JungHope|| The baby and WHO?

[33.3]

—Parece que el vámonos a la verga no funcionó—dijo el señor Jung en murmuro mientras tenía su cabeza gacha.

—No te preocupes, se como salir de esto, solo sigue lo que diga, Entendido papi?— Hoseok tragó con dificultad mientras trataba de calmar a su hijo que parecía pegar el alarido de llanto en cualquier momento entre sus brazos.

La señora Jung estaba de brazo cruzados, con una toalla de bata enrollada igual que Jungkook, ambos estaban siendo fichados mientras la mujer alfa policía estaba sentada a lo lejos en una silla con una bolsa de hielo, con heridas graves.

Uno de los compañeros de la oficial anotaba los datos en la computadora, era un hombre muy robusto, con bigote que en ningún momento se había quitado los lentes oscuros, a Hoseok no le daba buena pinta aquel tipo. Al quitarse los lentes, depositandolo sobre el escritorio, el omega pelirrojo enarcó una ceja sorprendido por el buen aspecto del tipo.

En eso enfocó sus ojos sobre Jungkook, a comparación de un estereotipo de alfa, no tenía mucho rasgos tan varoniles o secos, eran más suaves y sus ojos eran muy grandes como los de un cervatillo y cuando sonreía, daba un aspecto demasiado tierno.

—Atacaron a una oficial de policìa, ¿tienen algo que decir en defensa?—preguntó aquel hombre depositando sus ojos sobre la señora Jung y Jeon Jungkook.

—Iba atacar a nuestro nieto—se quejó la señora Jung señalando a la oficial con un arqueo de ceja—esa extraña quería poner sus manos sobre el cachorro.

—¡No es así!—dijo la mujer acercándose un poco adolorida—el joven alfa tiene problemas mentales, es el hermano pequeño del pelirrojo; creí que estaba siendo atacado por esa persona—señaló a la señora Jung.

Hoseok tragó más duro cuando la mirada de sus dos progenitores se enfocaron de un golpe sobre él tratando de comprender porque esa joven mujer había pronunciado semejante idea.

—¡Mi hermanito siempre reacciona de ese modo cuando alguien se le acerca al bebé!—contempló al compañero de la oficial—tal vez usted no lo sepa; pero es un poco especial.

La oficial afirmó muy segura.

—Sí, además de eso, el pobre omega cuida solo de su hijo. Es padre soltero y tiene mucho con la carga de su hermanito que es medio-...

—Medio pendejo—susurró en bajo Hoseok.

—Medio-pendejo—Jungkook puso los ojos en blanco y suspiró al escuchar aquello, el ceño de la alfa Jung se frunció más, incomprensible ante esa situación—. Su padre vive del alcoholismo y es un maldito desgraciado que vive de las apuestas y se va solo con esas mujeres trabajadoras sexual—dijo aquella alfa policía defendiendo a Hoseok.

El señor Jung al escuchar aquello contempló a su hijo con los ojos bien abiertos, de la esquina de sus ojos casi se formaban unas lágrimas que deseaban escapar. Hoseok al ver el rostro triste de su padre, agachó la cabeza avergonzado.

—Entiendo—dijo aquel compañero de la oficial con mucha seriedad para luego cruzar sus brazos.

—¡Y no solo eso!—prosiguió ella—su madre se murió hace unos meses, estaba muy deprimida, la ancianita no pudo con aquello y bueno, sabrá usted...—miró a los lados para luego susurrar—, estiró la pata.

La señora Jung casi se le rompe la quijada al escuchar eso, se rascó la cabeza contemplando a su hijo, Hoseok estaba que quería huir con todo bebé a como pudiera y librarse de la situación.

—Entonces dice que ellos ya han estado aquí antes—prosiguió aquel alfa oficial mirando con mucha sospecha a los cuatro y luego al bebé.

—Sí; pero no es culpa del joven Hoseok—defendió la policía—él siempre trata de dar lo mejor—dijo ella con mucha lástima—. Algunos padres son tan malditos que no piensan en sus hijos, y esos progenitores que le tocó al chico, deberían estar perdiéndose en el infierno—ella dio una gran respiración poniendo su mano en el corazón—.Y no se diga del cabrón que lo embarazó y huyó con la noticia del embarazo.