♪MENTIRAS♪ |Kookmin|

♪26♪

JiMin

Cuando el taxi se detiene, pago y camino a la academia.

Muy bien JiMin, hoy no está HoSeok para guiarte... No es tan difícil, es el mismo salón de la vez pasada. Además, son las 9:00 y la clase comienza a las 9:10, lo que significa que tienes diez minutos para perderte.

Camino por lo pasillos, pero está vez con mucha más confianza que las veces anteriores.

Y cuando menos me doy cuenta, estoy al frente del salón BC-2. ¡Muy bien JiMin! Lo hiciste tú solito.

Y por algún motivo, mi propio cumplido me hace sentir como un niño pequeño que amarra las agujetas de sus zapatos sin ayuda de nadie.

Entro al salón y me voy directo a los vestidores, me quedan ocho minutos para cambiarme y calentar.

Una vez listo con mis pantalones de chandal grises y mi camiseta negra, salgo del lugar viendo ya a la mitad de la clase en el lugar.

—Buenos días —los saludo caminando hacia el equipo de sonido para preparar la música de la USB—. Por favor vayan a cambiarse, en unos minutos iniciamos la clase.

Mientras preparo todo lo que necesito, llegan los demás alumnos y también van a cambiarse.

Una vez todo están listos, calentamos durante quince minutos.

Que raro, ¿dónde están los piropos y coqueteos?

—Están muy callados hoy. —me giro para verlos y noto el porqué de su silencio.

Todos, absolutamente todos mis estudiantes están viendo mi retaguardia... Y sé el porqué del motivo.

Mal día para usar tu pantalón de chandal con un dibujo de pollito estampado en el culo.

—Desde ahora los pollos serán mis animales favoritos. —comenta Min Ho.

—Concuerdo contigo, hermano. —dice otro y nadie deja de mirar mi trasero.

—¡Oigan! Mis ojos están aquí arriba —los señalo con mis manos—. Por cierto, si creen que la clase pasada fué muy dura, créanme que con esta sentirán que la anterior fue solo una caricia mía.

—Ay no profe —se queja una chica—. Aún me duelen los músculos.

—Hoy será distinto el método de baile, sí, será contemporáneo, pero mucho más rápido, como cuando van a un concierto de música clásica y están llegando al final de la canción —ignoro su queja y enciendo el equipo de música—. Quiero que miren mis pasos, solo bailaré una vez. Y quiero cada uno de ustedes me repita como mínimo cinco pasos de los que bailaré. Cada vez que alguien no lo consiga, repetiré la música y todos deberán bailar la coreografía guiados por mi. Si al finalizar la clase, alguno de ustedes no se ha aprendido esos cinco pasos, bailaremos la nueva coreografía y la de la clase anterior.

Escucho sus quejas.

—Siguen con las protestas y serán dos coreografias las que haremos, sin importar si todos se saben los cinco pasos —de inmediato todos se callan—. ¿Listos? Aquí voy. —reproduzco la música y comienzo a bailar.

♪♪♪

—Nos quería asesinar, cierto profesor. —se queja una chica estirando.

—Creo que bailamos la coreografía un millón de veces y todo por culpa de Lee y sus amigos. —otra chica comenta mientras los mirá de muy mala forma.

Ellos solo sonríen a modo de disculpa.

—La próxima vez que se distraigan viendo los glúteos del profesor, yo misma los haré sufrir, ¿me oyeron? —los amenaza otra chica alzando su puño.

Así es, el grupito de niños hormonales se la pasaron viéndome el culo toda la clase y no eran capaces de recordar ni medio paso.

—Está bien, será la última vez —Min Ho se gira hacía mi—. Pero profesor, por favor ayude con la causa y no vuelva a traer ese pantalón. Ese pollito nos atraía con la mirada.

Sonrío malvadamente y decido seguirle el coqueteo.

—Mala suerte para ti, son mis favoritos y me dan buena suerte así que los traeré tres de las cuatro clases que doy a la semana —me encojo de hombros—. De todas formas disfrutarán la vista.

Min Ho se sonroja y va con los demás estudiantes a cambiarse. Me río, ¿dónde quedó el muchacho coqueto?

Cuando todos se van. Camino a los vestidores y me cambio. Hoy fue una buena clase.

Cuando estoy listo, tomo mis cosas y me voy con la botella de agua en la mano, mientras bebo cada cierto tiempo.

Salgo del salón y camino distraídamente, hasta que alguien choca contra mi y me echa el agua encima.

Refrescante... Estoy sudado de todos modos.

—Oh dios, perdón, como lo siento. —se disculpa la persona frente a mi y la miro.

Que guapo es.

—Disculpa, es que me perdí y andaba distraído encontrando un lugar con el cual orientarme. —me extiende su mano y me pongo de pie.

—No te preocupes, te entiendo a la perfección —más de lo que crees—. Y tenía calor así que me ayudaste. —me río.

—De todas formas me siento mal, déjame compensarte —me mira sonriente—. ¿Qué te parece si te invito un café?

—Ehhh no... —su sonrisa se borra lentamente—. Estoy acalorado, no quiero bebidas calientes, prefiero que me invites una malteada o un jugo. —no sé por qué estoy coqueteando con él.

Su sonrisa vuelve.

—Hecho —estira su mano y la estrecha con la mía—. ¿Tu eres...? —me pregunta.

—JiMin, Park JiMin. —sonrio.

—Lee TaeMin. Un gusto, JiMin. —aprieta mi mano suavemente.

—Lo mismo digo TaeMin... —mi sonrisa se hace más grande.

Coff coff empezando a entrar en la trama principal coff coff.

Espero les guste el capítulo. Los amo muchísimo. Coff coff. Me dió mucha tos 🙄

EDITADO