♪MENTIRAS♪ |Kookmin|

♪39♪

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JungKook

Llevo más de una semana y media, casi dos, evitando a JiMin. No sé qué haré cuando se me acaben las ideas.

También estoy evitando a Lisa. Lo bueno es que ya ni siquiera recibo una llamada de ella y eso me deja respirar en calma.

—¡Joder! —grito cuando una lata de pintura se cae sobre un lienzo que pensaba utilizar cuando acabará con este encargó.

Furioso termino los detalles del ridículo perro —que nuevamente me piden— me acerco al lienzo, ahora tiene tonos violetas y azules.

En realidad... Se ve abstracto pero hermoso. ¡Ya se qué haré con él!

Emocionado tomo el lienzo del perro y lo bajo con cuidado, intercambiandolo con el lienzo manchado.

—Tengo solo dos horas. —murmuro viendo el reloj en mi pared.

Muy bien Jeon, son las 2 de la tarde y a las cinco es la entrega. Dos horas para hacer la nueva pintura, se seque el perro y además te queda una hora extra para llegar al edificio donde se hará la entrega.

Tomo nuevas pinturas y las aplico sobre la paleta. Este será el mejor retrato de él...

♪♪♪

Son las 3:55 cuando por fin acabo la pintura de JiMin. Es el noveno retrato que hago de él. Todo mi estudio está lleno de su rostro o sobre él. Inclusive hay unos más íntimos de zonas específicas de su cuerpo. Como el retrato de su lunar en la clavícula que hice, o el retrato de su torso con ese ridículo tatuaje que se hizo cuando era adolescente.

Ninguno de los retratos los saque de una fotografía, todos y cada uno de ellos han salido de mis recuerdos tan nítidos que puedo sentir el aroma de su cabello, o su escencia natural, inclusive puedo sentir la suavidad de su piel.

Dime corazón, ¿por qué te aceleras cuando pienso en él? Deberías amar a Lisa, tal y como me lo hiciste sentir hace meses...

Suspiro derrotado por el remolino de sentimientos confusos que tengo.

Pero no lo hace Jeon, acéptalo. Ese amor que asegurabamos que sentíamos por ella, ya no está. Se fue tan rápido como llego.

Me dice mi subconsciente.

—¿Qué me está pasando? —exhalo con frustración mientras guardo el lienzo del perro y también uno que hice hace dos días; el retrato de la nueva felicidad de JiMin. Lo llevo a todas partes como recordatorio de que soy su pasado y él su presente y futuro.

Mejor nos vamos antes de empezar a llorar como ha sucedido desde hace días.

Tomo algo de dinero de mi paga adelantada y me voy.

—Lleveme a esta dirección, por favor. —le doy un papelito con la misma dirección de mi entrega anterior.

—Con gusto señor. —el auto arranca y el señor nos mete en las calles transitadas de Seúl.

La ciudad está particularmente calmada.

—¿Le importa si escuchamos algo de música? —me pregunta el conductor.

—No, claro que no. —niego con la cabeza mientras le sonrío un poco.

El señor enciende la radio y al segundo me arrepiento de mi decisión.

'It's You' de Ali Gatie comienza a sonar... Una canción que JiMin me dedico cuando empezamos formalmente nuestra relación.

Y como bien masoquista que soy le digo unas palabras al señor.

—Puede subir el volumen, por favor.

La música comienza a sonar más fuerte y se cala en mi interior.

Lo siento Minie... No cumplí la promesa y al final si termine rompiendo tu corazón... Aquel que una vez decidí cuidar con mi vida...

Me pierdo en el río de pensamiento entorno a él... ¿Por qué me duele tanto pensar en él? ¿Por qué duele ver que siguió su vida dejándome en el olvido? ¿Por qué se sigue sintiendo incorrecto estar con Lisa? ¿Por qué ya no la amo?

—Señor ya llegamos. —me avisa el conductor.

Bajo del vehículo y le pago.

—Gracias. —le grito mientras entro al edificio.

Todo está igual y veo la misma recepcionista.

Melancólico me acerco a la chica y llamo su atención.

—Buenas tardes señorita, soy Jeon Jung... —me interrumpe.

—Sé quien es señor Jeon, lo recuerdo de la última vez —me sonríe—. Pase al último piso. El señor Liu lo espera.

Agradeciéndole me subo al elevador y repito todo el proceso de la vez pasada.

Luego de esperar cinco minutos en las sillas, por fin me dan el acceso a la oficina.

Entro y el señor Liu me está sonriendo.

—Señor Jeon, es un gusto tenerlo nuevamente por acá. Por favor tome asiento.

—Gracias. —le digo cuando me siento.

El señor Liu mira mi entrega con emoción. Yo la tomo y mientras la saco, se sale el cuadro de JiMin.

—Lo siento. —murmuro.

Le paso el lienzo que me encargo y me agacho para recoger el de JiMin.

—Tan perfecto e impecable como el anterior. Realmente sabe cómo satisfacer con cada cuadro. Verdad Jeon —me sonríe y poza su mirada en el cuadro de mis manos—. ¿Me permite verlo?

Algo desconfiado se lo paso y él lo mira detalladamente.

—¡Woow! —exclama—. Es inclusive más impresionante que el cuadro que le encargué. ¿Quién es?

Primer capítulo del día. Espero les guste. Este capítulo también va en dos partes, la siguiente en unos minutos la subiré.

Disfruten el fanfic.

(Cuando estaba editando otra cosa, sin querer me metí a este cap y obligadamente tuve que editarlo 🤦🏻‍♀️)

EDITADO