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—¡Joven Jeon Jungkook!—le llamó el maestro, notando como el chico estaba distraído en su clase—Le hice una pregunta.

Jungkook subió su mirada, dejando de golpear el pupitre con el lapicero, no recordaba hace cuanto minutos se quedó blanco de su mente, ido viendo algún punto vacío entre el suelo y la pared.

<<—Ve a dormir, tienes clases mañana—habló el omega que se liberó de las manos de aquel alfa y abrió la puerta del cuarto.

—Hoseok...¿puedes por lo menos bañarte? lo preparé para tí, lavaré los platos para ayudarte.

El omega dirigió su mirada a la tina y luego enfocó su rostro en el alfa y afirmó con lentitud, Jungkook salió del baño y cerró la puerta consigo>>

El alfa reaccionó.Ni siquiera tenía idea cual era el tema que estaban enseñando. Dirigió su mirada a otro lado, no estaba de buen humor, últimamente no, todo parecía irse en quiebra, realmente parte de los problemas tenía que ver con Hoseok con sus cambios de humor y parte de su rechazo.

Sobre todo lo último, en esos días parecía que el omega estaba evitandolo. Además, más tarde tenía que ir a su trabajo y eso le consumía mucho tiempo y hacer sus tareas, estudiar y dormir, le era más difícil. Jeon Jungkook estaba irritado.

—Lo siento, no presté atención—agregó con desánimo.

—¿Entonces a qué viene? ¿Usted piensa que la escuela es un juego o algo? Sus notas incluso han bajado.

Jungkook se mordió con rabia el interior de la mejilla.

¡Claro! Para otros era el alumno perfecto, el que debía sacar buenas notas: ¿Cuánto tiempo podría llevar todo eso antes de derrumbarse?—¿Acaso tengo que ser siempre perfecto? ¡También tengo mis problemas!—alzó la voz el menor.

Yoongi dio un respingo cuando aquel joven dio un golpe duro contra el pupitre, jamás había visto tal actitud de su amigo. Jungkook no lo pensó más, empezó a meter sus cuadernos y demás utensilios dentro de la maleta, necesitaba paz, y en ese lugar, no la conseguiría.

Gruñendo y diciendo palabras en bajo, aquel chico salió por la puerta, bajo la sorprendida mirada del maestro y los alumnos. Yoongi se rascó un poco la cabeza, contemplando al profesor, quien solo negó con la cabeza diciendo—¡Solo eso faltaba, ser un irrespetuoso!—Yoongi gruñó un poco para tomar también sus cosas y salir detrás de aquel chico.


Jungkook caminaba a pasos apresurados, no estaba bien, claramente lo sabía, él siempre trataba de mantenerse en un estado de calma, jamás le tomaba importancia a las quejas y a los insultos, porque sabía que al final del día, vería la sonriente cara de Hoseok, y eso bastaba para sonreír él también y apaciguar sus males interiores. Pero luego de aquella noche muchas cosas habían cambiado, era recibir el rechazo del omega que él marcó: ¿Qué estaba haciendo realmente mal? trataba de dar lo mejor de sí; pero para Jung Hoseok no parecía suficiente.

—¡Jungkook!—escuchó una voz familiar a la lejanía, el menor suspiró con pesadez, no quería ser grosero con su amigo—Espera...

—Yoongi, ahorita no es el momento. Tengo que irme—comentó.

—Entonces nunca será el momento—dijo este tomando al chico de las muñecas—Necesitamos hablar, sé que no estás bien.

Jungkook no dijo nada, dejándose jalonear por aquel omega, ambos empezaron a salir de la puerta principal de aquel instituto. Al salir el menor vió aquella pandilla de motociclistas. Yoongi se acercó al líder, que ante aquella sorpresa, se sobresaltó un poco y parecío ofrecer una sonrisa. El alfa mayor dirigió su mirada a Jungkook, el cual se cohibió de hombros sin entender tampoco la situación.

JungHope|| The baby and WHO?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora