no quiero problemas. —murmura JiMin intercalando la mirada entre el baboso y yo.
¿Promesa? ¿Qué promesa?
TaeMin se tensa y lentamente suelta la mano de JiMin.
¡Al fin!
—JiMin, yo solo te he hecho una promesa —se gira lentamente a mi y parece un depredador listo para cazar—. Y esa era que apenas supiera quién es tu ex, lo golpearía. —aprieta sus puños.
Prepárate JungKook. El baboso nos va golpear y no lo vas a permitir. Si quiere una pelea, tendrá una pelea.
—Así que tú eres JungKook. —murmura con furia.
—Sí y tú TaeMin. —digo calmadamente.
—Te quiero preguntar algo. ¿Tienes idea de a quien engañaste? —se acerca lentamente.
—TaeMin detente, esa fue una absurda promesa, vámonos de aquí. —JiMin sujeta su brazo.
—No caramelo, yo jamás rompo mis promesas. Y le voy a dar una lección a este imbécil. —le dice pero no aparta su mirada de mi.
—¿Me quieres dar una lección? Bien, aquí estoy. No le pienso huir a un estúpido como tú. —lo reto acercándome solo un poco.
No quiero que JiMin me eche la culpa de esto.
—JungKook, tu cállate y mejor vete de aquí. —me pide JiMin intentando jalar a TaeMin.
—¿Por qué, JiMin? —le pregunto—. Yo estaba hablando contigo y él se metió a decir que me quiere dar una lección. Me la quiere dar, bien, estoy a solo un metro y medio, puede hacer lo que quiera, pero que no piense que me voy a quedar quieto.
—No digas estupideces JungKook. Solo vete de aquí, yo me encargo de TaeMin.
—Sí, vete de aquí cobarde, así dejas en claro cuántos huevos tienes. —me reta el imbécil.
—No me iré, pero tampoco voy a ser el que dé el primer golpe. No permitiré que al final de esto, JiMin me tome por el culpable al ser el primero en iniciar la pelea. —meto las manos en mis bolsillos.
TaeMin no sé cómo lo hace, pero se libera de JiMin y salta hacia mí...
Aquí vamos...
Mekuri y todos mood:
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